Granados, un líder “a todo terreno”; Chiapas, Morelos y Yucatán, no tienen “Por México al Frente”; caso Ailen, un entuerto para Garrido
Adriana Moreno Cordero miércoles 10, Ene 2018La Retaguardia
Adriana Moreno Cordero
El líder nacional del PRD, Manuel Granados, es un hombre que se define como “a todo terreno”, que llegó a la dirigencia del sol azteca, para bajar a ese partido a las bases y no se quede como un instituto político de élite, porque ese es el problema.
Y hablando de la candidatura presidencial de la coalición “Por México al Frente”, el ex director Jurídico del Gobierno de la CDMX, es un convencido de que Ricardo Anaya obtendrá el triunfo en las elecciones de julio, con todo y que las más recientes encuestas colocan al “Joven Maravilla” hasta un tercer sitio.
No obstante, Granados considera que el famoso comercial que hiciera con el ex candidato perredista al gobierno del Estado de México, Juan Zepeda, donde interpretan “La Bamba” con el estribillo “Anaya Presidente”, y antes, esperaron su camión “en la terminal del ADO”, representa un golpe mediático aún mayor al niño de 8 años Yuawi, de Movimiento Naranja, que ya hasta va a grabar un disco y su video se volvió viral en las redes.
Se supone que ese “spot” es el inicio de una estrategia en la que el dirigente perredista “aterrizará” a Anaya, quien se ha hecho también famoso en las redes sociales, pero específicamente para un sector de la ciudadanía, el de la clase media alta y de ahí, para arriba, por lo que al llamado “Jóven Maravilla” le hace falta vincularse con las clases populares, cosa que, -a juicio de Granados-, no ha conseguido, por cierto, otro de los aspirantes presidenciales, -léase, José Antonio Meade, del PRI-. ¿Será?
En cuanto al trabajo que viene realizando de manera intensa Granados, está el concretar a la coalición “Por México al Frente” en todos los estados. Sin embargo, hay por lo menos tres en los que no se ha podido lograr este objetivo, y se trata de Chiapas, Morelos y Yucatán.
La entidad chiapaneca ofrece un panorama interesante políticamente hablando, ya que como ahí tampoco habrá coalición entre el Partido Verde y el PRI, entonces, el panorama se abre, ya que el partido del tucán podría acercarse ni más ni menos que al PRD, con una de las cartas fuertes del Verde, y se trata de Eduardo Ramírez, líder del Congreso chiapaneco, militante del PVEM y el “gallo” del gobernador Manuel Velasco Suárez.
Otros que aspiran y que no son de menor peso son: María Elena, “La Nena” Orantes, ex moreirista y ex priísta, que no ha podido llegar al Palacio de Gobierno de Tuxtla Gutiérrez. También está otro eterno “suspirante”, José Antonio Aguilar Bodegas, ex líder del Congreso estatal.
Por su parte, Pablo Salazar Mendiguchía, ex gobernador chiapaneco, cuenta ya con las firmas que se requieren para llegar a un escaño al Senado de la República y aun así, tiene pensado también, acercarse al sol azteca, de tal suerte que puede que el PRI pierda otro de los estados que en el pasado fueron bastión tricolor.
En el caso de Morelos, definitivamente, pudo más la obstinación y de alguna manera el nepotismo del gobernador Graco Ramírez que, contra todo y contra todos, finalmente impuso a su hijastro, Rodrigo Gayosso como candidato del PRD al gobierno de la entidad morelense, lo cual no deja de resultar hasta raro, porque cuando la coalición entre PAN y PRD todavía no “amarraba”, Graco se pronunció a favor de conformar el Frente. Es más, hasta se “autodestapó” como presidenciable, y antes, impuso una dura guerra en contra del alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, quien también le anda tirando a la gubernatura del estado; sin embargo, se sabe que no dejarán llegar al ex futbolista, con todo y la popularidad de la que goza.
Yucatán no es todavía un caso cerrado para la coalición “Por México al Frente”, pues mucho se habla de que el PRD no tiene nada que hacer electoralmente hablando en ese estado.
MUNICIONES
*** El caso del asesinato de la modelo argentina, Karen Ailen, se ha vuelto para el procurador de Justicia de la Ciudad de México, Edmundo Porfirio Garrido, un verdadero entuerto del que, al parecer, ya no sabe ni cómo ni por dónde salir. El hecho de que quien había sido acusado como presunto asesino, Axel Arenas, haya salido de la cárcel por haber demostrado que no estaba en el hotel donde fue ultimada la modelo, no habla más que de la debilidad con la que fue armado este expediente. Arenas se encontraba a muchos kilómetros de distancia, en Colombia. De hecho, se esperaba que ayer, cuando se llevó a cabo la conferencia de prensa, el procurador Garrido le ofreciera una disculpa a Arenas, cosa que nunca ocurrió.
*** Una conclusión es que el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, confió plenamente en la actuación de su titular de la PGJDF, que sin más, consideró que había suficientes pruebas en contra de Axel Arenas, quien si no hubiera podido demostrar que no estuvo en el lugar de los hechos, habría tenido que purgar una condena de algo así como 40 años.
*** Pero varios han sido los errores que ha cometido Garrido a lo largo de su gestión y “botones” de muestra, sobran. Por ejemplo, el día de los disturbios en la delegación Coyoacán, entre morenistas y perredistas, dos golpeadores que generaron el zafarrancho, de nombres Lorenzo Montiel y Luis Alberto Montiel Andrade, se presentaron a denunciar a Martí Batres, líder de Morena en la capital de la República, y en lugar de detenerlos por los delitos de lesiones, daño y robo, el procurador filtra la denuncia de los Montiel y entonces, los dejan libres.
*** Más o menos por esos días, aparecieron mantas en contra de Edmundo Porfirio Garrido, denunciando extorsión de personal de narcomenudeo, pero no existe resultado alguno de supuestos operativos. Diversos analistas le recomiendan al doctor Mancera que lo mejor que podría hacer, es pedirle la renuncia al procurador de la CDMX, que sin duda, deja mucho qué desear.