A una semana del sismo
¬ Fernando Garcilita Herrera miércoles 27, Sep 2017Fernando Garcilita Herrera
Ayer se cumplió una semana del sismo de 7.1 grados que sacudió a la Ciudad de México, y que lo cambió todo.
La cifra final de muertos asciende a 333 en todos los estados que fueron afectados, los brigadistas que llegaron de Japón ya regresan a casa, y la ciudad trata de volver a la normalidad, a su propio paso, a su propio ritmo.
De algo estoy seguro, que somos otros a los que éramos, hace una semana, nos hicimos una sociedad más fuerte, la generación de los millenials derrumbó el mito de que era una generación apática y floja, a la hora de tomar decisiones, en una semana se logró que los partidos estén hablando de ceder el dinero que le da el Instituto Nacional Electoral para las campañas y para sus presupuestos, imagínese nada más, que esto haya pasado en una semana.
Este simple reclamo, de que los partidos políticos, siempre han vivido a expensas de los ciudadanos y nunca han hecho nada relevante con ese dinero, más que dejar las ciudades llenas de basura poselectoral y bardas pintadas, sea destinado, para una causa ajena a ellos, es algo asombroso.
Lo que sucedió hace una semana, fue una desgracia y una devastación que nos ha pegado a todos, pero ha abierto las puertas a una nueva forma de ejercer nuestros derechos como mexicanos, nos demostramos que unidos hacemos la fuerza, que los líderes del futuro no pueden estar solos y alejados de la gente, que tienen que ser más empáticos y estar en contacto con la realidad, del mexicano de a pie.
Incluso, nuestra imagen internacional que se había visto afectada por los comentarios del presidente de Estados Unidos, mejoró ante todo el mundo, pues las muestras de solidaridad y cooperación entre nosotros redefinió la imagen que se tiene de México, demostramos de lo que estamos hechos y el apoyo internacional llegó de todas partes del mundo.
En una semana logramos lo que no habíamos hecho en años, lo que no habían logrado las generaciones pasadas, somos más exigentes con el manejo de la información que nos da el gobierno, somos más puntuales a la hora de seguir lo que hacen las autoridades.
Este temblor nos sacudió a todos, para recordar “el olvidado asombro de estar vivos”, parafraseando al gran Octavio Paz.
Lo que hemos logrado, no debe de terminar, pues la vida nos enseñó que no estamos exentos de nada, aún escucho a las constructoras decir que la ciudad estaba lo suficientemente fuerte para aguantar los nuevos edificios, dejamos en el olvido lo que pasó en 1985, la dura y cruel casualidad de que haya sido el mismo día, pero 32 años después, es un llamado a estar atentos, a no dar por hecho las cosas, por ejemplo en colonias, como la Roma, Condesa, Del Valle, los vecinos se están organizando para que las nuevas construcciones no rebasen los cuatro pisos.
La gente ya recordó que las autoridades y los políticos están para servirnos y estamos más listos que nunca para no esperarlos y tomar la acción nosotros mismos.