Economía de guerra • II
Alberto Vieyra G. jueves 2, Mar 2017De pe a pa
Alberto Vieyra G
Y decíamos ayer que las guerras y la economía robusta son los dos grandes ejes que alimentan el nacionalismo de los norteamericanos.
La economía de guerra, enarbolada por Donald Trump, es el único gran pilar que lo mantiene vivo, porque el resto de su retórica incendiaria contra el mundo, principalmente contra México, lo único que le ha acarreado es odio e impopularidad.
La economía de guerra les viene como anillo al dedo a las fábricas de armamento, incluyendo las que son propiedad del Vaticano y a todos los contrabandistas, y en general a los llamados inversores o especuladores, que esperan ganar millones de dólares con la industria bélica, de la que no escapan las poderosas compañías aseguradoras, que concentran el 38% del producto interno bruto mundial.
Pero, ¿de dónde le viene lo macabro y bélico a “La Bestia Trumpiana”?
¿Qué tan grande es el poderío nuclear de Estados Unidos y por qué esa bestia quiere más poder y más dinero?
Se ha dicho que EU es la primera potencia económica y militar de la Tierra. Pues fíjese usted que no, pero casi sí, porque sin el casi sí, nos encontramos que casi no, y es que su principal rival, la Rusia de Vladimir Putin, posee 7000 ojivas nucleares, mientras que EU tiene 6800, es decir tan solo 200 ojivas menos que el Kremlin.
¿Qué otras naciones están armadas hasta los dientes con exterminadoras armas nucleares?
Ahí le va. De acuerdo al último reporte de la Asociación de Control de Armas, una organización independiente con sede en Washington, Francia ocupa el tercer lugar en ese tipo de armamento con 300 ojivas nucleares, 260 están en poder de China, Reino Unido posee 215, Paquistán 140, India 110, Israel 80, Corea del Norte 10. ¿Y Alemania se volvió pacifista después de que Hittler intentó hacer la primera bomba atómica nuclear en el mundo?
Alguno de mis tres lectores y radioescuchas preguntaba que cuántas cabezas u ojivas nucleares tiene México. Mi respuesta es que solo cuenta con puras cabezas de ajo y políticos descabezados.
Pero mire usted, si Pitágoras no miente, en este momento hay en bases militares de todo el mundo 14,915 ojivas o cabezas nucleares. Que poseen esas naciones. Pareciera que el mundo está enfilado en una macabra carrera armamentista sin ganadores. ¿Qué ocurriría si un par de locos llamada “La Bestia Trumpiana” y su homólogo Putin midieran fuerzas? Este mundo quedaría como el más gigantesco desierto sin vida.
Recuérdese que el 6 y 9 de agosto de 1945 cuando la Segunda Guerra Mundial ya había terminado, EU borró del mapa a dos ciudades japonesas, Hiroshima y Nagasaki, con una saña y estela de muerte jamás vista.
Con las ojivas nucleares actuales desaparecerían las principales 15 mil ciudades del mundo.
Hasta da ñáñaras. De acuerdo al más reciente Tratado de Reducción y no Proliferación de Armas Estratégicas, Estados Unidos y Rusia deberán equiparar su poderío nuclear hasta abril de 2018, a la espera de un nuevo tratado a ser firmado en 2020. Para “La Bestia Trumpiana” solo imperan en el mundo dos leyes: La suya y la ley de Herodes.
¿Qué poder humano o divino será capaz de poner en paz a Trump que no vaya a acabar con la humanidad?