Cae pez chico
¬ Augusto Corro martes 9, May 2017Punto por punto
Augusto Corro
La supuesta persecución contra el ex gobernador de Chihuahua, César Duarte, no rinde los frutos esperados.
Todo mundo dice que se esconde en una ciudad de Estados Unidos (EU) y nada más.
Ante la imposibilidad de arrestarlo y traerlo a México, las autoridades se conforman con detener a sus colaboradores cercanos.
De esta manera fue detenido Antonio Enrique Tarín García, funcionario importante en el gabinete de Duarte Jáquez, acusado del desvío de 246 millones de pesos.
Una cantidad de dinero pequeña, si se compara con los miles de millones de pesos que dicen se llevó el ex mandatario, que terminó su sexenio como socio del Banco Chihuahua Progreso.
Tarín García fue aprehendido en la Ciudad de México el fin de semana y trasladado a la mencionada entidad.
Días antes protagonizó un espectáculo deplorable en San Lázaro. Quiso aprovechar la muerte del diputado titular, Carlos Hermosillo Arteaga, para ocupar su curul y así evadir la acción de la justicia.
Sin la oportunidad de conseguir el fuero, fue inevitable su detención. Un pez chico que poco ayudará a cumplir las promesas de campaña del ahora gobernador, Javier Corral, de extracción panista. El funcionario ofreció encarcelar a Duarte si llegaba al poder. El tiempo avanza y Duarte sigue libre. Son los funcionarios segundones los detenidos, los encargados de pagar los platos rotos.
CALDERÓN Y EL PERFIL BAJO
Le fue muy mal al ex presidente Felipe Calderón en la última reunión panista. Se enfrentó a uno de los militantes más formales y distinguidos de Acción Nacional: Juan José Rodríguez Pratts.
El blanquiazul le criticó al ex mandatario el empeño de que su esposa, Margarita Zavala, sea la candidata presidencial en el 2018.
El alegato molestó a Calderón y como es de mecha corta, irreflexivo, amenazó con dejar Acción Nacional.
El video de la discusión llegó a las redes y las críticas fueron negativas contra el michoacano. ¿Esto lo llevó a disminuir su activismo político?
Es posible, porque en los últimos meses tuiteaba cuanto asunto importante se presentaba como noticia. Inclusive se comentó que su presencia exagerada en las redes afectaba la imagen de Margarita. La ex primera dama se encuentra en plena campaña política y no son pocos sus asesores que buscan alejar a Calderón de la lucha política de su esposa. El ex mandatario trae una cola muy larga que viene desde su sexenio, en el que se marcó la guerra fallida contra la delincuencia organizada, que nadie olvida.
NO ENTIENDEN LOS PRIÍSTAS
El ex gobernador Mario Marín Torres, “mi góber precioso” dejó una imagen deplorable para los priístas en Puebla.
Ahora, ese tricolor se prepara para regresar a los boletas electorales el próximo año. ¿Candidato al Congreso? Pues sí. No sería el primer priísta con un pasado turbio, por decir lo menos, que regresaría a la contienda electoral, en un partido que no tiene registro de los delincuentes que, amparados en sus siglas, cometen un sinnúmero de fechorías.
El ex mandatario poblano logró superar la acción de la justicia, a pesar de los señalamientos de enriquecimiento inexplicable. Ahora, sin que nadie lo moleste se dedica a supervisar sus negocios de renta de helicópteros. Vaya.
“Mi góber precioso” saltó al escenario nacional tras sus arbitrarias órdenes para detener a la escritora y periodista Lydia Cacho en Cancún y traerla a Puebla para encarcelarla y torturarla. Esa acción criminal contra la escritora y periodista obedeció a la publicación de su libro “Los demonios del edén”, donde aparecen los nombres de empresarios y políticos mexicanos involucrados en una red de pornografía infantil.
Mario Marín es uno de los priístas más desprestigiados en los últimos años. Su regreso a la política no ayudará a su partido.
TEXAS, INFLEXIBLE
Las autoridades texanas continuarán su dureza contra los inmigrantes. Los policías tendrán, a partir del próximo 1 de septiembre, el permiso de investigar a cuanto indocumentado encuentren en las calles, apoyados en la norma conocida como “enséñame los papeles”.
Además, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, ratificó el proyecto de ley estatal que prohíbe “las ciudades santuario”, que no están de acuerdo con la deportación de personas ilegales.
En este renglón los sheriffs texanos que no cooperen con la “migra” podrían ser encarcelados.