El escenario del 2010 casi está listo
Roberto Vizcaíno lunes 10, Ene 2011Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Es por demás evidente que debajo de este tránsito de sucesión terso, rápido, contundente en la dirigencia de la primera fuerza política del país, existe un trabajo de negociación del cual el gobernador mexiquense y puntero presidencial no es ajeno
Motivos de salud | Trizas
Este 2011 inició con tres movimientos precisos realizados dentro de las tres principales fuerzas políticas nacionales, que prefiguran el escenario final en que se moverá la sucesión del panista Felipe Calderón en la Presidencia de la República.
En cierta forma no hay sorpresas.
La reestructuración del escenario político electoral nacional la abrió el propio Calderón al alinear y designar al senador chihuahuense Gustavo Madero como su gerente al frente del PAN, y luego al realizar 3 cambios dentro de su equipo, entre los cuales el más importante sin duda fue designar al diputado Roberto Gil Zuarth como su secretario particular en sustitución de Luis Felipe Bravo Mena, quien así queda listo para ser lanzado como candidato blanquiazul para la gubernatura del Estado de México.
Encubierta con el despido de Juan Molinar Horcasitas de la SCT y de Georgina Kessel de la secretaría de Energía, la llegada de Gil Zuarth a la oficina de Felipe Calderón en Los Pinos, sólo confirma que la elección del nuevo dirigente del PAN fue una patraña.
Los hechos indican ahora que Madero siempre fue la decisión de Calderón para el PAN en sustitución de César Nava y que Gil Zuarth iría a cerrar la pinza de sus operadores electorales desde su oficina en Los Pinos.
Por eso el michoacano lo sacó de la subsecretaría A de Gobernación para hacer el cuento de una elección competida dentro del PAN (era todos unidos contra Gil Zuarth a fin de quitarle a Madero el fuerte halo de candidato de Calderón) y luego concretar el verdadero cambio que es el de colocarlo a su lado para que desde ahí opere todo el proceso de sucesión presidencial.
Gil Zuarth no sólo es hoy un diputado federal joven y un político bien posicionado con afectos entre los líderes de los otros partidos, sino licenciado en Derecho por el Instituto Tecnológico Autónomo de México, el ITAM, con maestría en Derecho Constitucional y doctorado en Derecho Público por la Universidad Carlos III de Madrid, España que ha sido coordinador de asesores del Secretario de la Función Pública, de diciembre de 2006 a septiembre de 2007 y representante de su partido ante el IFE y hasta hace poco vicecoordinador de la fracción blanquiazul en la Cámara de Diputados.
Desde hace rato y por razones que sólo ellos saben, Calderón le tiene a Gil Zuarth especial deferencia y confianza al grado de que hoy comienza a ser su verdadero operador político desde el poder que le da estar en la misma oficina de la Presidencia de la República.
Gil Zuarth comienza a ser a partir de hoy en los hechos lo que fue Liébano Sáenz para Ernesto Zedillo, en su tiempo.
Este es el verdadero y más importante movimiento de Calderón dentro del escenario de su sucesión para el 2012, porque con su apoyo y operación política, Gil Zuarth le permitirá designar con holgura al candidato que él quiera y que muchos creen será Ernesto Cordero.
El segundo movimiento lo realizaron a mediados de la semana pasada el Jefe de Gobierno del DF, el ex priísta Marcelo Ebrard y su padrino de siempre, Manuel Camacho, al promover la candidatura del lopezobradorista Alejandro Encinas para la gubernatura del Estado de México.
Muchas fueron las lecturas que tuvo este acontecimiento. La nuestra es simple:
–Ebrard y Camacho se encontraron a fines de diciembre pasado con que Andrés López Obrador había logrado cancelarles la posibilidad de concretar la alianza PAN-PRD mexiquense.
-Fue entonces que decidieron darle la vuelta con un movimiento audaz: lanzar a Encinas, sabiendo que AMLO lo apoyaría de inmediato.
-Pero, para que el lanzamiento no se viera como una imposición, debía ir condicionado a un plebiscito que, explicó a su vez Jesús Ortega, tendrá dos preguntas al parecer inocuas: ¿Está usted de acuerdo en una alianza PRD-PAN?… ¿Apoyaría usted la candidatura de Alejandro Encinas?
–Ebrard y Camacho saben que la mayoría de los mexiquenses que acudan a ese plebiscito, a esa consulta, influida por AMLO, va a rechazar lo de la alianza y apoyar a Encinas. Entonces la supuesta victoria de López Orador y de Encinas sería en realidad un triunfo para la dupla Ebrard-Camacho por la simple razón de que lograrían que AMLO acepte la realización de un plebiscito, una consulta ciudadana para determinar alianzas y candidatos.
-Con las cosas así, AMLO no podría entonces rechazar una consulta similar dentro del proceso para elegir candidato para la elección presidencial del 2012… pero sobre todo Ebrard y Camacho saben que el resto del país no es el Estado de México, y que a nivel nacional a lo mejor la opinión mayoritaria es de que sí haya alianza PAN-PRD y de que el candidato sea Ebrard en lugar de López Obrador.
El hecho de que Encinas ande ya de campaña con López Obrador por el Estado de México indica que ambos se comieron ya el dulce envenenado que les dieron Ebrard y Camacho.
Por lo demás todos saben que Encinas, nacido en el DF, no gana elecciones. Fue barrido en 1993 al competir por la gubernatura del Estado de México en 1993 contra el priísta Emilio Chuayffet y luego fue vapuleado por Jesús Ortega en 2008 durante la contienda por la dirigencia nacional del PRD.
Encinas es hoy diputado federal perredista pero pluri, es decir, de lista, lo cual significa que es de “dedazo”.
En fin, con las cosas así dentro del PRD, el lanzamiento de Encinas no es más que una maniobra de Ebrard-Camacho para someter y desechar a AMLO.
En el tercer y último movimiento no hay sorpresas:
La noticia en el registro y designación por mayoría del profesor Humberto Moreira y María Cristina Díaz Salazar como presidente y secretaria general del CEN del PRI, no fue la llegada de ambos a esas posiciones, sino la muestra contundente de unidad de la cúpula priísta.
Esta es la primera vez desde que el PRI fue sacado de la Presidencia de la República, y de que con ello perdió el eje del mando único sobre el que giró desde que fue creado, que el Revolucionario Institucional actúa monolíticamente.
Alrededor de las figuras de Moreira y de María Cristina, el sábado pasado estuvieron los 19 gobernadores del PRI. No faltó ninguno.Y estuvieron también 3 gobernadores electos. Y todos los diputados, senadores y representantes de los alcaldes; los líderes de los sectores campesino, obrero y popular; de los jóvenes y las mujeres; los exdirigentes nacionales; los coordinadores parlamentarios. TODOS…
Esa es la noticia.
Los pronunciamientos del nuevo dirigente son apenas el inicio de la verdadera prueba que esta unidad representa para Felipe Calderón, y para la permanencia de su partido en el poder.
Por lo demás el acto sirvió para reiterar que esa unidad está con Enrique Peña Nieto y que no hay la menor intención de cambiar esa circunstancia. Simplemente no hay quien le haga sombra. No es debilidad de contendientes, sino razón y aceptación frente a lo obvio.
Es por demás evidente que debajo de este tránsito de sucesión terso, rápido, contundente en la dirigencia de la primera fuerza política del país, existe un trabajo de negociación del cual el gobernador mexiquense y puntero presidencial no es ajeno.
¿El candidato de Televisa?, ¿El pelele de Carlos Salinas?
Frente a los hechos, hay quienes lo siguen pensando.
El colofón de todo esto fue la despedida de Beatriz Paredes, quien todavía prevaleció, impuso a medias su estilo de vallas y puertas cerradas, pases escamoteados, personalidades en los pasillos…
Interesante despedida a la que el aire renovador de Moreira superó. Con la llegada del coahuilense comenzó a vibrar de nuevo el PRI, a saber de masas y contingentes, de porras y matracas… de vivas y hurras, de vida dentro de los fríos y desolados edificios que integran la sede nacional del tricolor… bueno, hasta le aplaudieron largo a Beatriz para despedirla, ya se fue, se acabó su oscuro, torcido y gris reinado donde ella era todo… y nada.
