Las guarderías del IMSS verifican cartilla de vacunación
Elsa Rodríguez Osorio, Salud lunes 28, Ene 2019Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- El virus del papiloma humano es más común entre las jóvenes
- La incontinencia fecal, afecta a adultos mayores de 65 años
El IMSS instruyó a todas sus guarderías a reforzar las medidas de prevención durante la “Temporada de influenza estacional 2018-2019”. Y durante enero se realiza levantamiento de información en las 1,418 guarderías del Instituto, con la finalidad de verificar que niñas y niños inscritos en ellas cuenten con el esquema básico de vacunación incluido en la Cartilla Nacional de Salud. En los casos en los que se identifique que la cobertura de vacunación es incompleta, se realizarán las gestiones necesarias y se coordinarán esfuerzos con las instancias competentes para corregir esta situación. Las guarderías del IMSS realizan el seguimiento puntual del Esquema Básico de Vacunación, informando a los usuarios cuándo deban ser aplicadas y las fechas de las campañas que contemplan las Semanas Nacionales de Salud. Todas estas acciones se llevan a cabo como parte del control de inmunizaciones, proceso que consta de una serie de actividades que se deben llevar a cabo de manera obligatoria al ingreso y durante la permanencia delos pequeños el centro de atención infantil. Con estas medidas, el IMSS fortalece la atención preventiva y favorece el desarrollo de los cerca de 200 mil niños inscritos en sus guarderías.
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La Dra. Margaret E. Long, ginecóloga y obstétrica, de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, explica las diferencias e importancia de los exámenes de Papanicolaou y el análisis del virus del papiloma humano o VPH. El primero es un análisis de detección que sirve para revisar si hay células anormales en el cuello del útero, porque eso indicaría la presencia de un cáncer incipiente del cuello de útero o de células precancerosas. Por otro lado, el del virus de papiloma humano. VPH, es importante porque cuando el virus está presente, aumenta el riesgo para cáncer del cuello del útero. El cáncer cervicouterino se produce en las células del cuello del útero, o sea, en la parte más baja del útero que se conecta con la vagina. Este tipo de cáncer rara vez produce síntomas en las primeras etapas; sin embargo, cuanto antes se lo detecta, más probabilidad hay de tratarlo eficazmente. Por ello, es fundamental llevar a cabo detecciones regulares para cáncer del cuello del útero, mediante un análisis del VPH y un examen de Papanicolaou o ambos. Se pueden hacer al mismo tiempo con la misma muestra celular. El virus del papiloma humano es una infección común de transmisión sexual que interviene en la aparición de casi todos los cánceres del cuello del útero, y se disemina a través del contacto sexual. Es muy común entre las jóvenes; por ello, los resultados de este análisis dentro de ese grupo etario a menudo son positivos, aunque después de uno dos años suelen desaparecer y dejan de ser motivo de preocupación. No todos los tipos de virus del papiloma humano aumentan el riesgo para cáncer del cuello del útero. La vacuna protege contra los tipos del VPH con mayor probabilidad de causar cáncer del cuello del útero y funciona mejor cuando se la administra a niñas, a partir de los 9 años, aunque ahora se la ha autorizado para mujeres de hasta 45 años.
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La incontinencia fecal, es un padecimiento que afecta a hombres y mujeres a partir de los 55 años y principalmente a adultos mayores de 65 años, según datos del Hospital General de México. La incontinencia fecal, también llamada problema de control intestinal, se denomina a la pérdida parcial o total de la capacidad para controlar voluntariamente la expulsión de gases y materia fecal. Representa un serio problema que invalida física y socialmente a quien la padece, disminuyendo notablemente su calidad de vida. Cualquier persona puede presentar síntomas de incontinencia fecal, sin embargo, el padecimiento es más frecuente en mujeres de edad avanzada. Las causas pueden ser diversas: diarrea, estreñimiento, daño o debilidad muscular, daño a los nervios, pérdida de elasticidad en el recto, parto vaginal, hemorroides, entre otras. Existen diferentes alternativas para tratar el problema desde las más simples como medicamentos antidiarreicos, hasta tratamientos mínimamente invasivos para casos avanzados que funcionan a través de radiofrecuencia en los músculos del canal anal, lo que permite fortalecer el tejido y mejorar notablemente los síntomas de incontinencia.