Otorgan DIFEM y Sedesol apoyos a familias
Estado de México viernes 24, Ago 2018Arco Norte
José Luis Montañez Aguilar
Han pasado tres años desde que Victoria Zúñiga sufrió el deceso de su mamá, a consecuencia de un paro cardiaco, situación que se sumó a la pérdida de su padre, para ayudarla en su manutención y estudios escolares, ella, al igual que 105 niñas, niños, adolescentes y jóvenes menores de 24 años en orfandad materna, recibieron apoyos económicos a través del programa Seguro de vida para jefas de familia.
“Gracias a Dios tengo la oportunidad de estar aquí y que me den este apoyo, quiero ocuparlo para mi tesis que voy a hacer en la escuela, todos los materiales que me piden, todas las partes experimentales, todas las fotocopias y aparte también porque necesito una computadora”, expresó Victoria.
En este sentido, Fernanda Castillo de Del Mazo, presidenta honoraria del DIF estatal, en compañía de Evelyn Osornio Jiménez, delegada federal de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en el Estado de México, así como Miguel Ángel Torres Cabello, director general del DIFEM, entregó el beneficio a tutores a cargo del cuidado, manutención y alimentación de niños, adolescentes y jóvenes menores de 24 años de edad en orfandad materna.
Destacó que con este apoyo, que en su totalidad suma más de 1 millón 200 mil pesos y que permitirá asegurar a 63 familias de 31 municipios mexiquenses para que tengan estabilidad económica, se les dará la oportunidad a los beneficiarios de continuar con sus estudios.
“A través del programa Seguro de vida para jefas de familia, y en la noble labor que tengo al frente del DIFEM, pongo mi granito de arena para que ustedes continúen estudiando y así cumplir todos sus sueños, pero sobre todo, quiero decirles que no están solos, que cuentan con el apoyo de mi esposo el gobernador Alfredo Del Mazo y mío, como parte de su familia”, expresó Castillo de Del Mazo.
Señaló que el DIFEM y la Sedesol coordinan esfuerzos para que este programa del orden federal, otorgue seguridad social a jefas de familia solteras, viudas, divorciadas o separadas, a través del registro de sus hijos menores de 24 años, para que en caso de que las madres fallezcan, sus hijos, pese a la orfandad, continúen sus estudios.