Mala fama universitaria
Alberto Vieyra G. jueves 15, Jun 2017De pe a pa
Alberto Vieyra G.
La mayoría de las universidades públicas del país, con algunas honrosas excepciones, arrastran una mala fama que incide en el desastre educativo que vive la patria mexicana.
En muy pocas universidades públicas, los universitarios saben escribir correctamente. Del desastre educativo nacional no es ajeno el desastre ortográfico.
Por si esto fuera poco, las universidades públicas de México no están exentas de grupos porriles y rectores al servicio de los gobernadores, sean del color o sabor que sean.
En pleno proceso electoral, Alfredo Barrera Baca se convirtió en el nuevo rector de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) en sustitución de Jorge Olvera
Alfredo Barrera Baca es licenciado en Psicología por la UAEM y doctor en Filosofía y Ciencias de la Educación, por la Universidad de Barcelona, España. Su preparación académica es envidiable. No conozco su programa educativo para su gestión 2017-2021, pero no hace falta, porque a la UAEM lo que hay que cambiarle es su mala fama como apéndice del gobierno y al servicio del PRI, como quedó al descubierto con Eduardo Gasca Pliego, quien como rector sirvió al PRI en elecciones en Tabasco y otras entidades del país.
Pero además, la Universidad Autónoma del Estado de México es una de las instituciones con gran número de investigadores, que no investigan ¿O sus investigaciones dormirán el sueño de los justos, con excepción de aquella que en materia de feminicidios en el Estado de México dio a conocer uno de esos investigadores?
Veo que en el equipo del nuevo rector de la UAEM, hay una coordinadora que bien podría ser descoordinadora de cuestiones de tesis, pues en lugar de estimular a que los alumnos presenten sus trabajos para titularse, lo único que hace es desanimarlos, darles largas y largas, como ocurre en muchas otras instituciones donde miles de estudiantes no se titulan por falta de asesoría y los monumentales costos para obtener un título.
Por cierto, en esa universidad, hay algunos que coordinan mediante favores sexuales a las universitarias.
Alfredo Barrera Baca tendrá que quitarle también la mala fama a esa universidad, que últimamente ha sido escenario de lamentables incursiones de delincuentes encapuchados a instalaciones universitarias.
Todo eso y más deberá desterrar de la máxima casa de estudios. Por lo pronto, ya tiene un avance a su favor, pues el área de Comunicación Social de la Universidad, ya no estará en manos de otro mapache al servicio del PRI, como lo fue Juan Portilla, quien utilizando todo el poder de la institución, vetó en esa máxima casa de estudios el portal electrónico de la Agencia Mexicana de Noticias (AMN) e hizo que a este átomo de la comunicación se le cancelara definitivamente el programa radiofónico que se difundía los sábados en Radio Capital, y en el que se exhibiría a un médico ginecólogo que abusaba flagrantemente de las mujeres mexiquenses que solicitaban sus servicios en la UAEM.
Ya veremos si saben hilar fino las nuevas autoridades de la Universidad Autónoma del Estado de México.