Focos rojos con Delfina Gómez
¬ Mario San Martí viernes 17, Mar 2017Consensos y disensos
Mario San Martí
- Del Mazo, Josefina y Zepeda, el debate que viene
- Desempeño personal de los candidatos, la diferencia entre ganar o perder
Con la definición de Juan Zepeda como candidato que abanderará la causa del Partido de la Revolución Democrática (PRD) rumbo a la gubernatura del Estado de México, podría decirse que la baraja de competidores está completa, los cuatro partidos más fuertes a nivel local y nacional están representados, de entre dos mujeres y dos hombres tocará a los mexiquenses decidir quién de ellos es el elegido y el que gane no necesariamente tendrá que ser el mejor.
Aunque las encuestas hoy favorecen al competidor del PRI, Alfredo del Mazo Maza, los estudios de opinión no descartan una sorpresa en las personas de Josefina Vázquez Mota, de Acción Nacional, o de Delfina Gómez, del Movimiento de Regeneración Nacional, pues las estadísticas reflejan una competencia muy cerrada y la diferencia entre ganar o perder estaría en las cualidades personales de cada uno de los contendientes.
En el papel, la participación del abanderado del sol azteca tiende más a ser una campaña de tramite o testimonial por la crisis interna que vive su partido y la tardanza con que se suma a la competencia, donde según parece lo principal para ellos sería no perder el registro a nivel local.
Pero aunque se rumora que Zepeda podría declinar a favor de alguna de las candidatas, lo que sin duda abonaría a un mayor descrédito del PRD, no hay que olvidar que a su favor tiene un perfil de luchador social y parlamentario, lo que de entrada le da altos dividendos políticos y de alguna manera esas características contribuirían a levantar la desdibujada ideología de su partido.
De entre las dos candidatas y los dos abanderados, el nombre de Delfina parece ser el más vulnerable, aunque las estadísticas vaticinen que es la candidata a vencer por representar a un partido que a poco tiempo de haber nacido en el terreno político sus bonos han crecido entre el electorado nacional pero eso, en gran parte, se debe por las simpatías que tiene su líder nacional, Andrés Manuel López Obrador.
Evaluados uno a uno, de los cuatro nombres el de Delfina Gómez luce como el rival más débil y eso ha quedado evidenciado en las pocas entrevistas que ha otorgado a medios o en algunas reuniones donde se ha presentado. Cuando sale acompañada de AMLO sus eventos lucen vistosos y de impacto mediático, pero sin la presencia de su líder ella es tal como sería si los votos la llegaran a favorecer: dispersa, sin carisma y sin tablas para conducir un gobierno.
Como maestra que es, Delfina sabe que en más de una ocasión la gente que se ha acercado a ella la ha evaluado en sentido negativo, y la reprueban porque muestra desconocimiento de la problemática local; sus respuestas son titubeantes, lo que de alguna manera la describe como una mujer insegura que poco o nada hace sin el consentimiento de su líder, situación que a nadie que se jacte de ser candidato le ayuda y con esas deficiencias las probabilidades de que gane disminuyen.
Todavía no arrancan formalmente las campañas políticas, pero el desempeño mostrado por la representante de Morena no es el óptimo y si alguna alerta ven sus seguidores es precisamente a la hora de que Delfina se pone frente a un micrófono.
Sus discursos carecen de fuerza; su dicción es muy mala; con frecuencia pierde el hilo conductor en los temas que toca, y si esas debilidades de candidata no mejoran en tiempo de campaña poco podrá hacer en algún encuentro de contraste de ideas con el resto de los candidatos y la otra candidata.
Josefina Vázquez Mota ha sido legisladora y trae un alto perfil como oradora ya que fue candidata a la presidencia de la república en la elección de 2012 y si algo tiene en su contra es que no conoce la problemática local, es avecindada del Estado de México y la entidad que pretende gobernar la conoce solo de noche.
Aun así, sus recursos oratorios, analítica y ejecutiva le darán puntos positivos a la hora de debatir con sus oponentes.
Alfredo Del Mazo, además de favorito en las encuestas, es un político que vive y conoce la entidad que pretende gobernar, ha ganado elecciones por la vía del voto directo y su perfil parlamentario lo hacen aparecer como el candidato más completo en todos los sentidos de la palabra, y el conocimiento de administración pública, su experiencia política y sentido de responsabilidad en la toma de decisiones sumarán votos y adhesiones en su proyecto.
A menos que nos equivoquemos en esta percepción y valoraciones a dos semanas de que inicien las campañas, se duda mucho que las debilidades de Delfina puedan tener una corrección o mejoría de aquí a la celebración de los debates que para el caso deben existir bajo la regulación de las autoridades electorales, y eso lo saben el equipo que la acompaña, por eso tienen encendidos los focos rojos. Eso se dice.