«La chica que lo tenía todo», de Jessica Knoll
Cultura miércoles 8, Feb 2017- Rocaeditorial
Una novela adictiva que nos conecta con lo más profundo de nuestros miedos y ambiciones, y que nos revela cómo una mujer en apuros y atormentada es capaz de las más maquiavélicas argucias y los más inteligentes engaños.
Como estudiante en la prestigiosa escuela Bradley, Ani FaNelli no pasó la mejor de las adolescencias. Ahora, con un trabajo glamuroso, un armario caro y un apuesto novio, está muy cerca de vivir la vida perfecta por la que ha trabajado tan duro. Pero Ani tiene un secreto. Hay algo en su pasado que todavía la persigue: algo privado, oculto y doloroso que amenaza con destruirlo todo.
Con una voz y un estilo tan singular como lleno de giros dramáticos, La chica que lo tenía todo explora, a través de una protagonista excepcional, la presión insoportable bajo la que viven muchas mujeres; aquellas que se ven obligadas a tenerlo todo y, lo que es peor, a tenerlo todo bajo control.
Fragmento
“—Cuidado —dijo riéndose.
Después fuimos dentro y nos sentamos con las piernas cruzadas alrededor de la mesa de la cocina para jugar al duro otra vez, solo que aquella vez el whisky me quemó la garganta cuando me tocó beber. Dean dijo algo tan gracioso que casi me caigo de la risa. Liam —no, espera, Peyton—, Peyton estaba a mi lado y me levantó. Me dijo que quizá sería mejor que me saltara la siguiente ronda. Miré a su otro lado en busca de Liam. Yo quería a Liam.
—Está bien. —Dean volvió a inclinar la botella sobre los vasos.
Alguien llamo maricón a Peyton y él dijo:
—Miradla. No pienso aprovecharme de ella estando así.
Debió ser entonces cuando me quedé dormida. Porque lo siguiente que recuerdo es que estaba tumbada en el suelo de la habitación de invitados con la bolsa de deporte al lado. Gemí y levante la cabeza, y el chico que estaba entre mis piernas hizo lo mismo. Peyton. Me apretó el muslo y siguió haciendo aquello que probablemente creía me daba placer. Yo no sentía nada.
Se oyó ruido al otro lado de la puerta. Alguien asomó la cabeza y le metió prisa a Peyton para que hiciera algo o fuera algún sitio. Estaba demasiado cansada para taparme.
—Ya acabo —dijo Peyton. Se oyó una risa y la puerta se cerró.”
Jessica Knoll ha sido editora en Cosmopolitan y articulista para la revista Self. Creció en Filadelfia, se graduó en la Shipley School de Pensilvania y amplió sus estudios en el Hobart and William Smith Colleges. Vive en Nueva York con su marido. La chica que lo tenía todo es su novela debut, un éxito en treinta y cinco países y finalista del Edgar Award, y que la ha encumbrado como autora bestseller de The New York Times y como una de las escritoras revelación estadounidenses con más proyección internacional.