Diques contra Morena
Ramón Zurita Sahagún martes 6, Feb 2018De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
De las nueve entidades que tendrán procesos electorales para el cambio de gobernante, Morena puede hacerse de seis, si es que los pronósticos se hacen realidad.
Ciudad de México, Veracruz, Puebla, Chiapas, Morelos y Tabasco, son esas entidades en las que el crecimiento del partido y la buena presencia de sus candidatos podrían llevar a la victoria al partido que postula como candidato presidencial a Andrés Manuel López Obrador.
En los restantes tres (Jalisco, Guanajuato y Yucatán) sus candidatos están bien evaluados, pero sus posibilidades de ganar se encuentran bastantes lejanas.
Los estados mencionados concentran una tercera parte de los electores del país y podrían ser la diferencia entre el triunfo y la derrota de los candidatos presidenciales, por lo que la votación con que contribuyan será sumamente importante.
Más que menos o menos que más, son los resultados que se asoman en los sondeos y encuestas que se han realizado en algunas entidades del país, en la que los problemas que enfrentará Morena para salir airoso son de distinta índole.
Ciudad de México, Veracruz y Puebla, son entidades en las que la refriega será tremenda, ya que en las tres entidades, los gobernantes no dejarán que sus candidatos caigan ante el partido que fundó AMLO.
Se trata de personajes que se han convertido en fustigadores del tabasqueño, unos más que otros y que lo último que permitirían en que esas entidades escaparan de su control.
El caso de la capital del país es sumamente interesante, ya que si bien nunca fueron aliados, López Obrador y Miguel Ángel Mancera, iniciaron respetuosamente su relación y el hoy candidato presidencial de Morena fue uno de los soportes que tuvo MAM para ser, primero candidato y después ganar los comicios en 2012.
La ambición de Mancera provocó el alejamiento entre ambos, aunque la relación seguía, respetuosa, con todo y lo sucedido con las acusaciones a Marcelo Ebrard y el supuesto fraude con la Línea Dorada del Sistema de Transporte Colectivo.
El crecimiento político de Mancera y su intromisión en el PRD, partido en que no milita, pero si controla y sus deseos de ser candidato presidencial, abrieron una brecha entre AMLO y MAM.
2015 fue el punto de quiebre, ya que Morena, constituido en partido político le arrebató varias delegaciones políticas y la mayoría de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
El alejamiento y hasta las puyas surgieron entre ambos y la disputa por el gobierno de la CDMC se centra entre dos grupos, el partido de López Obrador, con Claudia Sheinbaum de candidata y el del partido que controla Mancera Espinosa con Alejandra Barrales de candidata.
Veracruz es una de las plazas en las que el crecimiento de Morena es sorprendente, tanto que en 2016 obtuvieron una copiosa votación con su candidato Cuitláhuac García, casi un desconocido en el estado. Un años después, 2017, los candidatos de Morena se quedaron con alcaldías tan importantes como Xalapa, capital del estado, Coatzacoalcos y Poza Rica, entre otras.
Morena repite candidato a gobernador, mientras que el PAN, aliado con el PRD tendrá en el hijo del actual gobernador, Miguel Ángel Yunes, a su abanderado.
Aquí el ingrediente extra es que Andrés Manuel López Obrador y Miguel Ángel Yunes Linares, se encuentran enfrentados de manera personal. Uno tilda de corrupto y nepotista al gobernador de Veracruz y el otro lo califica de loco y mesiánico.
El tono usado entre uno y otro es de calibre grueso, por lo que se establece que Yunes Linares defenderá su coto de poder hasta las últimas consecuencias, considerando que de ganar el candidato de Morena, revisaría las cuentas públicas con lupa.
El gobierno de Yunes Linares es sumamente cuestionado y hasta se señala que sus prácticas son similares a las usadas por su antecesor Javier Duarte, en las que simulan compras, no se paga a proveedores, además de que la inseguridad y la violencia, son temas de escándalo.
De ganar Yunes Márquez, no habría problema de revisión de cuentas y hasta se especula que el verdadero control de las decisiones de gobierno sería asumido por su padre, el actual gobernador Yunes Linares.
Es Puebla, la tercera de las entidades en que se pretende no dejar pasar a Morena, ya que el estado se convirtió en reducto de Rafael Moreno Valle Rosas, el ex gobernador que no pudo ser candidato presidencial del PAN.
La candidata de la alianza PAN-PRD-MC es Martha Erika Alonso Hidalgo, esposa de Moreno Valle y el gobernador del estado es José Antonio Gali Fayad, considerado operador de Moreno Valle.
El candidato de Morena es Luis Miguel Barbosa Huerta, ex coordinador de los senadores del PRD y catalogado como cacique de la izquierda, por el control que ejerció sobre el partido del sol azteca en ese estado.
La situación en Puebla, donde curiosamente AMLO ganó como candidato presidencial hace seis años y ahora se mantiene como favorito es que Moreno Valle se quedó sin la candidatura presidencial y pretende conservar a Puebla como su coto político personal.
Su esposa candidata al gobierno estatal por el Frente constituido alrededor de Ricardo Anaya Cortés, su operador gobernando y él mismo ubicado como un buen operador político y electoral son las armas con que cuenta para refrendar el triunfo de sus alfiles.
Moreno Valle construyó una gran estructura electoral que mantiene aceitada y que se encuentra lista para frenar a los candidatos de otros partidos, especialmente a los de Morena.