Hombres y mujeres patriotas en la lucha por la democracia sindical petrolera
Francisco Rodríguez lunes 14, Ene 2019Índice político
Francisco Rodríguez
El 18 de junio del 2011, en asamblea abierta, Mario Rubicel Ross García, dirigente de la sección 44 de trabajadores petroleros, fue electo secretario general del STPRM por primera vez. Su ascenso era indispensable para participar de lleno en la campaña electoral del año siguiente. La fuerza petrolera tenía que ser decisiva para la democracia.
En aquella ocasión, Carlos Romero Deschamps fue repudiado por la base obrera y, a contrapelo de la voluntad de los trabajadores, como era su costumbre, se opuso a acatar la decisión, lo que consiguió con el apoyo del régimen pripanista. Se fue con todo contra el dirigente democráticamente elegido.
Espuriamente, apoyado por la Judicatura tabasqueña y por las fuerzas policíacas de esa entidad, asestó un golpe criminal arrestando al nuevo dirigente con lujo de fuerza y recluyéndolo en el penal de Villahermosa por espacio de siete largos meses.
Absuelto por falta de cargos imputables, Ross García recuperó la libertad a pesar del autoritarismo reinante y prosiguió su trabajo de organización y de lucha sindical. Con su enjundia, consolidó el apoyo de las 36 secciones del STPRM, hastiadas de las persecuciones, crímenes y abusos económicos de Romero Deschamps. Ross logró construir una plataforma sólida de solidaridad combativa.
Hoy, Mario Rubicel Ross García es el líder indiscutible, la única opción del movimiento de protesta y de la lucha por las reivindicaciones sociales de sus compañeros del Sindicato Nacional Petrolero. Es el mejor aliado que tienen los mexicanos en esta etapa de la historia de México y en sus afanes de independencia y soberanía del sector energético.
En todo tiempo ha sido acompañado en el campo de batalla por Concepción Covarrubias Fajardo, una brava y resuelta militante gremial de la sección 15 de Salamanca, Guanajuato, donde ha dado muestra indudable de valor y de compromiso sindical. Es una de las mujeres mexicanas que demuestran con hechos el porqué la lucha obrera necesita de su participación.
Del 10 al 28 de agosto del 2010, Concepción Covarrubias inició la revuelta sindical petrolera contra el opresor. Se instaló con la protección de otros trabajadores de distintas industrias en lucha, en una huelga de hambre emblemática en la plancha del Zócalo de Ciudad de México. Resistió agresiones, amenazas y todo tipo de injurias por parte de los sicarios de Romero Deschamps.
Salió airosa, arropada por los trabajadores petroleros y electricistas de la oposición y, sumada al movimiento de Mario Rubicel Ross García, ambos completaron durante largos años la tarea de unir a la oposición petrolera alrededor de banderas legítimas y esperadas durante mucho tiempo, largas décadas durante las cuales las familias petroleras pagaron el pato a un costo demasiado alto.
Después de la huelga de hambre, exitosa en todos sentidos para inyectar aire fresco a la lucha sindical, Concepción Covarrubias fue perseguida por los sicarios petroleros. Los vendedores ambulantes del barrio bravo de Tepito le dieron cobijo en sus domicilios particulares para poder ofrecerle seguridad física durante dos años, garantizar su integridad personal y sortear las amenazas de muerte.
La de Covarrubias es una de esas historias de las que está repleta la lucha mexicana por la libertad. La conciencia de clase que otorga el combate contra las fuerzas represivas del régimen pripanista les ha dado a ambos luchadores un impulso inédito, que responde ampliamente a las esperanzas de los obreros para mejorar su condición y lograr los propósitos para los que fue constituida la empresa productiva estatal, Pemex, la casa común.
Acorralado, sin apoyo obrero y desprestigiado por su participación en el huachicoleo y el robo de combustibles a través de las pipas que controla, más el atraco a Pemex, y el asalto a los fondos sindicales y a la seguridad e integridad de los trabajadores, Carlos Romero Deschamps siente pasos en la azotea.
Un boletín de Televisa quiso deslindarlo de su rapiña en el STPRM, pero eso indignó más a las bases trabajadoras. Como no pudo obtener la gracia del nuevo régimen, acudió al amparo para suspender actos judiciales que lo involucran en centenares de ilícitos. Creyó que eso lo blindaría.
Lo que no pensaron los abogados que le sirven de tapadera inútil, fue que, según toda la legislación vigente, el amparo no procede cuando el acusado es sospechoso de delitos graves e imprescriptibles. La suspensión del acto reclamado sólo le sirve para sentarse a declarar ante la PGR, no para evitar su detención.
Avalanchas de opinión pública en México piden justicia en este caso… como en otros. No es posible que un cacique sindical déspota y archimillonario en dólares pueda librar el enojo que ha provocado. No es posible que implore la justicia quien siempre se ha reído de ella, piensan los sensatos. Romero Deschamps no tiene para dónde hacerse. Le llegó la hora. Cero corrupciones y cero impunidades es la consigna del nuevo régimen mexicano.
Los trabajadores han tomado el edificio sindical, controlado por Romero Deschamps durante cerca de treinta años. El gremio petrolero está entusiasmado de saber que por primera vez tendrá el acceso a la reivindicación de los postulados estatutarios, tan burlados por el régimen pripanista y los dirigentes que se van para nunca volver.
Mario Rubicel Ross García y Concepción Covarrubias están empeñados en dar un nuevo rostro del gremio petrolero, una fisonomía que sea acorde al nacionalismo patriótico que debía haber presidido toda su historia. Deben tomar acciones inmediatas que son indispensables:
Afianzar las conquistas salariales y sociales de los trabajadores petroleros, recuperar los fondos sindicales que Romero Deschamps y su contlapache Ricardo Aldana poseen a su nombre en cuentas neoyorquinas, texanas y paraísos fiscales por un monto conservadoramente calculado en 53 mil millones de dólares, hacer efectivas las más de un centenar de demandas que han incoado los obreros petroleros…… participar con la Comisión Nacional de Hidrocarburos en la definición y selección de las zonas exclusivas terrestres y marítimas en aguas someras, donde se encuentra enterrada una riqueza incalculable y cuyos contratos de explotación se estaban despachando y asignando sin licitación miembros prominentes de las mafias pripanistas…
… lograr de una vez por todas que la experiencia acumulada de los trabajadores petroleros sea respetada en los contratos con empresas extranjeras para que participen en la aplicación de las tecnologías de punta y en todas las operaciones en su calidad de propietarios originarios de la industria…… llevar a cabo un ambicioso programa de capacitación laboral, más uno de autosuficiencia alimentaria para las familias que circundan los campos petroleros, productos no perecederos a buen precio que alcancen para satisfacer los índices de bienestar, respetar los entornos ecológicos y acabar para siempre con el caciquismo y las privatizaciones descarnadas.
La nación requiere que los trabajadores petroleros, esencialmente resueltos y combativos, participen en reforzar la seguridad de las instalaciones y de los ductos petroleros y gasíferos. Es una demanda apremiante y de gran contenido popular.
El país requiere regresar a los altos índices de producción petrolífera que lo caracterizaron en el pasado reciente, cuando la orientación sindical era realmente progresista. Pemex debe volver a ser la industria emblemática de los mexicanos bien nacidos. ¿No cree usted?
Índice Flamígero: “‘Salió más caro el remedio que la enfermedad’. Así opinan los enemigos de AMLO acerca de lo que está ocasionando la manera en la que el Presidente de la República está combatiendo al huachicoleo. Pero ya no era posible posponer más una solución definitiva. Autoridades y trabajadores de Pemex, políticos y empresarios se beneficiaban con ese ilícito y, al ver mermadas sus ganancias, están mostrando su inconformidad. Por supuesto que también a simples ciudadanos les está afectando la escasez de gasolina, parte de ella provocada premeditadamente para ocasionar malestar. Pero no queda duda de que después de la tormenta vendrá la calma y al estar ésta bien cimentada nos será muy provechosa. Desde siempre López Obrador ha recibido críticas, muchas veces infundadas, por las acciones que ha emprendido. Cuando presentó el presupuesto para el presente año en el que había una disminución para las instituciones de educación superior se le volvió a censurar. Antes de formarse cualquier juicio es necesario conocer cómo utilizan sus recursos económicos algunas de ellas. La UNAM, la UANL y la BUAP prestan sus siglas a equipos profesionales de pambol. ¿Los estarán financiando? Si así fuera, sería un despilfarro inexplicable. Qué bueno que López Obrador se decidió a limpiar esa cloaca inmensa en que los presidentes anteriores convirtieron a México. Ojalá que no desmaye y continúe haciéndolo”, opina don Miguel Ramírez, desde Torreón, Coahuila.
www.indicepolitico.com
pacorodriguez@journalist.com
@pacorodriguez