Canibalismo político
Alberto Vieyra G. viernes 7, Jul 2017De pe a pa
Alberto Vieyra G.
México está patas pa’ arriba. Los gobernantes de la ponzoñosa partidocracia han carecido de ingenio y ciencia política, para poner orden en la nación azteca que se desangra y atraviesa por graves momentos de malformaciones sociales.
En medio de este caótico escenario, los mexicanos nos encaminamos a un nuevo proceso electoral federal para 2018, que ya se vislumbra de auténtico canibalismo político, una guerra de exterminio entre los politicastros que van en pos del poder.
PAN y PRD se preparan en prostituta alianza, como lo han hecho en varias entidades del país, para echar al PRI de Palacio Nacional al precio que sea.
Por su parte, el PRI , además de sus aliados, así como PAN y PRD, afilan los cuchillos para degollar a Andrés Manuel López Obrador y evitar a toda costa que el populista, que no popular, disque luchador social, gane la silla presidencial en el 2018.
PRI, PAN, PRD y compañía asustan al electorado mexicano con el petate del muerto del chavismo populista en Venezuela.
Sí, están a favor del imperio capitalista del mal, y a toda costa buscan evitar que la mal llamada izquierda, comunismo o socialismo, llegue al poder. Jamás nos dirán que “El Peje” es otro mercenario más del poder al servicio de los grandes poderes fácticos y monopólicos de Televisa y el poderoso grupo de Carlos Slim. Estamos ante un priísta de corte social demócrata.
Sí, estamos ante una guerra de exterminio, un peligroso canibalismo político que confundirá y desgastará emocionalmente a los mexicanos.
Por desgracia, no vemos en la ponzoñosa partidocracia la menor intención de proponer, como bien lo han dicho algunos analistas y observadores políticos nacionales e internacionales, entre ellos, Antonio Navalón, sugiriendo que haya un frente amplio o una alianza civilizada que no proponga el exterminio político, sino arreglar, y de raíz, los lacerantes problemas por los que atraviesa la patria mexicana, como es la macabra y galopante inseguridad, las desapariciones forzosas, las fosas comunes, la corrupción, la impunidad, la catástrofe educativa nacional, los feminicidios, los asesinatos contra periodistas, la voracidad de hambreadores contra el pueblo, y un larguísimo etcétera.
¡Ahh!, pero en medio de esa nauseabunda guerra de exterminio partidista, se atraviesa la renegociación del Tratado de Libre Comercio con Norteamérica.
¡Hay prisa! Los que se van tienen prisa por hacer las cosas con los pies, así tengan que empinar a México con tal de halagar a la gringa bestia trumpiana, para que el PRI permanezca los próximos 6 años en el poder, y los que llegan saben que el TLC es una papa caliente que representa la sumisión de México al vecino del norte.
¿Verdad que México está patas pa’ arriba y no se ve quién quiera poner orden, y en cambio, se apuesta al canibalismo político que traerá exterminio?