“Frida Sofía” o el derecho a la verdad
¬ Fernando Garcilita Herrera lunes 25, Sep 2017Fernando Garcilita Herrera
De los rescates más comentados en los últimos días del terremoto que azotó a la Ciudad de México, el más sonado fue el de una niña, que se dijo había sido localizada entre los escombros del Colegio Rébsamen. Primero, la Secretaría de Marina dijo que habían escuchado a una niña que dijo su nombre, que luego movió los dedos y después, incluso, metieron una manguera para que la niña tomara agua. Después, en la noche, se dijo que esa información era falsa.
Lo que sucedió después, usted ya lo sabe, la sociedad civil desde las redes sociales descargó su ira por sentirse engañada y por saber que la presencia de los principales mandos de la Marina, estaban en ese colegio, enfocando sus esfuerzos y la tecnología de la que disponían, para encontrar a una niña, que no existía, dejando de lado el llamado de otros lugares, donde se necesitaba su presencia.
Es entendible que la información no fluya en momentos de crisis, como la de este tipo, pero lo que no se vale es la desinformación o la capacidad de aseverar que algo es cierto, para que luego te digan que es mentira.
Detrás de esto, opera algo mucho más profundo en la mente de todos los mexicanos, pues decir que “Frida Sofía” no existe, equivale al típico “usted disculpe”, cuando la policía acusa a un inocente que condenan, para luego decirle que se equivocaron, decir que “Frida Sofía” no existe, equivale a decir que no se pudo hacer nada para defender nuestra economía, pues no está en las manos del gobierno, decir que “Frida Sofía” no existe, equivale a todas las promesas de campaña que se le han hecho al pueblo de México, para luego decir que no se pudieron lograr.
Vamos a analizar de donde viene esto, México y su flujo de información, ha dependido por más de setenta años a una sola forma de gobierno, apenas y tocamos la libertad de expresión con la alternancia política que se dio en el año 2000, pero la verdadera democratización de los medios se dio hace no más de diez años con la llegada de las redes sociales.
Ahora, en los tiempos de Twitter y de Facebook, basta que el gobierno diga algo para que alguien que esté con un celular, en el lugar de los hechos, suba una foto para desmentirlos.
El reclamo sobre “Frida Sofía” viene de una larga tradición de engaños y abusos, que han hecho que la gente no pueda lograr confiar en su gobierno, y en un momento así, cuando nos hicimos uno, que el gobierno de nuevo, sin tener información veraz, nos diga algo que no es cierto, parece el colmo.
Lo que es cierto, es que después de los acontecimientos de estos días, el gobierno debe tener mucho cuidado en la forma de operar, pues la sociedad civil ha dado más resultados de organización y de comunicación, que ellos. Se pidió en redes sociales que no se divulgara información falsa y que toda información que dieran los ciudadanos, se subiera con el lugar donde se encontraba quién lo escribía y la hora, como candados de veracidad y la gente lo hizo.
Es admirable, lo que se ha logrado y nos queda esperar que esta unión civil, siga por mucho tiempo, pues va a cambiar la forma en la que las autoridades se comunican, en la forma en la que se organizan y trabajan.
Fue la gente quién logró que los partidos políticos, rompieran el silencio y salieran a decir que van a dar lo que se destinó a sus campañas, para todos los afectados, eso sí, cada uno a su modo, pero la gente, los arrinconó a que ahora sí, trabajen para nosotros.
Así como estamos tomando las ciudades afectadas, las colonias destruidas, vamos a tomar nuestro derecho a la información y el derecho a la verdad, que debe ser el cimiento de toda sociedad.