¿Hacia dónde va el turismo en 2019? • I
¬ José Antonio López Sosa jueves 3, Ene 2019Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
[ Primera Parte ]
Una de las interrogantes que ha traído la nueva administración federal es con relación al turismo, particularmente tras la decisión de liquidar al Consejo de Promocion Turística de México (CPTM) y de canalizar los recursos que tenía por vía del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (FONATUR) para la construcción del Tren Maya.
Para echar adelante esta estrategia, sin lugar a duda hay una simbiosis entre el poder legislativo y ejecutivo.
Buscamos a ambos para tener una explicación clara.
Por parte del legislativo entrevistamos al diputado Luis Alegre, presidente de la Comisión de Turismo de la cámara baja y miembro de la fracción parlamentaria de Morena; por parte del ejecutivo seguimos en la “larga lista” para que nos conceda una entrevista el secretario de turismo federal, Miguel Torruco, de quien no hay posibilidad alguna —hasta ahora— de entrevistar.
Si bien el CPTM fungió como la caja chica de diversas administraciones, se despilfarraron recursos entre unos cuantos y la corrupción fue el eje durante décadas, al final del día era un ente que promovía a México en el mundo.
Con relación a su eventual desaparición, el diputado Alegre nos confirma que tanto el CPTM como PROMÉXICO, serán absorbidos por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), que los agregados en la materia desarrollarán esas funciones y que el objetivo principal, es que los mercados que ya están siendo explotados crezcan en cuanto a las divisas que gastan en nuestro país y no necesariamente en cuanto a número de visitantes.
Al respecto, este reportero considera que, se requeriría de una enorme capacitación para que el personal del Servicio Exterior, cumpla con las funciones de promoción turística en el extranjero que, más allá de hacer la promoción oral y/o con presentaciones de nuestro país, requiere reuniones periódicas con operadores mayoristas y minoristas, así como un amplio conocimiento del sector y no solo del mercado, en lo general y lo particular de cada país donde México tiene una presencia turística importante.
¿Había “becas” en el CPMT?, ¡sí!, ejemplo de ello era la permanencia del hermano de Joaquín Gamboa en la oficina de la costa oeste de los Estados Unidos o de la carísima operación de la oficina en Berlín.
Ahora bien, para elevar el gasto per cápita del turismo internacional no basta con tener la voluntad política o cerrar una oficina de promoción en el exterior, se requiere de crear producto turístico y afinar el que ya existe, creando experiencias de lujo con la infraestructura correspondiente, cosa que con el crecimiento desmedido de los todo incluído y, la falta de lineamientos claros en los programas de desarrollo —de FONATUR, por ejemplo— no permiten que haya un producto de más valor en nuestro país, no únicamente que se cobre más caro.
(Continua mañana)