Persiguen a César Duarte
¬ Augusto Corro lunes 3, Abr 2017Punto por punto
Augusto Corro
Ante tanta demanda… | Luis Xavier
La semana pasada se inició la persecución contra César Duarte, ex gobernador de Chihuahua, del PRI, por su probable responsabilidad en el delito de peculado.
Se trata de una historia del saqueo a los recursos públicos anunciada años atrás ante la ceguera de las autoridades que nada hicieron por evitarlo.
Ahora, con la llegada del nuevo mandatario, Javier Corral, del PAN, se intensificó la lucha por llevar a César Duarte ante la justicia. Sólo falta localizarlo.
El caso del chihuahuense es similar al registrado en Veracruz, con el mandatario Javier Duarte.
Ambas situaciones se iniciaron con las fugas de los presuntos delincuentes y luego su localización encargada a la Organización Policial Internacional (Interpol).
Mientras se les encuentra, las autoridades realizan cateos en sus múltiples casas para rescatar algo de lo robado, como dinero en efectivo y obras de arte.
La semana pasada la Interpol publicó la ficha de la búsqueda del ex gobernador solicitada por la Procuraduría General de la República (PGR). Esa policía tiene representación en 190 países.
A Javier Duarte empezaron a buscarlo hace cinco meses y no lo encuentran. Se esfumó o se lo tragó la tierra. ¿Ocurrirá lo mismo con César Duarte? Es posible, aunque en las redes circulan sus fotografías que lo ubican en alguna ciudad fronteriza de Estados Unidos (EU).
Cabe señalar que como el hilo se revienta por lo más delgado, en los dos asuntos de los mandatarios perseguidos, quienes se encuentran en la cárcel, acusados del delito de peculado, son algunos funcionarios segundones que no tuvieron tiempo de escapar.
¿Y LA POPULARIDAD DE TRUMP?
Un tipo déspota y pagado de sí mismo difícilmente podrá caerle bien a la gente. Nos referimos al cavernario Donald Trump, que ya tiene el poder en sus manos, pero no sabe qué hacer con él.
Le quedó muy grande ese cargo de presidente del país más poderoso del mundo. En lugar de proyectar una imagen positiva de su persona, lo único que logró desde su llegada a la Casa Blanca, es vivir conflicto tras conflicto.
Sus decretos ejecutivos no se acatan, la inconformidad de los estadounidenses crece y los conflictos con Rusia son de impredecibles y de los cuales no saldrá bien librado el republicano, pues el espionaje ruso amenaza con convertirse en un problema internacional.
Recientemente los republicanos se negaron a apoyar una reforma sanitaria que reemplazaría el Obamacare, el plan de salud de su predecesor. En la deportación masiva de indocumentados, tampoco le va bien. Las injusticias y las persecuciones de personas sin papales reciben críticas todos los días. Un sinnúmero de autoridades rechazan la política migratoria de Trump.
La construcción del muro fronterizo también se suma a los obstáculos del gobierno trumpista. En primer lugar EU no cuenta con el dinero suficiente para realizar la obra.
Además, conforme avance el proyecto se multiplicarán los problemas legales que tendrá que resolver, pues los propietarios de los terrenos donde pase la barda no aceptarán la división y solicitarán la intervención de las autoridades, a través de amparos, etc.
Todos los errores del troglodita Trump lo colocaron, la semana pasada, como el presidente estadounidense con la imagen más negativa de la historia reciente de aquel país, con un 35 por ciento. Durante su primer año de gobierno, Barack Obama y Ronald Reagan tuvieron una aprobación mínima de 49 por ciento; Jimmy Carter y los dos George Bush, padre e hijo, se mantuvieron por encima del 51 por ciento, según datos de la encuestadora Gallup.
BARRALES ¿DESESPERADA?
Todo mundo sabe que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) pasa sus peores momentos y ante esa situación, su dirigente nacional, Alejandra Barrales, trata de encontrar el camino de salvación para ella misma y su organización política.
En el seno de esa institución política se aceleró el divisionismo, pues legisladores y dirigentes decidieron abandonarla para buscar nuevos derroteros. El último escándalo estuvo protagonizado por el coordinador de los senadores del sol azteca, Miguel Barbosa, que manifestó su apoyo a otro partido.
Posteriormente, la presidenta nacional perredista, Alejandra Barrales, estuvo sometida al escrutinio público, debido a que tiene en Miami un departamento con un valor superior al millón de dólares, que no habla bien de su “línea izquierdista”.
El próximo sábado 8, los perredistas capitalinos se reunirán en el Zócalo capitalino, con el propósito de demostrar que el sol azteca tiene fuerza, principalmente en materia de “acarreados”, que, sin duda, llenarán la plaza.
