Andar por la dehesa
¬ José Antonio López Sosa miércoles 19, Dic 2018Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Extremadura, España.- Amamece en la Dehesa de Solana poco después de las 8 y media de la mañana, es otoño y la niebla cubre el campo y los montes vecinos.
Unas buenas migas, café y embutidos fueron nuestro desayuno, así es como comienzan su día los del campo en esta zona de España desde hace décadas.
Estamos en época de Montanerq, el tiempo donde las encinas y alcornoques maduran su fruto, la bellota que sirve de alimento para el ganado y sobre todo, para el cerdo ibérico que producirá jamones de primera calidad.
La dehesa es un ecosistema creado por el hombre a partir del bosque mediterráneo, donde se aprovechan al máximo las especies endémicas para el aprovechamiento agropecuario.
Recorrimos kilómetros entre vacas, venados y cerdos ibéricos, todos comiendo en la dehesa, todos formando parte del escenario natural extremeño entre el cielo azul y los campos verdes.
Los cerdos ibéricos llevan una vida envidiable, en los siguientes tres meses comen bellota y pasto hasta más no poder, en medio de un panorama tranquilo entre charcos con figura de lagos y grandes encinas que les dan sombra.
Es difícil imaginar que detrás de un trozo de jamón ibérico está la dehesa, la inmensidad y la naturaleza. Ignacio Peyró
-dueño de la dehesa- y la gente de Ham Passion nos acompañaron y explicaron las peculiaridades del sitio.
Nada se compara con caminar y ver la dehesa al amanecer, es una imagen que forma parte del proceso del jamón.
De los secaderos y la producción final, de eso hablamos mañana.