Más de 70% de cáncer infantil es curable con acceso a nuevas terapias

Cápsulas de la salud

Elsa Rodríguez Osorio

• Prueba para detectar el riesgo de padecer cáncer de mama
• Estimulación eléctrica puede mejorar la memoria verbal a corto plazo

La incidencia de cáncer infantil aumenta a nivel global: 300 mil nuevos casos diagnosticados al año, 215 mil en niños de 0-14 años, 85 mil en adolescentes de 15 a 19 años. La tasa mundial es de 50/200 muertes por cada millón de niños. El cáncer infantil representa entre 0.5% y 4.6% de la carga total de morbilidad por esta causa. En cuanto a México, el cáncer de órganos hematopoyéticos es el de mayor presencia en esta población: 59.2% en hombres y 61.1% en mujeres. En el caso de los hombres, le sigue el del sistema linfático y tejidos afines (8.6%) y en el de las mujeres, el de hueso y tejidos articulares  (6%). El promedio anual de muertes por cáncer infantil es de 2,150 defunciones. Con los avances en los tratamientos, el índice de supervivencia es de 56%. Con un diagnóstico oportuno, tratamiento adecuado y atención y apoyo de sus familias, los niños y adolescentes con cáncer pueden sobrevivir y minimizar los costos catastróficos de sus tratamientos. En Estados Unidos, actualmente se desarrollan nuevos medicamentos para atender los diferentes tipos de cáncer infantil:106 contra diferentes leucemias; 92 contra linfoma; 58 contra tumores cerebrales. Por cada niño que sobrevive al cáncer, en promedio, se salvan 71 años de vida. El 15 de febrero es el Día Internacional del Cáncer Infantil.  Su objetivo es sensibilizar y generar conciencia sobre la importancia de los desafíos a los que se enfrentan los niños y adolescentes con cáncer y sus familias, así como de que tengan acceso a diagnóstico y tratamiento oportuno y adecuado. Más de 70% de los casos de cáncer  infantil  son  curables con acceso a nuevas terapias

****

Especialistas del Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN) identificaron nueve genes que predisponen al desarrollo de cáncer de mama en mujeres mexicanas, los cuales se suman a los ya conocidos, y se pueden detectar en mujeres con antecedentes familiares de cáncer. La jefa del Laboratorio de Diagnóstico Genómico del Instituto, Carmen Alaéz Verson, y el especialista en genética del mismo Instituto, Luis Leonardo Flores Lagunes, explicaron que las mujeres que tienen antecedentes de cáncer  familiar pueden realizarse, una prueba para detectar genéticamente si están en riesgo de desarrollar cáncer. La prueba se realiza con tecnología de vanguardia, y brinda la oportunidad de pasar de la medicina curativa a la preventiva, al ofrecer la posibilidad de mantener una estrecha vigilancia de la paciente para poder prevenir o actuar de manera temprana. Se ha aplicado la prueba a 202 mujeres con cáncer de mama, quienes corren el riesgo de desarrollar otro tipo de tumor, por lo que se ha dado seguimiento preventivo. El estudio consistió en análisis de sangre especial: hasta el momento, se han analizado 167 muestras, a través de pruebas de secuenciación masiva de 67 genes para determinar su papel en el desarrollo de cáncer de mama u ovario, entre otros cánceres. De las 167 muestras, 92% son mujeres que tuvieron cáncer de mama y el resto cáncer de ovario. Se observó que el 41% de ellas tenía antecedentes familiares de cáncer. El promedio de edad fue de 40.5 años. De las 167 mujeres, 51 tuvieron una variante patogénica, es decir que tienen mayor riesgo de cáncer, mientras que el 24% no se encontró una variante en los genes estudiados y en 45% el resultado fue incierto, por lo que se siguen investigando. El estudio tiene el potencial de que en el futuro se detecten otros genes relacionados con la enfermedad.

****

 Hacerle cosquillas al cerebro en una zona específica con estimulación eléctrica de baja intensidad puede mejorar la memoria verbal a corto plazo, según un estudio del Dr. Michal Kucewicz, del Departamento de Neurología de Mayo Clinic. Se descubrió que al estimular la corteza lateral del lóbulo temporal del cerebro, área ubicada en los lados de la cabeza entre las sienes y las orejas, los pacientes podían recordar mejor las palabras, de una lista presentada con anterioridad cuando se les aplicó estimulación eléctrica de baja amplitud en el cerebro. Una paciente informó que le era más fácil formar en su mente una imagen de la palabra para recordarla. “El resultado más emocionante del estudio es que la estimulación directa de esa inexplorada zona cerebral permite mejorar la memoria para la expresión verbal”. La investigación  se enfocó en cuatro áreas cerebrales conocidas por sustentar el recuerdo de hechos y eventos que pueden evocarse conscientemente.

elros05.2000@gmail.com