2018 electoral, nada para nadie todavía
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 13, Nov 2017Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Al “Peje” le salen competidores, ya no va solo
- El Frente, el PRI y los independientes, opciones reales
Hasta hace unos meses, la trayectoria política de Andrés Manuel López Obrador rumbo a la Presidencia de la República parecía imparable, de hecho, en las encuestas de opinión pública el nombre del tabasqueño sigue punteando en las preferencias electorales, aunque, hay qué decirlo, su porcentaje de aceptación quedó varado entre el 30 y 32 por ciento, y lleva semanas que la cifra no sufre modificaciones hacia arriba y más bien la tendencia es a la baja.
En ese escenario, las mediciones endoscópicas también señalaban que el partido oficial, el Revolucionario Institucional (PRI), reflejaba una trayectoria muy abajo de los punteros en las encuestas y esa tendencia lo alejaba de cualquier posibilidad de triunfo, por lo que la competencia por la silla presidencial se antojaba cerrada entre el Partido Acción Nacional (PAN) y el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que encabeza el político conocido como “El Peje”.
Las estadísticas han cambiado, conforme se acercan los tiempos legales para el nombramiento de candidatos presidenciales, el escenario es de mayor competencia y recientes estimaciones señalan que “El Peje” ya tiene adversarios que le darán la pelea, que su camino a la silla del águila ya no es tan segura, de hecho se puede decir que es poco probable que gane.
Son varios factores que al paso de los días le han ido restando fuerza al otrora poderoso movimiento de los morenos, por un lado la imposición de aspirantes a candidaturas, disfrazada con supuestas encuestas, en las que han sido desplazadas figuras locales y en su lugar se ha privilegiado el amiguismo y compadrazgo, donde el mayor detractor del ejercicio democrático ha sido el dedo de Andrés Manuel, y el mejor ejemplo se puede notar en el desplazamiento de una figura como la de Ricardo Monreal, jefe delegacional en Cuauhtémoc, por un perfil de mayor confianza, Claudia Shainbaum, jefa delegacional en Tlalpan, para coordinar los trabajos electorales en la Ciudad de México y bajo esa figura prácticamente erigirse como candidata para la jefatura del gobierno capitalino, ello, a pesar que casi todas las encuestas apuntaban a que ese cargo se lo darían a Monreal.
Además del enojo y división que han causado los referidos estudios de opinión entre algunos liderazgos de Morena, los líderes nacionales de este movimiento desoyeron a sus simpatizantes, que pedían una alianza con el partido que les dio origen, el PRD, y en lugar de esa opción decidieron ir acompañados por el Partido del Trabajo, el más salinista de los partidos, pues quienes de esto saben aseguran que el nacimiento del PT se debe al generoso apoyo de Raúl Salinas de Gortari, hermano del presidente de México del mismo apellido y que para efectos de alusiones “El Peje” lo llama “El innombrable”.
Pero eso es historia, la realidad es que para el proceso electoral del año entrante, donde además de la Presidencia estarán en juego 9 gubernaturas, la renovación del Congreso de la Unión (500 diputados federales y 128 senadores), entre otros cargos de elección, por un lado la llamada izquierda mexicana llega dividida, por otro por primera vez habrá candidaturas independientes en las boletas electorales y también por primera vez el Partido de la llamada derecha mexicana, que aunque divididos, llegan con una fuerza nunca antes vista, pues son gobierno en 12 entidades federativas.
Así, en lo que ideológicamente parecía imposible, el PAN, PRD y MC, han unido sus fuerzas y se presentarán con un candidato presidencial común para 2018 bajo el nombre de Frente Ciudadano por México y sus posibilidades de ganar sólo estarían en riesgo si el dirigente del PAN, Ricardo Anaya, se empecina en querer ser el candidato de esa alianza.
Al PRI no se le puede dar por muerto si consideramos que es gobierno en 15 entidades, entre ellas el Estado de México (11.3 millones de ciudadanos), que junto con Jalisco (5.7 millones) y Chiapas (3.4 millones), son los estados tricolores con mayor peso electoral de cara a la elección presidencial de 2018, y a ello se le debe poner a su favor que es el único partido que cuenta con una organización territorial sólida y un voto duro, que si bien cierto ya no luce tan duro, si es un factor que les puede funcionar. Así el ambiente que priva en torno al proceso electoral en ciernes, “El Peje” sigue encabezando las preferencias y esta tendencia obedece en gran medida a que es el único candidato, con nombre y apellido, quien un año antes del proceso electoral que oficialmente inició en septiembre pasado, ha sido el único aspirante en campaña y eso de alguna manera le dio amplia ventaja frente a sus aún desconocidos competidores, eso sin descontar que este personaje va por su tercera competencia en esta lides.
A menos de ocho meses de la encuesta de encuestas, del día de la elección, del primer domingo de julio de 2018, podríamos decir que las encuesta lucen parejas entre los partidos contendientes y aunque del lado de los independientes las posibilidades de un triunfo son escasas, es un hecho que su participación restará votos a los partidos políticos y a sus candidatos. Así que, por el momento, no hay nada para nadie, pero ya falta poco para la hora de la verdad, y hasta ahí porque como veo, doy.