Vancouver, una ciudad ejemplar
¬ José Antonio López Sosa lunes 15, May 2017Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Voncouver, Canadá.- Cada que por motivos periodísticos hemos pasado por Vancouver, es inevitable hablar una y otra vez del ejemplo urbanístico que representa, no sólo para nuestro continente sino para el mundo entero.
Esta urbe es prueba que sí se puede combinar el progreso comercial, turístico e industrial con sustentabilidad, con sólidos programas de asistencia y con un férreo tejido social que ha disminuido sustancialmente los niveles delincuenciales de la que alguna vez fue una de las ciudades más violentas en América del Norte.
El centro de Vancouver desde el aire parece un gran jardín en niveles, cada vez son más los edificios y rascacielos que tienen huertos urbanos y jardines en sus azoteas, los ciudadanos son conscientes de la susutenabilidad no sólo por las sanciones que significan contaminar, sino por el mensaje claro que este lugar no es sólo para quien lo habita ahora, sino para las generaciones venideras.
Turísticamente, Vancouver se renueva constantemente, estuvimos en uno de los mejores hoteles de la ciudad, The Westin Bayshore, ubicado justo a medio camino entre el Parque Stanley y el Centro de Convenciones, con salida directa al malecón y una de las mejores vistas de la bahía y la ciudad.
La calidad de vida en Vancouver es sorprendente, muy lejos de cualquier ciudad en los Estados Unidos, donde se supone que la calidad de vida es de altos estándares.
La conectividad entre la Ciudad de México y Vancouver es muy buena, Aeroméxico opera dos vuelos diarios (en equipos Boeing 737) y Air Canada uno diario (en un equipo más pequeño, un Airbus A319), teniendo así distintas opciones. También muchas veces —para quienes tienen visa estadounidense— resulta más económico volar a Seattle, con cualquiera de las aerolíneas de la Unión Americana (con escala en sus distintos centros de distribución) y luego tomar el tren, automóvil, autobús o transbordador hasta Vancouver.
En verano e invierno el mercado turístico mexicano centra su atención en Whistler, al norte de Vancouver, sin embargo, esta ciudad más allá de ser de paso para un viaje a las montañas, es un destino que vale la pena explorar a pie o en bicicleta. No hay tiempo que alcance para descubrir todos sus rincones y las innumerables experiencias que regala al visitante.
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