¿Desaparecerán o no las áreas de prensa?
Roberto Vizcaíno martes 14, Ago 2018Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
El miércoles 11 de julio pasado, apenas a semana y media de ganar la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador cimbró al medio periodístico mexicano al anunciar la desaparición de las áreas de Comunicación Social del gobierno federal para ser concentradas en una sola dependencia, y el recorte del 50% del gasto en publicidad.
Planteado así, sin más explicaciones, los anuncios de AMLO significaban miles de despidos y una grave crisis financiera en los medios informativos cuya casi totalidad dependen de la publicidad oficial.
Y en el fondo significaban una amenaza a la libertad de expresión y, con ello, a la democracia mexicana.
Para que no hubiera dudas el punto 20 de los 50 dictados de austeridad de López Obrador plantea lo de la desaparición explícitamente.
Ese punto indica: Todos los programas y estructuras duplicados, oficinas mayores, oficinas de prensa, las funciones o programas correspondientes se centralizarán en una sola unidad o coordinación. No van a tener los secretarios (de Estado) oficinas para prensa, es una sola.(negritas y subrayados, míos)
Pero además el presidente electo lo explicó de propia voz:
“Van a desaparecer las áreas de comunicación que existen actualmente en todas las dependencias del gobierno federal.
Se va a concentrar toda la comunicación del gobierno en una sola entidad”.
Desde entonces algunos de sus colaboradores han intentado matizar esos anuncios –desaparición y recorte publicitario –, pero uno, Jesús Ramírez Cuevas, a lo ha explicado con mayor precisión y alcances.
«Lo que se ha interpretado de manera exagerada es que se van a cerrar las oficinas de comunicación social de todas las dependencias, imposible.
El gobierno es un ente complejo, cada secretaría lleva temas que requieren de una especialización y comunicación de los temas y de las políticas públicas y de los mensajes al respecto y requieren de oficinas (de información) para poder comunicar», indicó.
“Lo que se busca es transparencia en las relaciones del gobierno con los medios, establecer criterios que sean del conocimiento público y a través de eso, establecer el presupuesto destinado a los medios.
Lo que se está planteando es que se reduzca a la mitad como parte del plan de austeridad. Centralizar el manejo de los recursos, no la operación de las oficinas de comunicación social”, agregó.
Ramírez reveló que dentro del grupo de AMLO hay un debate sobre la renovación medular de los usos y costumbres de la relación prensa-gobierno.
“…hay otros planteamientos que forman parte de esas discusiones, como el fomento de la pluralidad mediática, la transparencia y equidad en el reparto publicitario y un elemento potencialmente controversial: la fiscalización ciudadana de los recursos públicos que son entregados a los medios”.
El debate no es menor, afirma. Y retoma lo dicho por Ana Cristina Ruelas, directora de Artículo 19, quien señala que “la relación entre medios y poder (en México) es muy perversa, porque existe una dependencia casi total de la mayoría de los medios, a nivel federal y aún más a nivel local, del dinero público”.
Y mientras eso ocurre existe un análisis que revela que en los últimos 5 años el gobierno de Enrique Peña Nieto gastó 40 mil millones de pesos en publicidad de los cuales el 56% fueron a sólo 20 medios y algunos periodistas relevantes.
Esos beneficiarios fueron Televisa, Estudios Azteca, la agencia publicitaria Starcom World Wide, Estudios Churubusco Azteca, Grupo Radio Fórmula, El Universal, Excélsior, la Organización Editorial Mexicana (propietaria de “los soles”), Núcleo Radio Mil, Grupo Imagen, Grupo Radio Centro, el Sistema Público de Radiodifusión del Estado de México, Radiorama, la representante de medios impresos Medios Masivos Mexicanos, Milenio Diario, la empresa publicitaria Rack Star, Canal 40 y La Jornada.
Estos medios y agencias recibieron, en conjunto, un monto de 22 mil 719 millones 889 mil pesos del gobierno, en cinco años.
A los periodistas se les aseguró ingresos millonarios adicionales por concepto de publicidad, que se otorga a través de sus páginas web personales.
El restante 44% se repartió entre 3 mil 108 medios de todo el país.
Jesús Ramírez Cuevas dice que un equipo realiza el diagnóstico sobre la discrecionalidad del pago publicitario gubernamental a medios y a periodistas.
“Sí, lo primero que se va a acabar es la discrecionalidad del manejo de los recursos. El otro principio es la consideración de incluir no solo a los grandes medios, sino a los medios comunitarios y regionales, que entrarán también dentro de esta relación. Se va a atender a todos los medios, estamos hablando de prensa, radio, televisión, medios digitales, incluidos los comunitarios y sociales”, afirma.
Y reconoce que en medio de esto hay incertidumbre entre periodistas y medios, algunos de los cuales han comenzado una reestructuración y despidos.
Por ello sugiere esperar a que salgan los criterios oficiales de este ajuste.
Y adelanta que seguramente la nueva asignación de recursos se hará bajo los criterios de alcance, audiencia, raiting, importancia regional y el público al que se dirigen… cada uno de los medios.
Ya veremos…
¿Golpe bajo… o favoritismo?
Donde a pesar de que se habla de una transición civilizada prevalecen los golpes bajos, es en el Senado.
El ataque lo inició el morenista Martí Batres quien de entrada anunció un recorte presupuestal de 2 mil millones de pesos, el despido de personal de confianza para luego balconear al presidente saliente, al panista Ernesto Cordero al exhibirlo con el otorgamiento de bonos a un grupo de asesores.
En respuesta Cordero dio instrucciones al administrativo senatorial de no haber ningún movimiento ordenado por los que apenas llegan, antes de que concluya la actual Legislatura el 30 de agosto.
Ya metidos en el jaloneo el blanco del golpeteo ayer fue el zacatecano Ricardo Monreal, quien coordinará a los 55 senadores de Morena, a quien se acusó de imponer a Cynthia Murrieta, quien es aún directora de Protección Civil en la Delegación Cuauhtémoc, como nueva titular de la Unidad de Género de la cámara alta.
Esa unidad la preside hoy la priísta Diva Gastélum y quienes revelaron lo de Cynthia afirman que la recomendada de Monreal no cuenta con los conocimientos, antecedentes y merecimientos para ocupar el cargo.
El caso es que el jaloneo está a todo lo que da, y la lógica indica que si Monreal coordinará al grupo mayor, pues puede colocar administrativamente a quien crea conveniente en los cargos de la estructura senatorial ¿no?.
¿Toncs?
Control desde el Congreso
Y mientras esto ocurre en el Senado, en San Lázaro el todavía senador y diputado pluri electo Mario Delgado explicó que los senadores y diputados federales y locales de al menos 19 congresos estatales, actuarán en forma coordinada para detener el endeudamiento sin control realizado por gobernadores y alcaldes.
Recordó que de diciembre 2012 a marzo de 2018 la deuda de los estados pasó de 434 mil 761 a 578 mil 839 millones de pesos, con un crecimiento del 33% especialmente en Veracruz, Sonora e Hidalgo.
Delgado, a quien se le ve ya como el próximo coordinador de la bancada de Morena en San Lázaro, afirmó que los legisladores de su partido detendrán el endeudamiento estatal que la mayor de las veces no se sabe dónde queda.
Morena, dijo, instalará en el Senado y la Cámara de Diputados la Comisión Bicameral de Disciplina Financiera, que se encargará de revisar y aprobar o parar el endeudamiento de los gobiernos locales.
rvizcainoa@gmail.com
www.endirecto.com.mx
@_RVizcaino
facebook.com/rvizcainoa