La revolufia
Alberto Vieyra G. jueves 23, Nov 2017De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¿Murió la revolufia? ¿Cuándo la enterraron? ¿Quiénes la mataron y por qué? ¿O la revolufia ya cayó en desuso?
La bola o revolufia que estalló en México en 1910, a las 5 de la tarde del 20 de noviembre, fue, como lo definiría el filósofo y revolucionario alemán Federico Engels: “un movimiento armado que trastoca la vida institucional, derroca un Estado y las masas toman el gobierno de sus propios destinos”.
Sí, la Revolución Mexicana acabó con un Estado tiránico y dictatorial encabezado por Porfirio Díaz, los científicos panistas de aquella época y una bola de terratenientes, incluyendo la Iglesia católica, que eran la columna vertebral del control político y social del porfiriato.
La revolufia, acabó, pues, con el estado tiránico porfirista para dar origen al estado social y al México de las instituciones y las libertades, consagradas en la Constitución de 1917, en la que serían plasmadas las reivindicaciones sociales de aquel pueblo oprimido.
Aunque la lucha armada fue convocada y encabezada por el burgués terrateniente Francisco Ignacio Madero González, en los hechos se irían a la bola Pancho Villa, Pascual Orozco y Toribio Ortega por el norte, y por el sur los sombrerudos de Emiliano Zapata.
La revolufia fue una fratricida lucha social del pueblo de México en contra de sus opresores: los ricos, muchos de ellos panistas, que dejó más de 1 millón de muertos y más de medio millón de desplazados.
Durante más de medio siglo, el concepto de la revolufia, sería interpretado, tiránicamente, por los llamados vencedores en esa Revolución Mexicana, para mantenerse en el poder. Más de medio siglo estaría vigente ese estado social que garantizaba los derechos de todos los mexicanos, hasta que, en 1982, llegó el estado económico, surgido de una economía neoliberal que, el Papa Francisco llama: la economía de la muerte.
No han faltado los sabelotodo, que han dicho que la Revolución Mexicana es una revolufía inacabada, inconclusa, pero este átomo, que no se anda con rodeos y que le llama al pan pan y al vino vino, sostiene que es una revolución traicionada por una clase de tecnofondomonetaristas al servicio del imperio capitalista del mal: los vendepatrias a partir de Miguel de la Madrid, Pero, sea como sea, y haiga sido como haiga sido, la revolufia de 1910 parió por añadidura a este gran país llamado México, en el que las masas campesinas y populares, sin faltar los ideólogos como los Flores Magón, Genovevo de la O, José Vasconcelos y otros, pusieron su grano de arena para que hoy tengamos un México con carretadas de libertades, pero por desgracia, se han ido perdiendo a manos de una partidocracia para favorecer al capitalismo.
Pese al sacrificio de nuestros compatriotas de ayer, México es una nación injusta. Las tres cuartas partes de la riqueza nacional se concentra en menos de 150 familias, mientras que más de 100 millones de mexicanos son pobres. ¿Es necesaria otra revolufia para acabar con ese maldito orden social y económico?