Construir Facebook y no morir en el intento…
Cine viernes 10, Dic 2010Vértebras del cine
Luis Diego Hernández Romero
A lo largo del tiempo de la humanidad, se ha tratado de dejar testimonio de las hazañas que considera dignas de permanencia. No solo pasa con los buenos ratos, sino también con todo tipo de acontecimientos que marquen el curso de la historia, estas situaciones van desde campeonatos deportivos, invenciones, descubrimientos científicos y por supuesto, guerras.
En la última década, la explosión cibernética, y específicamente, la expansión de las redes sociales, han sido, más que un tema, una realidad. Una transición de adecuación en la que estamos sumergidos en casi todos los niveles del pensamiento. La historia detrás del fenómeno Facebook, viene a difundirse en un interesante largometraje, dirigido por David Fincher (El Club de la Pelea).
La Red Social, narra los inicios de Facebook desde el momento de la chispa original en la mente de su creador Mark Zuckerberg, interpretado por Jesse Eisenberg, quien realiza un papel completamente opuesto al de su anterior interpretación en Zombieland. Aunque, en principio el estilo de ambos personajes se inclina por constituir a alguien con pocas habilidades sociales, solo que, en La Red Social, veremos un personaje frívolo, sin escrúpulos y determinado a la expansión de su proyecto, sin duda un trabajo que destaca un fuerte potencial por parte del actor.
La película no intenta dejar un mensaje ético con respecto a la forma de actuar de Zuckerberg, es decir, a su persecución de éxito a costa de sus más cercanas amistades, y en base a sus principios cargados de narcisismo. De cualquier manera, esa forma de presentar “los hechos” imparcialmente provoca una reacción inmediata en el espectador para hacer su propio juicio moral.
La historia se desarrolla desde el juicio legal en el que se acusa a Zuckerberg por haber robado las ideas para la programación Facebook, y como poco a poco va perdiendo confiabilidad entre sus amigos, mientras obtiene un intenso éxito en internet. Con La Red Social, se hacen visibles características propias de nuestra época, y posiblemente, de la naturaleza humana, llevadas al campo de lo cibernético.
Increíblemente, La dirección de Fincher, junto al guión de Aaron Sorkin, atrapan al espectador durante dos incesantes horas cargadas de diálogos intrépidos, que a pesar de su alto contenido técnico (por ejemplo, en lenguajes de programación), no se pasan jamás a lo tedioso. Por el contrario, la tensión corre como una verdadera secuencia de acción, que corre desde el juicio hasta los flashbacks que cuentan los detalles de cómo el proyecto, originalmente pensado para reunir a los estudiantes de Harvard, terminó por ser la red social más grande del mundo.
La película ha sido bien recibida, y con razones claras: tanto el guión, como la actuación son impecables, sin embargo, es el fenómeno como tal, la fiebre Facebook, lo que termina por darle el levante final; pues surge como una forma de identificación entre el espectador y su mundo, su propia historia.
Cuadro por cuadro
El mítico Robin Hood puede tener otra oportunidad de reivindicación para las nuevas generaciones. Tras el fallido intento de Ridley Scott por presentar un personaje más bien histórico, los hermanos Wachowski llegan con la idea de reconstruir el personaje en un ambiente urbano, para quien tienen planeado a Will Smith como protagonista. *** El prolífico escritor Stephen King ha expresado su gusto por la adaptación americana de la novela Déjame Entrar, del escritor noruego John Ajvide, que además ha colocado como la mejor película de terror de la década.