Puigdemont deja en suspenso independencia de Cataluña
Mundo miércoles 11, Oct 2017- Comparece ante el Parlamento
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, propuso ayer martes al parlamento suspender los efectos de la declaración de independencia de esa región autónoma española que procedía luego del referéndum del 1 de octubre, para abrir espacio al diálogo con diversas instancias.
En su participación en la sesión del parlamento catalán, Puigdemont declaró la independencia de esta comunidad respecto de España, pero pidió se suspenda la medida para abrir paso a una etapa de diálogo con el Estado español.
Al comparecer ante el Parlamento de Cataluña para informar sobre la situación política que se vive tras la consulta de autodeterminación del 1 de octubre, aseguró que el resultado muestra que se ha ganado el derecho a ser un Estado independiente.
“Hoy asumo el mandato de que Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de República”, dijo Puigdemont, para luego pedir “al Parlamento que suspenda la declaración de independencia para iniciar un diálogo las próximas semanas”.
Según el líder catalán, su Ejecutivo celebrará una sesión ordinaria para declarar la independencia e iniciar un proceso constituyente.
Puigdemont aseguró que “no somos delincuentes, locos, golpistas, aducidos, somos gente normal que pide poder votar y que ha estado dispuesta a todo el diálogo que fuera necesario para hacerlo de forma acordada”.
Afirmó: “no tenemos nada contra España y los españoles, al contrario queremos una buena relación, pero desde hace mucho ésta no funciona y nada se ha hecho para remediar algo insostenible. Un pueblo no puede ser forzado a aceptar algo que no tolera y no quiere”, después de años de lo que consideró agravios por parte de las autoridades españolas.
Recordó que durante mucho tiempo ha reclamado un referéndum acordado como el celebrado en Escocia pero se ha encontrado con “una negativa radical y absoluta” del gobierno español.
Entre los agravios mencionó lo que considera “menosprecio” a la lengua y la cultura catalanas, la falta de inversiones y la decisión del Tribunal Constitucional en 2010 de recortar el Estatut (norma básica en Cataluña) que había sido aprobado en consulta popular unos años antes.
Puigdemont aseguró también que Cataluña “es un asunto europeo” y se comprometió a “desescalar la tensión” generada por ese referéndum.