¿Por qué se reía Duarte?
¬ Augusto Corro martes 2, Oct 2018Punto por punto
Augusto Corro
¡¿Esposado y en manos de la policía, el ex gobernador Javier Duarte, de extracción priísta, sonreía y seguro que hacía esfuerzos para no soltar la carcajada. Así aparecía en las fotos que le tomaron cuando llegó a México extraditado de Guatemala.
¿De qué se reía o por qué se reía?
La respuesta se conoció el miércoles en la tarde. Un juez le aplicó una sentencia de 9 años de prisión y 58 mil pesos de multa. Además tendrá que entregar sólo 21 terrenos y 20 propiedades de las 90 que posee en total.
Sin duda, una pena generosa, en exceso, porque bien podría salir libre dentro de tres años.
El ex gobernador tenía motivos para sonreírse, maliciosamente, y reírse a carcajadas.
Sabía que a pesar del sinnúmero de acusaciones graves en su contra, éstas no tendrían la consistencia suficiente para hundirlo toda su vida en la cárcel, como se pensaba.
Duarte tendría que responder al desfalco, desvío y lavado de más de 75 mil millones de pesos del erario de Veracruz. El habilidoso ex funcionario se declaró culpable de los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa y logró que le decretaran la pena mínima.
La PGR únicamente acreditó el desvío de mil 650 millones de pesos. Eso sí, dijo que la investigación sigue abierta en otros casos. Poco faltó para que el juez le pidiera perdón a Duarte por su conducta criminal.
Mientras, la función continúa en una de las tres pistas del “circo político”, en otra, la bancada panista en el Senado solicitará que el ex gobernador Duarte sea juzgado por el delito de desaparición forzada de personas. El “show” debe continuar. Duarte se cansará de reírse.
LA VERDAD
Histórica o no es necesario conocer la verdad de lo que ocurrió en Iguala aquella noche del 26 de septiembre de 2014. Nos referimos a la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
En ese acto de barbarie participaron directa o indirectamente narcos, autoridades, fuerza pública, etc.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador acordó, con los padres de los estudiantes desaparecidos, publicar, el 1 de diciembre, el decreto con el cual se creará la Comisión de Investigación para la Verdad y la Justicia de Ayotzinapa.
Las dependencias de la administración federal serán instruidas para que colaboren en la investigación para “llegar a la verdad y a la justicia”.
Por su parte, Alejandro Encinas, encargado de la comisión, declaró que “no habrá verdades históricas, sino justicia”, y que revisarán lo que se ha hecho y se abrirán nuevas líneas de investigación sobre el asunto.
A pesar del número de testigos y de personas encarceladas relacionadas con el secuestro múltiple de los estudiantes, no se conoce la realidad de lo sucedido. Cabe señalar que un juez federal dictó auto de libertad a favor de ocho implicados en la desaparición de los 43 normalistas.
La autoridad mencionada, con residencia en Matamoros, Tamaulipas, decretó la libertad de los ocho detenidos para procesarlos por el delito de delincuencia organizada.
Entre los exculpados se encuentra Gildardo López Astudillo (a) El Gil, quien fue señalado como el encargado de ordenar el secuestro de los normalistas. “Nunca los van a encontrar, los hicimos polvo y los tiramos al agua”, le informó El Gil a su jefe Sidronio Casarrubias Salgado, presunto líder regional de los narcotraficantes de Guerreros Unidos, según investigaciones de la Policía Federal.
MAYER, A LA COMISIÓN DE CULTURA
Rectificó Morena y le quitó al Partido Encuentro Social (PES) la Comisión de Cultura y Cinematografía, debido a un sinnúmero de protestas, entre otras porque esa organización política ya desapareció.
Se argumentó que el PES, un partido de extrema derecha, no sería el indicado por su “ideología conservadora” para desarrollar programas progresistas, como se exige en la cultura.
Los morenistas rectificaron y votaron la madrugada del viernes, por el actor, Sergio Mayer, para presidir dicha comisión. El diputado, uno de los inconformes con su sueldo de legislador, pues dijo que no le alcanzaba para su tren de vida.
Al saber de su nueva responsabilidad, el citado actor declaró que trabajará para que la cultura del país tenga más presupuesto y todos los mexicanos tengan acceso a ella y además pugnará porque se regule la Ley General de Cultura y Derechos Naturales.
Mayer es conocido en las redes sociales por sus errores y equivocaciones; en una ocasión confundió ecocidio con genocidio y otra vez habló de quejarse en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por la muerte de manatíes, en lugar de hacerlo en la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), etc.