Javier Duarte cruzó el “pasillo de la vergüenza”
Seguridad jueves 20, Abr 2017- Guatemala abre proceso formal
La justicia de Guatemala abrió ayer proceso formal contra el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, quien quedó arrestado de manera oficial con fines de extradición, informaron fuentes judiciales.
En su primera audiencia tras ser detenido el pasado sábado, Duarte se reservó el derecho a aceptar o rechazar su extradición a México y dijo que esperará hasta que llegue la solicitud formal de la justicia mexicana.
“En este momento no puedo allanarme (para ser extraditado) hasta que llegue la solicitud formal de extradición y sea evaluada por mi defensoría”, declaró Duarte ante el panel de tres jueces.
Antes, el tribunal presidido por el juez Adán García confirmó la identidad de Duarte y le dio a conocer sus derechos, así como los motivos por los que fue detenido.
La audiencia comenzó a la hora prevista, 13:30 horas locales (19:30 GMT) y Duarte compareció en una abarrotadata Sala de Vistas, ubicada en el piso 11 de la Torre de Tribunales de la capital guatemalteca.
La sesión estuvo presidida por el juez García, acompañado en el panel por las magistradas Bélgica Anabel Aldana y Sonia Nineth Montenegro.
El juez García dijo que las autoridades guatemaltecas concedieron la orden de captura con fines de extradición, y que Duarte es acusado de los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
El político mexicano, quien está acusado de malversación de miles de millones de pesos, fue detenido el pasado 15 de abril en un hotel del municipio de Panajachel, departamento occidental de Sololá.
Cruzó “el pasillo de la vergüenza”
Antes de entrar al tribunal y a la vista de los medios de comunicación, Duarte de Ochoa recorrió un pasillo esposado y custodiado por guardias. Al final se le hizo un cateo para ver si no llevaba algún arma ilegal o alguna sustancia ilícita.
Momentos antes de su audiencia, el ex gobernador tuvo que pasar por celdas donde hay delincuentes comunes, algo que seguramente no esperaba.
Y es que la tradición de la justicia guatemalteca obliga a que los sujetos señalados por corrupción en Guatemala tengan que pasar por lo que algunos llaman el “pasillo de la vergüenza”.