Urgen leyes y fiscales
¬ Salvador Estrada martes 7, Nov 2017Folclor urbano
Salvador Estrada
México tiene muchos problemas, porque sus leyes no se aplican o se evaden, y las nuevas, las que se necesitan para el impulso de la seguridad y la democracia, están en lista de espera por la pereza de los legisladores.
Los diputados y los senadores se gastan millones de pesos en viajes, gastos, viáticos y en sus llamadas reuniones plenarias, y esta lana que derrochan es independiente de la que cobran en comisiones y en sus dietas mensuales. En los últimos tres años los senadores, en las reuniones previas al inicio del periodo ordinario de sesiones, se gastaron casi 5 millones de pesos.
Y su trabajo, que es legislar, el importante, el que urge, lo ponen a un lado, lo dejan para otro día, lo archivan para después analizarlo y se quedan las iniciativas de ley en el congelador.
La iniciativa de ley para que la policía tuviera un mando único, se quedó en veremos, y tanto en los estados como en los municipios, la policía hace de las suyas, mientras no se legisle al respecto.
El llamado crimen organizado también hace de las suyas y en complicidad con las policías ha llegado, por ejemplo, en Sinaloa, a amedrentar y extorsionar a pequeñas comunidades, que ahora son pueblos fantasmas porque sus habitantes huyeron ante el temor de ser ejecutados.
En 28 estados de los 32 de este país la violencia y los delitos no paran. En Oaxaca y Guerrero los asesinatos son de todos los días. Por ejemplo, entre sábado y domingo, fueron ejecutadas diez personas en Acapulco y en los municipios de Atoyac y la Unión. En Oaxaca, de agosto del 2106 a octubre de este año, se registraron 272 homicidios relacionados con la delincuencia organizada.
Para frenar y disminuir los delitos y la violencia en nuestro país se requiere de un solo mando y la capacitación profesional de la policía y que cuente con un salario digno y remunerador porque sin ello seguirá la corrupción, la impunidad y la proliferación de la violencia. Todavía en la Ciudad de México los policías “tienen que pagar” para usar pistola y andar en patrulla.
Y los legisladores ni se enteran ni se preocupan de la ola de violencia, porque siempre que pueden, hacen puente con singular alegría. Después de tomarse el fin de semana como descanso con motivo de la celebración de los días destinados a los fieles difuntos, los senadores regresan a sus labores legislativas.
La ciudadanía ya se está hartando de que sus legisladores no funcionen como debe ser y está en espera de que saquen adelante los nombramientos de los fiscales, el general, el anticorrupción y el de la Fepade.
Estos nombramientos son de vital importancia para que sigamos viviendo en un estado de Derecho y nuestra endeble democracia se fortalezca sobre todo porque en el año próximo las elecciones, no solamente son por la Presidencia de la República, sino que se elegirán 500 diputados y 128 senadores, además de gobernadores y alcaldes.