Un presupuesto ad hoc
Luis Muñoz lunes 8, Nov 2010Segunda vuelta
Luis Muñoz
La aseveración que hizo hace unos días el dirigente estatal del PRI, Ricardo Aguilar Castillo, en el sentido de que el próximo presupuesto que apruebe su partido “deberá ser popular y con un claro sentido de justicia social”, se entiende cuando lo que se requiere en estos momentos es un presupuesto que sea bueno para México.
No debemos perder de vista su importancia, porque tiene que ver con lo que el gobierno federal gasta en escuelas, hospitales, carreteras, así como en salarios de policías, funcionarios, jueces, legisladores y enfermeras, por citar algunos casos.
En opinión del dirigente priísta “es la justicia social la que impedirá la reducción que, desorientado, el presidente Felipe Calderón pretende en los rubros de infraestructura hidráulica, programas sociales y políticas destinadas al campo”.
Para comprender mejor la importancia del presupuesto, no está de más tomar en consideración lo que María Amparo Casar Pérez y Fausto Hernández Trillo señalan en el documento de su autoría: Programa del Presupuesto y Gasto Público.
“El presupuesto para cualquier persona, empresa o gobierno, es un plan de acción de gasto para un período futuro, generalmente un año, a partir de los ingresos disponibles”.
Pero hay que destacar que el presupuesto tiene efectos en la economía nacional, ya que puede afectar el nivel de empleo, la tasa de inflación y por ende el crecimiento; un presupuesto mal hecho, donde el gobierno gaste por encima de sus ingresos, puede provocar inflación y castigar el poder adquisitivo. En esas condiciones, el crédito se encarece al tiempo que la inversión y el producto bajan.
Hay quienes creen que por no trabajar en el sector público no pasa nada. Pero no es así. Pongamos por caso: Si hay inseguridad pública por falta de recursos, la inversión que estaba a punto de realizarse podría cancelarse y no generar las fuentes de trabajo ya contempladas.
En el presupuesto se estipula el financiamiento de los servicios públicos a los que tenemos acceso como la luz, educación, servicios médicos, seguridad pública y procuración de justicia, entre otras; la calidad y cantidad con que se ofrecen estos servicios afectan a la población de manera cotidiana.
Pero ¿de dónde viene el dinero del gobierno?
Es obvio que para gastar se requiere de fondos.
El dinero de cualquier gobierno proviene de los ciudadanos a través del pago de impuestos y de los productos y servicios que les vende…
La forma de recolectar impuestos es diferente en cada país y va cambiando con el tiempo, pero por lo general la estructura tributaria afecta el nivel de ingresos de las personas.
En México las dos principales fuentes tributarias son:
-El impuesto sobre la renta (ISR), que es el impuesto que pagan tanto las empresas como las personas por concepto de ingresos, y
-El impuesto al valor agregado (IVA), que es el que se paga cada vez que se compra algún producto (con excepciones como los alimentos procesados, las medicinas y la educación) y grava todo el valor que se le agrega a una mercancía en su proceso de producción.
Del total de los ingresos por concepto de impuestos, el 80% proviene de la recaudación del IVA y el ISR.
Pero el gobierno también obtiene recursos mediante los bienes y servicios que genera. La principal fuente no tributaria proviene de las ventas del petróleo y una buena parte por los derechos, como la tarifa (o peaje) que se paga por el uso de carreteras, o los permisos que se adquieren por alguna concesión.
¿La sociedad tiene derecho a exigir que el dinero se gaste bien?
Desde luego que sí, dado que los recursos provienen de la sociedad. Si el petróleo es nuestro patrimonio, se tiene todo el derecho de poder exigir que el dinero público se distribuya y gaste bien. Para saber cómo se gasta ese dinero hay que analizar el presupuesto de egresos.
En el mismo sentido, el diputado priísta Luis Videgaray dijo que el Congreso federal “corregiría” el presupuesto federal para el 2011 porque el compromiso es que el dinero se aplique “en lo que quiere la gente y no en lo que quiera la burocracia de la Secretaría de Hacienda”.
La gente, añadió, quiere que se apliquen recursos y haya más inversiones en servicios como agua potable, educación, seguridad pública y no en gasto burocrático como lo propuso el Gobierno federal.
Videgaray explicó que las necesidades de gasto adicionales que recibió la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados para la discusión del paquete presupuestal 2011 contabilizaron 731 mil millones de pesos.
Y añadió que los recursos solicitados representan tres veces y medio el proyecto de gasto del ramo de Educación Pública, donde el Poder Ejecutivo programó 218 mil 825 millones de pesos. Precisó que las mayores demandas de ampliación corresponden al ramo carretero donde se contabilizaron 49 mil 200 millones de pesos.
“La demanda de propuestas de ampliación presupuestal por parte de municipios, estados y de los propios legisladores, uno de cada tres pesos corresponden al ramo carretero”, mencionó el diputado del PRI.
El sector carretero fue castigado en el proyecto presidencial con 20% de gasto, dijo Videgaray.
Luego de concluído el proceso de entrega de solicitudes de ampliación de gasto, donde se recibieron 21 mil 825 demandas de gobernadores, presidentes municipales e instituciones civiles, los gobiernos de 30 entidades federativas presentaron una demanda de recursos de 425 mil millones de pesos en programas y proyectos de inversión.
Esos recursos son casi ocho veces mayores a los 57 mil millones de pesos que se obtuvieron de las modificaciones a la Ley de Ingresos de la Federación y los Criterios Generales de Política Económica para 2011.
Por su parte, el secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, confiaba en que los legisladores privilegiarían el diálogo, el acuerdo y la discusión para sacar adelante no sólo el paquete económico, el presupuesto, sino otros instrumentos como las leyes en materia de Seguridad y de Policía de Mando Único”, aunque pidió no adelantarse a los hechos porque aún la propuesta se encuentra en fase de discusión.
PRESUPUESTO DEL DF
Ya que hablamos de presupuesto, la diputada local Alicia Téllez Sánchez, comentó que ante la urgente necesidad de rescatar los 318 mercados públicos que existen en la capital del país, es necesario asignar, mediante su etiquetación en el Presupuesto de Egresos del DF para el Ejercicio Fiscal 2011, recursos públicos por 411 millones, 600 mil pesos, bajo el rubro de construcción, conservación, mantenimiento, modernización, abasto y comercialización de los mismos.
Explicó que cada demarcación tendrá una cantidad específica, según el número de centros de abasto que tenga en su territorio, pero que ahora sí deberán aplicarse los recursos “única y exclusivamente para este tenor”, lo que deberá quedar plasmado en el Presupuesto de Egresos del año próximo y que los recursos económicos que se asignen sean ocupados en su totalidad, evitando el subejercicio o desvío de los recursos en otras áreas o actividades.
Téllez Sánchez expuso que según datos otorgados por la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal, en el rubro relativo al presupuesto asignado para mantenimiento y conservación de los mercados públicos en las 16 Delegaciones, se ha hecho caso omiso en aplicar correctamente esas asignaciones, en donde hasta el mes de junio de este año, solo existía un avance del 13.8% del presupuesto ejercido de los 292 millones 589 mil 704 pesos, que se establecieron para las 16 Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal durante el ejercicio presupuestal 2010.
La legisladora priísta recordó que los mercados públicos fueron construidos en su gran mayoría en la década de los 50’s, y que con el paso del tiempo y el abandono administrativo del que han sido objeto por parte de los diversos actores gubernamentales, se ha provocado un daño estructural y un detrimento en su imagen urbana plenamente notorio, independientemente de que pudieran resultar un riesgo para la gente que acude a ellos.
En su opinión, consideró que la ALDF debe coadyuvar con propuestas adecuadas que tengan como objetivo el rescate, modernización y mantenimiento de los mercados públicos en el Distrito Federal, además de promover políticas públicas destinadas a una correcta aplicación de recursos presupuestales para cubrir las necesidades de los mercados y sus locatarios, así como para adaptarlos a una nueva realidad social, misma que exige elevar los servicios en beneficio de la ciudadanía del DF.
PRI, PARTIDO INCLUYENTE
A la sociedad no le debe quedar la menor duda de que la unidad del PRI se funda en la inclusión de toda la clase política y en el reconocimiento a la importancia de cada uno de los cuadros militantes, sin exclusión de ninguna especie.
En Pahuca, Hidalgo, el dirigente estatal del tricolor, Ricardo Aguilar Castillo, sostuvo que el crecimiento político del partido ha sido, en buena medida, gracias al carácter incluyente que le ha aportado el liderazgo político del gobernador Enrique Peña Nieto.
Siguiendo la línea política del gobernador, el PRI en el Estado de México está renovando los 125 comités municipales e igual número de consejos políticos municipales, que serán las instancias claves para darle movilidad territorial al priísmo a lo largo y a lo ancho d el territorio mexiquense.
UN BICENTENARIO DE POLÍTICA FISCAL
Agradecemos al grupo Región Carbonífera la invitación que nos hace para asistir a la conferencia: “Un bicentenario de política fiscal en México” que dicatará el licenciado Gildardo López Tijerina el 11 de este mes a las 19:00 horas en la Casa de Coahuila, de la colonia San Diego Churubusco.