Recomendaciones de conducción para las mamás que manejan
Mauricio Conde Olivares miércoles 9, May 2018“Hora 14”
Mauricio Conde Olivares
La seguridad es tal vez la más alta prioridad al conducir, hecho trascendental no solo al interior del vehículo, también al exterior, por lo que Goodyear en ocasión del Día de las Madres preparó varias sugerencias para aquellas mamás conductoras.
Una de ellas es respetar la señalización vial y semáforos, obedecer las indicaciones de los policías de tránsito y personal de apoyo vial, en todo momento.
Tomar las máximas precauciones a su alcance cuando existan peatones sobre el arroyo vehicular, reducir la velocidad o parar para permitirles el paso, especialmente en zonas escolares o en calles de prioridad peatonal.
Otro asunto fundamental es compartir los carriles de circulación de manera responsable con los demás vehículos; así como respetar los límites de velocidad, que por ejemplo, de acuerdo a la Secretaría de Seguridad Pública en la Ciudad de México son: 10 km/h en estacionamientos y en vías peatonales en las cuales se permita el acceso a vehículos; 20 km/h en zonas escolares, de hospitales, de asilos, de albergues y casas hogar; 30 km/h en zonas de tránsito calmado; 40 km/h en vías secundarias incluyendo las laterales de vías de acceso controlado; 50 km/h en vías primarias y 80 km/h en carriles centrales de las vías de acceso controlado.
Además, deben disminuir la velocidad y tomar todas las precauciones necesarias cuando encuentren un vehículo de transporte escolar realizando maniobras de ascenso y descenso de estudiantes.
Otro punto importante es ascender o descender sobre el carril contiguo a la acera. En caso de que se tenga que hacer del lado izquierdo, extremar precauciones. Y respetar cruces de peatones, áreas de espera para bicicletas o motocicletas, y áreas de estacionamiento.
Recordemos que el mejor método de enseñanza es el ejemplo, y que si las mujeres son conductoras respetuosas, nuestros hijos también lo serán en un futuro.
Además, de cara a este festejo conviene saber que en el país, la condición conyugal predominante entre las mujeres que son madres, es estar casada o en unión libre.
No obstante, es de destacar el incremento de mujeres que ejercen la maternidad no estando unidas.
Según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID), del total de mujeres de 15 a 54 años que tuvieron al menos un hijo nacido vivo, 15.5% son no unidas, conjunto que se conforma por viudas, divorciadas, separadas y solteras.
Para 2014, con datos de la ENADID 2014, se observa que el porcentaje aumentó a 21.2 por ciento. Tal incremento según Quilodrán (2000), puede explicarse a partir de las transformaciones recientes de la fecundidad, la nupcialidad y la esperanza de vida, que ha generado que haya más viudas que viudos (debido a que las mujeres viven más años que los varones), y a que se ha incrementado la disolución marital por separación o divorcio, así como el incremento de la procreación en mujeres no unidas.
De acuerdo con la ENADID 2014, en México, 33.5% de las mujeres no unidas de 15 a 54 años que han tenido al menos un hijo nacido vivo, son solteras. Se considera como soltera a aquellas mujeres que no se casaron o vivieron en unión libre, es decir, nunca cohabitaron con el padre de sus hijos.
En todos los grupos de edad se identifican mujeres solteras con al menos un hijo nacido vivo, pero se concentran en aquellas con edades comprendidas entre los 20 y 34 años (47 por ciento).
La proporción de quienes tienen un solo hijo es mayor entre las mujeres más jóvenes y se observa un incremento en el número de hijos conforme aumenta la edad. Mientras que 97% del total de las mujeres solteras de 15 a 19 años con al menos un hijo nacido vivo tienen un solo hijo, en las de 40 a 44 años 32% ya tienen dos hijos; y en las mujeres de 50 a 54 años, 38.5% concibió tres o más hijos nacidos vivos en su vida.
En 2014, más de la mitad de las mujeres solteras con al menos un hijo nacido vivo se declara como hija de la jefa o jefe del hogar (55.8%) y 34.5% son jefas de hogar. Por edad, se observa que entre más años tengan las mujeres de este grupo, se incrementa el número de jefas del hogar. Así, mientras solo 2.3% de las adolescentes solteras con al menos un hijo nacido vivo son jefas, 55.7% en el grupo de 40 a 44 años tiene este rol, y representan 74.5% para el grupo de 50 a 54 años.
Según la ENADID 2014, nueve de cada 10 adolescentes solteras con al menos un hijo nacido vivo son hijas de la jefa o jefe del hogar; y 73 de cada 100 no asisten a la escuela.
En 2014, del total de mujeres solteras con al menos un hijo nacido vivo, aproximadamente la mitad (44.3%) cuentan con estudios completos de primaria o tienen al menos un grado aprobado en secundaria o terminada la misma, 8.7% no tienen instrucción o no concluyó la educación primaria, y solo una quinta parte (21.3%) cuenta con nivel superior.
Según el Foro Económico Mundial 2017, con base en datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), señala que las personas con educación superior ganan en promedio el doble que aquellas con educación secundaria y tienen 10% más probabilidades de ser empleadas, mientras que aquellas con un nivel menor a la educación media superior ganan en promedio 22% menos que las que concluyeron ese nivel (World Economic Forum, 2017).
La evidente necesidad de sufragar gastos de salud, alimentación y vivienda, entre otros, impulsa a las madres solteras a incorporarse al mercado laboral. Cifras del primer trimestre de la ENOE 2017 señalan que, del total de mujeres solteras de 15 años y más con al menos un hijo nacido vivo, 41.8% trabajaron. De estas, 56.3% tienen entre 30 y 49 años. Solo 15.1% de las mujeres solteras menores de 30 años con al menos un hijo nacido vivo, trabajan.
Destaca que 31.2% se encuentran en el sector informal, 12.2% en el doméstico remunerado y 38.6% están insertas en empresas y negocios, así como 16.4% laboran para instituciones.
Respecto a la posición que ocupan en sus lugares de trabajo, seis de cada 10 mujeres solteras ocupadas con al menos un hijo nacido vivo se desempeñan como trabajadoras subordinadas, 26.2% trabajan por su cuenta, 6.6% no reciben pago por su trabajo y solo 2.8% son empleadoras
La ENOE 2017 indica que, en México durante el primer trimestre, del total de mujeres solteras ocupadas de 15 años y más con al menos un hijo nacido vivo, más de la mitad (57.1%) no recibe prestaciones por su trabajo; incluso en el caso de las subordinadas, es decir, las que trabajan para una unidad económica en la que dependen de un patrón, 33.2% no cuenta con prestaciones.
La atención a la salud es una de las prestaciones más valoradas, y más aún cuando se tiene hijos pequeños. Los datos del primer trimestre de la ENOE 2017 resaltan que solo 35 de cada 100 mujeres solteras ocupadas con al menos un hijo nacido vivo cuentan con esta prestación.
De acuerdo con cifras del primer trimestre de la ENOE 2017, del total de mujeres solteras de 15 años con al menos un hijo nacido vivo y que trabajan, solo 11.4% tiene el beneficio de cuidados maternos por parte de su trabajo y 12.5% tiene la prestación de guardería para sus hijos; estos son los datos duros de la situación de las madres en México, empero lo anterior será motivo de posterior análisis en otra entrega de Hora 14.