Ajustes en los partidos
¬ Augusto Corro lunes 2, Jul 2018Punto por punto
Augusto Corro
El senador Ernesto Cordero fue expulsado del Partido Acción Nacional (PAN) por declinar a favor de otro candidato y denunciar al, en ese entonces, aspirante presidencial de la coalición Por México al Frente (PAN, PRD y MC), Ricardo Anaya, por lavado de dinero.
También echaron del blanquiazul al senador Jorge Luis Lavalle Maury y a la exdiputada federal Eufrosina Cruz Mendoza.
El primero se distinguió como voz crítica dentro del panismo. La segunda manifestó públicamente su simpatía por José Meade Kuribreña, quien fuera candidato de Todos por México.
El fin de semana, Anaya, quien prevé una fractura mayor en el PAN, llamó a sus allegados a cerrar filas, pues advierte que grupos internos “acecharán la dirigencia de Acción Nacional”, por lo que dijo “hay que permanecer unidos”.
El conflicto partidista fue anunciado semanas atrás cuando el aspirante panista-perredista-emecista empezó a descender en los índices de las preferencias electorales. El mundo se le empezó a venir abajo y optó, de una vez, por los ajustes políticos.
El primero de la “purga” política fue el más obvio de sus enemigos, el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Ernesto Cordero, quien decidió enfrentar al “joven maravilla” directo y sin mezquindades. El legislador lo acusó directamente, en el PGR, del delito de lavado de dinero.
Los últimos enfrentamientos entre los personajes blanquiazules fueron la culminación de una lucha que mantienen entre grupos por la posesión del partido. Por un lado se encuentran los calderonistas y por otro los anayistas. Transcurridos los comicios, las venganzas en Acción Nacional serán el pan de cada día.
El dirigente Anaya en su ambición por la candidatura presidencial se apoyó en el arma de la traición. Ni siquiera le importó el interés de Margarita Zavala de Calderón para participar como candidata presidencial. Hizo todo lo que estuvo en sus manos para echar del partido a la señora Calderón. La ahora expanista tuvo que participar en la contienda electoral como independiente. Le fue mal. No encontró la respuesta que esperaba del electorado.
Por cierto, el propio Anaya se echó la soga al cuello desde el inicio de la competencia electoral, pues en la militancia partidista no todos estuvieron de acuerdo en juntar el agua con el aceite. Unir a la izquierda con la derecha, en México siempre será difícil y si se logra los resultados serán más negativos que positivos. ¿PAN y PRD unidos? Ni en sueños.
Vendrán, pues, más ajustes en Acción Nacional porque, por lo que se ve, ya empezó la lucha por adueñarse del partido y las señales nos dicen que se tratará de una “purga” política a las aplicadas por el ruso Stalin, en sus mejores tiempos de dictador.
En el PRD tambien hace aire
En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) el panorama que se avizora es más que deprimente. Luego de los comicios tendrán que hacer los ajustes necesarios para continuar en la sobrevivencia.
Sus dirigentes tendrán que revisar la estructura política que estuvo en manos del grupo denominado “Los Chuchos” que sometieron a esa institución política a los intereses del gobierno federal. La cúpula partidista participó con gran agrado en la aprobación de las reformas políticas del Pacto por México, que a la fecha ningún beneficio aportaron a la sociedad mexicana.
Después de representar dignamente a la izquierda en nuestro país, los dirigentes perredistas optaron por olvidarse de principios, alejarse de la población y se dedicaron a los negocios. Sembraron vientos, cosechan tempestades.
Cirugia mayor en el PRI
En el Revolucionario Institucional (PRI) los males se empezaron a acumular hace seis años. Varios gobernadores y funcionarios públicos extraídos del tricolor decidieron saquear el tesoro público con las consecuencias que todos conocemos.
El problema de la corrupción se agudizó y afectó el nombre de la organización política que perdió las elecciones en varios estados. También la violencia incontrolable por parte del gobierno federal le abolló la figura al PRI.
A lo anterior súmele los errores en la economía como es el alza de las gasolinas que tiene azorada a la población de escasos recursos, pues repercute en su economía raquítica.
Gobierno y PRI identificados como uno solo provocaron en el partido un vacío que tendrá que llenarse con dirigentes obligados a recuperar la confianza. Lo menos que tendrán que hacer. Sobran priistas con renombre suficiente para emprender la tarea.
Morena
En el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) también tendrán que reajustar sus cuadros políticos. Es una incógnita quiénes se encargarán de dirigir al partido que sirvió de refugio a cuanto político, sin importar su origen, se acercó.
Expanistas, experredistas, expriistas y gran variedad de exmilitantes de diferentes partidos seguramente serán incluidos en la cúpula del poder morenista.
En fin ya le platicaré cómo quedarán integradas las cúpulas partidistas en los próximos meses y años.