Recuperar la fe
¬ Salvador Estrada martes 25, Jul 2017Folclor urbano
Salvador Estrada
El secretario de Gobernación pidió que se tenga fe en el caso de Javier Duarte, quien al ir a juicio solamente se le acusa de un robo de 38 millones de pesos
Claro que la fe es una virtud teologal que es un don de Dios y que cientos, miles, millones de ciudadanos ya la perdieron ante tantos actos fallidos y porque en muchos casos fueron defraudados o les vieron la cara.
Los partidos y los políticos han hecho promesas y en cada elección prometen y prometen y nunca cumplen.
Y los ciudadanos dejaron de creer. El gobierno federal, estatal o municipal no satisface sus necesidades y ya no saben “para dónde jalar”.
Y en el caso de la justicia en el juicio al ex gobernador, acusado de lavado de dinero y de delincuencia organizada, nada más de momento, no hay todavía castigo, sino que el juicio se irá a seis meses más ya para el 2018 se volverá al caso y se le demostrarán más pruebas por parte del agente del Ministerio Público para comprobar su culpabilidad en diversos delitos.
El desconocimiento de la ley ante el nuevo sistema de justicia oral, que no ha sido explicado a la ciudadanía, la confunde, y si está informado que Duarte robó al erario veracruzano miles de millones de pesos y sólo aparecen 38, los decepciona.
Simplemente, el secretario de Salud ha presentado 23 denuncias contra el ex gobernador por desviación de recursos por 650 millones de pesos.
Los ciudadanos veracruzanos esperan que lo juzguen y le den muchos años de cárcel y como todavía no ha llegado el momento, la gente cree que “ya hubo un arreglo” y que después de un tiempo corto, un año o dos, salga libre y sin decomisarle el dineral que se llevó, lo disfrute a sus anchas.
Como todos quieren un proceso rápido, el nuevo sistema de justicia penal lleva su tiempo.
El secretario de Gobernación, por esa razón, pidió que se tenga fe en la justicia.
Desafortunadamente, la credibilidad ya se ausentó de los ciudadanos y por tantos actos fallidos ya no saben en qué o en quién creer. Y se han quedado sin fe.
Dice el sabio refrán que la esperanza muere al último y aunque todavía muchos ciudadanos aún la conservan y se aferran a ella para seguir creyendo y no perder la fe, ésta languidece al paso de los días.
En el futbol también los aficionados han perdido la fe y han dejado de creer ante los resultados de la selección, a quien elogian los comentaristas y a la hora decisiva ¡pierde! Los fanáticos pierden la fe y vuelven a la frase “jugaron como nunca y perdieron como siempre”.
Los aficionados están decepcionados y piden la cabeza del entrenador, que en cada partido cambiaba el cuadro de jugadores, sin tener uno de base, porque los tricolores no lograron pasar a la final de la Copa de Oro.
La verdad nos hará libres y ha llegado la hora de decir la verdad y acabar con la mentira y las falsas expectativas y ya no engañar, a fin de recuperar la fe perdida y con ello fortalecer la esperanza y confiar en la ley y la justicia y, sobre todo, ¡en la selección nacional de futbol!