Atención sicológica a la población afectada por el sismo
Salud lunes 25, Sep 2017Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Los dos recientes terremotos se produjeron en la placa geológica de Cocos
Una Red Especializada de Atención Psicológica, coordinada por el Instituto Nacional de Psiquiatría, atiende a la población afectada por el sismo del pasado 19 de septiembre. Hasta el momento sólo en la Ciudad de México se han brindado más de 6 mil consultas en esta área médica.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Pablo Kuri Morales, informó lo anterior en conferencia de prensa, junto con la directora general de Instituto Nacional de Psiquiatría, María Elena Medina Mora; así como de la investigadora, Dení Álvarez Icaza, y la profesora titular del Curso de Especialización en Psiquiatría, doctora Martha Ontiveros.
En la capital trabajan brigadas integradas por especialistas del INP, quienes atienden 9 albergues, así como en los sitios donde hubo derrumbes de infraestructura, donde se ha atendido a quien perdió algún familiar, su hogar, igual que a brigadistas y voluntarios.
La Red está integrada por personal del Instituto de Psiquiatría de la Secretaría de Salud del ISSSTE, y de otras instituciones públicas y privadas, así como con la UNICEF, con la que se trabaja en la atención de la población infantil. La doctora María Elena Medina, destacó la importancia de las intervenciones psicológicas después de un evento de esta naturaleza, ya que estudios al respecto señalan que hasta 13% de la población puede tener implicaciones graves de tipo emocional.
Las afecciones dependerán de cómo se vivió este tipo de desastre, si nada más lo vivió, si participó en el rescate de víctimas o si perdió a un familiar, estas situaciones elevan hasta 2.3 veces el riesgo de sufrir estrés postraumático.
Es común que después de las 72 horas del evento empiecen a agudizarse la crisis emocional y el suicidio es otro de los temas que hay que poner atención. Por su parte Dení Álvarez Icaza, indicó que en el caso de los menores de edad se trabaja de manera coordinada con especialistas de la UNICEF, con quienes se han diseñado intervenciones a través de juegos, pláticas, talleres y obras de teatro, con el fin de que los pequeños asimilen y entiendan lo que pasó a su alrededor. Para apoyo psicológico llamar a 41 60 52 40 y 41 60 52 41, y el 01 800 6 11 44 88, para la población del interior del país.
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Los dos recientes terremotos ocurridos en México, el del 7 de septiembre, con epicentro frente a las costas de Chiapas, y el del 19 del mismo mes, cuyo epicentro se registró en los límites de estados de Puebla y Morelos, se produjeron en la placa geológica de Cocos, en el sitio donde comienza su caída bajo la placa norteamericana.
El Servicio Sismológico Nacional localizó el epicentro del segundo sismo a una profundidad de 57 kilómetros y a una distancia de 120 kilómetros de la Ciudad de México, de acuerdo con una nota publicada el 20 de septiembre en la revista británica Nature. Se menciona que, si bien los grandes terremotos pueden aumentar el riesgo a largo plazo de la actividad sísmica, transfiriendo el estrés dentro de la corteza terrestre a fallas geológicas adyacentes, todavía no se puede establecer si ambos sismos están vinculados.
Este tipo de transferencia de “estrés estático” suele ocurrir sólo en un radio de tres a cuatro veces la longitud de la ruptura de la falla original, declaró Gavin Hayes, sismólogo del Servicio Geológico de Estados Unidos.
En el texto escrito por Alexandra Witze, Hayes señala, además, que el terremoto del 7 de septiembre se dio a unos 100 kilómetros de profundidad, lo que ubica al sismo del 19 de septiembre, cuyo epicentro tuvo lugar a 650 kilómetros de distancia de Chiapas, fuera de la zona de influencia.
Otra posibilidad que se plantea es que el par de mortales terremotos de México es que el sismo del 19 de septiembre sea un ejemplo de “activación dinámica”, en el que las ondas sísmicas de ondulación hacia el exterior afectan a fallas sísmicas más rápido, y por lo tanto a más grandes distancias, que en la transferencia de tensión estática.
Sin embargo, esta activación dinámica suele ocurrir en cuestión de horas o días del terremoto inicial, por lo que la diferencia de 12 días entre los eventos del 7 septiembre y el 19 de septiembre es difícil de explicar, señaló Eric Fielding, geofísico del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) en Pasadena, California, que estudia el desencadenamiento dinámico.