Silva Meza se quedó corto
¬ José Carlos Robles Montaño miércoles 5, Ene 2011A Pleno Sol
José Carlos Robles Montaño
- Marcelo, los curas y el futurismo
TOGADO.- Cuanta razón tiene el flamante presidente de la Suprema Corte de Justicia, Juan Silva Meza, cuando dice que los mexicanos, la sociedad toda está urgida de creer en sus jueces, en la justicia. No hizo falta que el magistrado presidente mencionara los casos recientes de corruptelas , cuando jueces de Chihuahua -ya despedidos sin ser castigados.- dejaron en libertad al asesino de Marisela Escobedo y de su hija Rubí, cuando se sabe que los “asesinos intelectuales” de los niños muertos en la guardería ABC de Hermosillo andan libres y sólo “chivos expiatorios” están en prisión por considerarlos únicos culpables de la quemazón.
Discurso valiente el de Silva Meza, lleno de verdades. Sin embargo, desde nuestra óptica, se quedó corto, Debió ir mucho más allá en su dicho.
Si el presidente de la SCJN antes de decir lo que dijo se hubiera dado a la tarea de preguntarle a “Juan Pueblo” ¿en que institución, en que político, en qué organización confía, se hubiera sorprendido de las respuestas que iba a recibir como las de que no confía ni de la palabra del Presidente, en la de sus colaboradores, de la mayor parte de los gobernadores, incluido el jefe de gobierno de la capital, ni de diputados, senadores y lo que más nos avergüenza es que una de nuestra grandes y respetadas instituciones, como la de las Fuerzas Armadas, soldados y marinos hayan perdido credibilidad luego de que las lanzaron a una guerra contra el narcotráfico que ha dejado más de 30 mil muertos y cuando no hay día en que aumenten los asesinatos en promedios de 40 al día.. Uniformados que ante los ciudadanos no dejan duda que son bien eficientes como guardaespaldas y guaruras, como protectores de políticos y empresarios ilegales y corruptos.
Bien que lo sabe Silva Meza, que no sólo en el mundo de la política desconfiamos los mexicanos. Se les ha perdido la confianza a empresarios de la industria, del comercio, de la comunicación porque se han arrodillado ante funcionarios buenos para nada, con tal de mantener sus privilegios. En el colmo de los colmos, se cuentan por cientos de miles de católicos que han abjurado de su fe ante el cúmulo de delitos cometidos por curas pederastas de “pipa, guante y palos de golf” violadores de niños y ladrones de bienes de viudas ricas. ¿Qué no hay tal? Espérese a que el INEGI dé a conocer el número de creyentes que se han ido a refugiar en las iglesias, que cundo menos los ayudan a conseguir empleo, alejarse de los vicios, aunque no les prometan mandarlos al cielo abrazados por El Señor.
No habrá ciudadano, señor ministro, que no le desee éxito en su nuevo encargo y los mejores deseos para que le vaya bien,. Que logre un gran cambio en materia de justicia para que la Suprema Corte sea auténtica defensora de la ley para que el gran cambio que se promete en México se de, empezando por tener jueces, magistrados impolutos y no abogados huizacheros, ministerios públicos ladrones y nunca más cuicos y federales de pluma, pico y garra represores de indígenas y protectores de políticos y ladrones de cuello blanco.
Urnas y capelos
Luego que el medio “Desde la Fe”, de la Arquidiócesis de México acusara de talibanes de la laicidad a los perredistas que gobiernan la gran capital, con Marcelo Ebrard a la cabeza, se vino a calentar, más de lo que estaba, el futurismo sucesorio en el DF, en el tiene metido la mano la Iglesia.
Como era de esperarse, los perredistas que creen en Marcelo pegaron el grito en el cielo porque con sus declaraciones, la Iglesia descalificó a Marcelo como uno de los aspirantes a la silla de Los Pinos, que no pasar de ser un sueño de opio. Sean justas o no los comentarios y apreciaciones, la verdad es que los curas sí le dañaron sus bases políticas a Marcelo, cuando los capitostes de la Arquidiócesis como el cardenal Norberto Rivera Carrera y su par de Jalisco, Juan Sandoval, les dejaron un mensaje bien claro a sus fieles de que votar por el PRD en el DF y por Marcelo como presidente sería cometer un atroz pecado, al votar a favor del aborto y aceptar los matrimonios entre personas del mismo sexo.
Condena, la de los curas que de inmediato aplaudió la fanaticada panista porque a sus virtuales aspirantes a gobernar el DF en el 2012, el saltimbanqui Demetrio Sodi de la Tijera, José Luis Luege Tamargo y Maríana Gómez del Campo, bien que podrían llegar a gobernar la gran capital, luego de que perdieran la silla de Los Pinos. “Tan bueno un triunfo grande como en el chiquito”.
Sin embargo, en el perredismo lopezobradorista no se piensa igual. Pese al derrapón de Ebrard al enfrentarse al poder de los púlpitos, todavía falta lo que diga el tabasqueña sobre quién será su candidato para enfrentar a la priísta María de los Ángeles Moreno Uriegas, a quien desde siempre se le ha visto como la política que termine con los gobiernos de izquierda en la gran capital.
Aplanadora
Humberto Moreira, como se esperaba, solicitó permiso como gobernador de Coahuila, para ir a buscar la dirigencia nacional del PRI, que ya tiene en sus manos. Lo sucede en el cargo Jorge Torres, y no su hermano, para evitar las lenguas de doble filete. Se transparenta, con la renuncia del coahuilense y su seguro ascenso a la presidencia priísta, un paso político más hacia el fortalecimiento de la candidatura del gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto.