Un mercado negro
Alberto Vieyra G. lunes 15, Ene 2018De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¿Qué es un mercado negro?
El tumbaburros de la Real Academia, define que, mercado negro o economía subterránea, es el término utilizado para describir la venta clandestina e ilegal de bienes, productos o servicios, violando leyes fiscales y todo tipo de normatividad establecida por el gobierno o las empresas.
En la industria de la política mexicana, surge un mercado negro, con la compra-venta de votos, con las que los candidatos independientes a diputados, senadores, alcaldes y presidente de la República, han sido sorprendidos por el crimen organizado, que les ha ofrecido padrones apócrifos en los que figuran vivos y muertos.
El tan venido a menos INE, denunció la semana pasada que candidatos independientes son investigados por el tráfico ilegal de firmas, para lograr una candidatura a cargo de elección popular.
El INE no aclara qué candidatos están siendo investigados, aunque dice que los aspirantes a diputados investigados, corresponden a las entidades de Nuevo León, Ciudad de México, Tabasco, Chiapas y el Estado de México. Hasta el pasado jueves, el pseudocandidato independiente a la presidencia de la República, Jaime Rodriguez “El Bronco”, acumulaba un millón 488 mil 318 firmas y validados 6 de los 17 estados requeridos.
Se sabe que en Sinaloa, Manuel Clouthier, hijo del desaparecido “Maquío”, ya concluyó, desde hace más de una semana, la recolección de más de 41 mil firmas validadas por el INE, y, en consecuencia, sería el primer senador independiente que figure en las boletas electorales del uno de julio.
La revelación del INE sobre el mercado de votos le ha venido a echar un velo de misterio e ilegitimidad a las candidaturas independientes. ¿Quiénes serían los perversos interesados en deslegitimar, desde ahora, a esa nueva figura de las candidaturas independientes en la democracia mexicana? ¿La ponzoñosa partidocracia? ¿El propio INE? ¿Quién pudo haber vendido el padrón electoral a las mafias?
Si nos atenemos a que, solamente los mafiosos partidos políticos, el INE y el TRIFE en toda su estructura nacional poseen una copia de padrón electoral, ¿Quién, entonces, pudo haber filtrado esos datos ciudadanos, apócrifos o no apócrifos, a la delincuencia organizada?
Pedro Ferriz de Con, uno de los aspirantes a la candidatura presidencial, denuncia también, que, al principio del proceso de recolección de firmas, se le acercaron algunas personas para ofrecerle un padrón con un millón de habitantes, pidiéndole 8 millones de pesos para obtener ese abultado documento.
Estamos hablando de que cada voto sería comprado a razón de 8 pesos, que, en el caso de los aspirantes presidenciales, se requieren más de 866 mil firmas, sin que ello garantice que son firmas de carne y hueso, puesto que el INE sostiene que la mayor cantidad de firmas no han sido validadas porque corresponden a personas inexistentes o ya fallecidas. ¿Y qué espera el INE para denunciarlo ante la FEPADE? Se está viendo muy lenta y, bueno sería también, que nos vaya adelantando algo sobre la amenaza rusa en las elecciones mexicanas, de las cuales le hablaré en nuestras próximas entregas.