Y Batres se descuenta a Cordero

Roberto Vizcaíno viernes 10, Ago 2018

Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

 

 

Y mientras Ernesto Cordero, presidente del Senado -y en proceso de expulsión del PAN–, se cuidaba de los golpes de la derecha anayista, el senador morenista electo Martí Batres se lo descontó ayer mediáticamente por la izquierda.

Así, en su afán por ganar espacios en medios y meter en callejones de conflictos y confrontación con los senadores salientes a Ricardo Anaya, quien le ganó la coordinación parlamentaria de los senadores de Morena por recomendación del mismísimo Andrés Manuel López Obrador, Martí Batres, en una abierta injerencia en una legislatura que no es la suya, acusó ayer a Cordero de haber autorizado bonos especiales a 22 altos mandos y asesores senatoriales.

Y mostró la copia de un acuerdo donde el presidente del Senado aprueba los pagos sobresalientes a esos 22 asesores y altos funcionarios en reconocimiento a su desempeño.

Los bonos fueron el equivalente a 40 y 60 días de salario.

Batres, quien es apenas senador electo y que comenzará a ejercer su cargo a partir del 1 de septiembre, alegó que esos bonos no son obligatorios y por ello llamó a Cordero a “tener sensibilidad” y echarlos atrás.

Y sin dar ninguna explicación, también le pidió al presidente del Senado saliente que no apruebe nuevas plazas ni firme contratos que deban ser validados por la siguiente legislatura.

Martí Batres, quien fracasó también –pero frente a Claudia Sheinbaum–, en la búsqueda de la candidatura de Morena para ser Jefe de Gobierno, cobró notoriedad pública, política y mediática en febrero de 1999 cuando la Secretaría de Salud reveló que vendía en zonas marginadas y previa afiliación a su grupo del PRD, eso sí a precios bajos, una leche denominada “Betty” con pocas grasas, pocas proteínas y poco calcio pero muy contaminada con heces fecales.

El diario El País de España encontró que “los compradores debían presentar la credencial de elector y apuntarse a la Unión de Abasto Popular, organización vinculada al PRD”, que lideraba Batres.

En el envase de la leche “Betty” no figuraba la fecha de caducidad del producto, pero sí los nombres de los diputados benefactores, el primero de ellos Batres.

La Procuraduría Federal del Consumidor de aquel tiempo, detectó en la leche “Betty” un nivel de bacterias 300 veces superior al permitido.

Hoy Batres, senador electo por Morena, es ya conocido por anunciar que va a proponer un recorte de 2 mil millones de pesos en el presupuesto del Senado y consecuentemente el despido de la mayoría de la plantilla de personal de confianza y asesores en ese recinto. Ahora ya compró pleito con Cordero.

Sería interesante saber si Ricardo Monreal, su próximo coordinador legislativo, está de acuerdo con el papel de vocero adelantado de la fracción morenista que ha asumido Batres.

Sigue el rompimiento panista

Y mientras eso ocurre en el Senado, en el PAN las confrontaciones siguen su curso.

Así, mientras entre jaloneos y choques avanza el proceso de renovación de la dirigencia nacional, el ex presidente Felipe Calderón se agarró del chongo twitero con el gobernador de Chihuahua, Javier Corral a quien le recriminó no haberle dicho a Andrés Manuel López Obrador lo que antes había subido a redes sociales.

Resulta que Corral le dijo a López Obrador en Twitter que su propuesta de amnistía a criminales era «absurda y grotesca».

Y que con ello el presidente electo «se coloca en sentido contrario a una de las motivaciones más importantes de la voluntad popular del 1 de julio. La impunidad perpetúa, la corrupción y la injusticia. Es complicidad».

Calderón ironizó en redes al indicar que Corral seguramente le dijo a AMLO, en su encuentro en un foro en Ciudad Juárez, que no estaba de acuerdo con sus ideas y propuestas.

Corral le reviró a Calderón:

«Si lo que dice José Agustín es lo que piensa hacer @lopezobrador_se lo diré en público y en privado, como te lo dije a ti de frente, señalándote como uno de los responsables de esta tragedia nacional y el colapso del Partido.

La amargura no te permite distinguir la civilidad».

Y mientras…

En medio de este ambiente, el senador Héctor Larios –quien hace unos días adelantó que se lanzaría como aspirante a la presidencia del PAN–, cuestionó que Marko Cortés, coordinador de los diputados federales de Acción Nacional, haya aceptado jugar como el delfin de Ricardo Anaya para que el grupo de este siga al frente del PAN.

Y exigió que se elija a un presidente de transición en Acción Nacional, que evite la continuidad que representa Marko Cortés.

El senador Larios les pidió a Anaya y Cortes entender que «hay un sector importante del partido que no quiere que haya continuidad, que quiere que se rompa la continuidad.

Hay diversos actores del partido que están tratando de construir un acuerdo que permita que tengamos una dirigencia de transición encabezada por alguien de mucho reconocimiento y que permita hacer los cambios en el partido y regresarlo a su espíritu democrático.

«Creo que ha sido negativo para el partido el estilo de liderazgo que ha habido. Tiene que haber un solo frente que compita frente al statu quo, contra la continuidad».

Morenistas en guerra

Y mientras Andrés Manuel López Obrador afirmó en su discurso de entrega de constancia de mayoría como Presidente Electo que no presionaría a ninguno de los otros poderes, ayer la ex ministra y próxima secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero indicaba que haría “valer las acciones necesarias para revisar la constitucionalidad de la facultad de veto constitucional del Ejecutivo aprobada por el Congreso de Sonora”.

Y es que ayer el Congreso de Sonora, todavía de mayoría priísta, pero que tendrá mayoría morenista, aprobó reformas a la constitución estatal que facultan a la gobernadora Claudia Pavlovich a vetar la Ley de Ingresos y Egresos.

Esta reforma intentaría evitar que la siguiente legislatura –como ya dijimos de mayoría morenista–, le impusiera a la gobernadora Pavlovich un presupuesto de egresos distinto al que ella pudiera enviar para su aprobación.

Sobre eso dijo la próxima secretaria de Gobernación federal Olga Sánchez Cordero:

“Lo aprobado el día de ayer por el Congreso de Sonora pretende regular materias que escapan de su competencia, son contrarios a diversos precedentes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y contravienen disposiciones expresas de la Constitución Federal. Dado lo anterior se harán valer las acciones necesarias para revisar su constitucionalidad”.

¡¡¡Zas!!!

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