Éxodo senatorial
Ramón Zurita Sahagún jueves 7, Ene 2010De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Dejar inconclusa la labor asignada por la ciudadanía y optar por asegurar su futuro político es la principal norma que rige a los senadores de la LXI Legislatura del Congreso de la Unión.
Es por eso que cerca del 25 por ciento de los actuales senadores se alistan para participar en las elecciones que tendrán lugar el presente año en busca de otro cargo de elección popular.
Sin distingos de partido, los senadores del PAN, PRI, PRD, Verde, Convergencia y Partido del Trabajo, están dispuestos a solicitar licencia para dejar su escaño y competir por diversas candidaturas.
En algunos casos son militantes del mismo partido que disputarán el mismo cargo y en otros irán por cargos secundarios en las 12 elecciones estatales (13 si se confirma que Guerrero entra también) previstas para este año.
Algunos de los aspirantes guardan mayores posibilidades que sus compañeros de escaño para competir con los colores de su partido por sus respectivos gobiernos estatales y con amplias posibilidades de triunfo los que los llevaría a solicitar licencia definitiva, aunque en otros se considera que regresarán a sus escaños con el sabor amargo de la derrota electoral, en algunos casos en la contienda interna y en otros en la constitucional.
Sin embargo, esa posibilidad no les arredra y algunos de ellos ya solicitaron licencia y otros más lo harán en las próximas semanas, aunque, eso sí, estirarán hasta el máximo la solicitud de licencia, para evitar que sus suplentes ocupen el cargo y cobren las dietas correspondientes.
La bancada más afectada por las licencias será la de Convergencia, donde los cinco senadores propietarios aspiran a diferentes cargos de elección popular, ajenos a su escaño senatorial.
Ellos son su coordinador Dante Delgado Rannauro, aspirante a encabezar una coalición de izquierda en Veracruz, entidad que ya gobernó en calidad de interino. Gabino Cué Monteagudo, candidato de la izquierda que busca una alianza con los partidos de derecha al gobierno de Oaxaca, alianza que lo avaló hace seis años. Francisco Xavier Berganza, quien pretende competir por el gobierno de Hidalgo, encabezando una coalición entre Convergencia y Acción Nacional, si es que Xóchitl Gálvez no logra el consenso de los partidos de oposición. José Luis Lobato, aspirante a coordinar la campaña de Delgado Rannauro en Veracruz. Luis Walton Aburto, quien busca nuevamente competir por la alcaldía de Acapulco, avalado por los partidos de que en el pasado reciente le negaron el respaldo.
Los senadores priístas aportan su buena cuota de prospectos a gobernadores en las figuras de Carlos Lozano de la Torre, aspirante al gobierno de Aguascalientes; Mario López Valdez, Sinaloa; Adolfo Toledo, Oaxaca y Ángel Eladio Aguirre Rivero, Guerrero.
El partido que cuenta con la bancada más numerosa en el Senado es también el que más aspirantes a gobernadores concentra, ya que en algunos estados, los dos senadores de mayoría aspiran a la nominación.
Son los casos de Rafael Moreno Valle y Humberto Aguilar Coronado en Puebla y Rodolfo Dorador Pérez Gavilán y Andrés Galván, Durango.
Pero Juan Bueno Torio confía en remontar las encuestas y encartarse como candidato al gobierno de Veracruz; José Isabel Trejo está dispuesto a dejar la presidencia de la Comisión de Hacienda para competir por el gobierno de Zacatecas y Rubén Camarillo pretende abanderar al partido blanquiazul en Aguascalientes, dejando acéfala la secretaría de la Comisión de Energía.
Rosalía Peredo ya cuenta con licencia para disputar con las siglas del PAN el gobierno de Tlaxcala y José Luis Sacramento pretende hacer lo propio en Tamaulipas. Ramón Galindo Noriega confía en tener vía libre para la candidatura del PAN
Los senadores perredistas no se encuentran ajenos a la euforia por disputar otros cargos de elección popular, como son los casos de Lázaro Mazón y David Jiménez, ambos del estado de Guerrero. José Guadarrama que pretende revivir la experiencia de competir por el gobierno de Hidalgo. Antonio Mejía Haro y Tomás Torres buscan la misma nominación en Zacatecas. Minerva Hernández ya se ausentó del Senado de la República con su licencia respectiva en busca de la candidatura del sol azteca al gobierno de Tlaxcala. José Luis García Zalvidea busca repetir la experiencia de su hermano Juan Ignacio “Chacho” García Zalvidea de competir por el gobierno de esa parte de la península de Yucatán.
Ludivina Menchaca del Partido Verde sabe que son pocas las posibilidades de incrustarse como candidata al gobierno de Quintana Roo, por lo que mantiene esperanzas de competir, por lo menos, por la alcaldía de Benito Juárez -Cancún-.
Alejandro González Yáñez representa al único petista del Senado que busca una candidatura a un gobierno estatal, en este caso Durango.
De este gran total de senadores que buscan alargar su carrera política en otros cargos de elección popular, la mayor parte de ellos regresará a su escaño con la derrota a cuestas, en algunos casos ocurrida dentro de la elección interna y en otros propinadas por sus adversarios de otros partidos.
Los menos disfrutarán de las mieles del triunfo y los más de las hieles de la amargura.
*Tlaxcala puede ser considerado el estado de la alternancia, donde los tres más recientes gobernadores surgieron de partidos distintos, aunque a los tres los identifica su militancia priísta primera.
José Antonio Álvarez Lima consiguió la victoria con los colores del PRI, seis años después, Alfonso Sánchez Anaya, ex presidente estatal del PRI logró el triunfo con la bandera del PRD y un sexenio más tarde, Héctor Ortiz Ortiz, también ex presidente estatal del PRI lo hizo abanderando al PAN.
Habrá que ver si se repite la historia y un candidato ajeno al PAN (partido gobernante) repite la historia de la alternancia.