¿Calidad moral en el frente opositor?
Ramón Zurita Sahagún jueves 5, Oct 2017De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Son tres y se toman juntos, cuando menos por ahora.
Se muestran amalgamados, coinciden en todo, sus respuestas son a una sola voz, sin embargo todavía hay escépticos que dudan que esa unión fructifique en una alianza opositora.
Ricardo Anaya, presidente del PAN; Alejandra Barrales, presidenta del PRD y Dante Delgado, presidente del MC, enseñan su propósito común de ir juntos en la elección presidencial del 2018, para ganarla.
Sus palabras intentan ser convincentes, venden la idea de un bien común, el desarrollo del país y determinan que su principal propósito es el combate a la corrupción.
Claro que no descartan contender por una posición de elección popular, donde aliados los tres saben que aumentan sus posibilidades de triunfo.
Anaya es uno de los más sólidos aspirantes de la alianza opositora a la Presidencial de la República. Barrales es prospecto para el gobierno de la CDMX y Dante se conforma con el Senado o un cargo en el gabinete.
Lo curioso de esto es que los tres que quieren combatir la corrupción de los priístas y que no confían en el gobierno emanado de este partido para que maneje los recursos destinados a la reconstrucción en siete estados del país y ayuda a los damnificados, han enfrentado acusaciones de corrupción en diversas etapas de sus carreras políticas.
Cuando se escucha enfático a Ricardo Anaya atacar a los priístas por actos de corrupción, pareciera que se muerde la lengua, por las sospechas que existen sobre una eventual acumulación de riqueza.
El panista ha sido señalado en diversas ocasiones sobre un posible tema de corrupción y lo evade asegurando que se trata de obuses enviados por el gobierno, con los que intentan manchar su impoluta presencia.
Primero se mencionó su fortuna personal que equivaldría a una cifra cercana a los 100 millones de pesos que no justifica con sus cargos públicos, que van desde secretario particular del gobernador Francisco Garrido, en Querétaro, pasando por una breve estancia como subsecretario de Turismo del ramo federal, diputado federal y presidente del PAN.
Una carrera meteórica, donde la sagacidad del político quedó de manifiesto para comprar terrenos y locales comerciales que subieron de precio.
También fue cuestionado por sacar a su familia de México, enviarla a Estados Unidos y regresarla cuando su ambición por ser candidato presidencial lo hizo necesario.
En una segunda ocasión, se mostró la fortuna familiar, incluida la suya, la que rebasa los 300 millones de pesos y nuevamente argumentó que eran ataques desde el gobierno, para minar su fortaleza.
Anaya se negó a tener un debate sobre el tema con el dirigente nacional el PRI, Enrique Ochoa Reza.
Alejandra Barrales, dirigente nacional del PRD, fue estigmatizada por la compra de un departamento en Miami, el que no declaró entre sus posesiones. También lo fue por la compra de una avioneta y otros gastos, presuntamente, superfluos que ha realizado y que no son acordes con sus ingresos.
El departamento de la presidenta del PRD está valuado en un millón de dólares y aunque se afirmó que no fue incluido en su declaración patrimonial, fiscal y de intereses que los servidores públicos hacen suya, ella confirmó que si viene, lo que no dejan en claro de donde proviene su capacidad financiera.
La vivienda no es de compra atrasada, ya que fue realizada hace menos de dos años y se compró con la aportación de 700 mil dólares y cerca de 300 mil dólares en crédito. En 2005 adquirió la avioneta, cuando su carrera política despuntaba y había sido despedida del gobierno de Michoacán, donde no dio el ancho como parte del gabinete de Lázaro Cárdenas.
Dante Delgado es un caso interesante, ya que él si fue a la cárcel en 1996 y estuvo preso por quince meses, acusado de corrupción, enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad y peculado, aunque se consideró perseguido político.
Los supuestos actos delictivos fueron cometidos durante su ejercicio gubernamental que fue de cuatro años, en su calidad de gobernador interino y sustituto en Veracruz, cuando Fernando Gutiérrez Barrios fue designado secretario de Gobernación y le dejó como herencia el cargo a su entonces secretario de Gobierno.
En aquel entonces, el ingreso de Delgado a la cárcel fue considerado por él como una venganza del entonces secretario de Gobierno de la administración de Patricio Chirinos, el hoy gobernador Miguel Ángel Yunes, lo que desató una vieja rivalidad entre ambos.
Hoy de concretarse el frente opositor Dante y Yunes irán juntos y en apoyo de Miguel Ángel Yunes Márquez como candidato al gobierno del estado en 2018.
En el caso de los tres dirigentes nacionales de los partidos y cabezas visibles del frente opositor, los problemas enfrentados por sus eventuales asuntos ligados a actos de corrupción, pueden representar una pesada carga al enarbolar la bandera contra la corrupción y enfocar sus baterías contra el gobierno y los priístas.
Pugna gasera
Estalló la polémica entre los gaseros que importan el producto y los que reciben privilegios por parte de Pemex en la adquisición del energético.
Los que reciben descuentos millonarios venden el gas por encima de los precios de aquellos que tuvieron que destinar recursos para la instalación de terminales marítimas y de infraestructura, por lo que se demanda se ajusten los precios y se quiten beneficios.
Entre las empresas que son señaladas como beneficiarias se encuentran Nieto Gas, Gas Uribe, Soni Gas, Global Gas, Regio Gas, Gas Perla y Gas Azteca, entre otras.