Sexy y atrevido, Bosé cerró su tour en el Auditorio Nacional
Espectáculos lunes 22, Nov 2010El artista confesó que “todos llevamos dentro a un perro y yo soy el ejemplo típico del más perro, pero sábado y domingo soy la más perra de todas, me gusta ser perra y me encanta serlo”
Gloria Carpio
El cantante español Miguel Bosé volvió a demostrar que tiene un público mexicano marcadamente leal en su último recital en el Auditorio Nacional, con el que puso fin a su tour global titulado Cardio.
Las casi diez mil almas que se congregaron en el Coloso de Reforma pudieron disfrutar no sólo del repertorio del también actor español, sino que prácticamente interactuaron con él, por una parte cuando escucharon sus reflexiones y por la otra cuando bailaron con algunas de sus melodías, habiendo respondido con tres largas ovaciones, todos puestos de pie.
En esta ocasión el intérprete de Amante bandido hizo un derroche de tecnología, al desplazar dos pantallas LED semicirculares y una curva de luces, que hacían cambiar la escenografía y el escenario con distintos colores y que llegaron a su clímax durante la canción de Bambú, cuando el hijo del toreo Luis Miguel Dominguín quedó en medio y se pudieron observar más de seis panoramas distintos de su figura, cosa que asombró a la concurrencia, pues prácticamente este fue el valor agregado del recital.
Otro factor lo fueron las coristas, que hicieron varias coreografías y esta vez no se quedaron al fondo.
Todo ello sumado hizo que la gente se entregara y emocionaran a Miguel Bosé hasta las lágrimas y comenzara con la primera reflexión: “Estoy de nueva cuenta en mi casa, porque esta ya es mi casa, porque ya perdí la cuenta de las veces que me he presentado en el Auditorio. Estoy dispuesto a llevar estos momentos como un tesoro, pero para recibir este mensaje deben abrir ojos, oídos y sentidos y si quieren también las piernas para que se enganchen y no sepas decir no”.
Una de esas largas ovaciones de pie que el público le tributó a Miguel Bosé, fue cuando cantó Dame argumento y Júrame, lo cual dio pie al cantante para provocar también a sus fans y explicar el fondo de la melodía El perro. Hizo notar que “todos llevamos dentro a un perro y yo soy el ejemplo típico del más perro, pero sábado y domingo soy la más perra de todas, me gusta ser perra y me encanta serlo”.
“Buscamos a alguien, a un amo que nos cuide y que nos atienda, que nos quiera y que nos comprenda, y cuando ya lo tenemos en el bolsillo le decimos un día: Sabes qué mi amor, yo todo lo que hago lo hago por ti; y con esas palabras metes una presión tremenda a la pareja y descargas una responsabilidad enorme.
Eso sí, cuando cantó “Si tú no vuelves” hizo suspirar a todos los corazones ahí presentes.
Para cantar la canción Sevilla, Miguel Bosé apareció con una falda larga encima de su pantalón, la cual después utilizó como un capote y dio pie para que sus coristas iniciaran la más espectacular de sus coreografías.
El hombre se presentó con un traje de tres piezas color oscuro y camisa blanca y abrió el recital con Ayurvedico y Cardio.
Luego hablaría de los desastres naturales que están ocurriendo en todo el mundo, para señalar que “pobres de las madres que no sabían que iban a parir monstruos, porque algunos son de lo peor, nos estamos acabando la tierra y a esto se le suman los desastres naturales., donde las personas afectadas tienen que dejar sus cosas y bienes e iniciar una nueva vida.
Pidió que “ojalá y no nos toque a nosotros, porque no hemos aprendido una palabra que tiene que ser multiplicada por tres: solidaridad, solidaridad y solidaridad”.
Con estas palabras prácticamente Bosé se despidió de sus fans al cantar Nada particular, pero no pudo hacerlo debido a la insistencia de la gente para que siguiera cantando, pues aún le faltaba interpretar A punto estuve de, Amante bandido y Te amaré que cantó, antes de decir “Buenas noches México, los quiero hasta siempre”.