Descartes priístas
Ramón Zurita Sahagún miércoles 18, Ene 2017De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
¿Qué tan cierto será que dos de los cuatro principales aspirantes priístas a la Presidencia de la República no tienen el propósito de ser candidatos de ese partido?
¿Será real que los secretarios de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, y de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, se encuentran lejanos de esa posibilidad por decisión propia o solamente están engañando a los electores potenciales?
De acuerdo con las mediciones de encuestas y sondeos, los priístas tienen su trébol de cuatro hojas de la buena suerte, de donde seleccionarán a su candidato presidencial, aunque queda desajustado si es verdad que tanto Videgaray como Meade se bajan de esa posibilidad.
Ninguno de los dos obtiene buenos resultados en las mediciones realizadas y tal vez eso los desanimó, al grado de afirmar en sendas entrevistas que no exploran tal posibilidad de convertirse en candidato presidencial.
Con esas dos posibles bajas, la baraja priísta quedaría reducida a dos cartas, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, lo que los convertiría en atractivo para todos los reflectores.
De ahí que los tricolores requieren de otras cartas para jugar con ellas y que de ahí surja su candidato presidencial.
Los dos que podrían atraer la atención de los futuros votantes, si se encuentran dentro del universo priísta de prospectos, aunque, por ahora muy lejanos.
Se trata de la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, quien en los días recientes ha manifestado su interés de participar en la contienda interna de su partido, y del secretario de Salud, José Ramón Narro Robles, quien es uno de los pocos integrantes del gabinete que es visto con simpatía.
Ambos, Ortega y Narro no pintan demasiado, por ahora, en las encuestas, pero el titular de Salud es uno de los prospectos del PRI con mayores posibilidades de crecimiento.
Su pasado universitario lo posiciona bien dentro de la comunidad universitaria, ya que su papel como rector de la UNAM, fue ampliamente reconocido, tanto que le valió ser llamado como titular de la Secretaría de Salud, aunque algunos lo candidatearon para la de Educación Pública.
Narro Robles ha sido un servidor público de amplía valía en los cargos que ha ostentado, aunque ninguno de ellos de elección popular, ya que ha fungido como subsecretario de Gobernación y de Salud, en ambos casos teniendo como titulares en esas dependencias a dos personajes reconocidos, si es que vale el término, como apartidistas.
Es cierto que los dos ejercieron el mando en los tiempos de la todavía presidencia férrea de los priístas y que tenía cercanía y hasta influencia sobre el Presidente en turno, lo que no les restó que siguieran siendo figuras reconocidas fuera del ámbito político.
Los dos personajes con los que colaboró Narro Robles fueron rectores de la UNAM: Jorge Carpizo McGregor y Juan Ramón de la Fuente y con el segundo incluso colaboró dentro de la Rectoría de la UNAM y lo sucedió en el cargo.
La incorporación del secretario de Salud es bien vista dentro y fuera de su partido, por lo que podría tener un rápido posicionamiento y crecimiento en las encuestas en el momento en que se le considera como prospecto real a la candidatura presidencial de su partido.
En el caso de Ivonne, su trayectoria política es una de las más completas, ya que inició como alcaldesa, siguió como diputada local, federal, senadora y gobernadora, repitiendo como diputada federal, cargo al que ya solicitó licencia, para dedicarle mayor tiempo a la búsqueda de un buen posicionamiento que le permita entrar en la disputa.
El nombre de Ivonne no es tan sonoro como el de Margarita Zavala, a pesar de que la trayectoria de la priísta es mayor y su participación viene desde el ras de la tierra.
Durante su desempeño como legisladora no ha sobresalido demasiado en debates o en presentación de iniciativas, pero adoptó una causa que es la de las mujeres y eso le vale reconocimiento dentro de este sector.
Las relaciones políticas de Ivonne son sobresalientes, ya que mantiene cercanía con el presidente Enrique Peña Nieto y con parte de su gabinete y su decálogo en respuesta a la pregunta presidencial realizada a los ciudadanos de qué habrían hecho, para evitar el gasolinazo, le valió reconocimiento, aunque algunos consideran que fue pactada con el propio Ejecutivo federal.
En estos dos nuevos prospectos hay diferencias, ya que mientras Ivonne se le considera como parte del sistema y política de carrera por los distintos cargos por los que ha desfilado a Narro se le ve como parte de la comunidad inteligente vinculada a la actividad política por necesidades del sistema.
De prosperar su esfuerzo, Ivonne sería la única mujer de militancia priísta en estar registrada dentro de la carrera por la candidatura presidencial de ese partido, ya que las Claudias simplemente no prendieron en el ánimo ciudadano. Una, Ruiz, ya salió del gabinete y con ello sus posibilidades quedaron relegadas y la otra, Pavlovich, no despunta siquiera en el cargo de gobernadora.
Con unas cartas nuevas, la baraja priísta podría dar mayor presencia y vida a los apanicados priístas que ven como poco apoco, los electores de les van alejando.
Miguel Ángel Osorio Chong, Eruviel Ávila Villegas, José Ramón Narro Robles e Ivonne Ortega Pacheco podrían constituir las opciones que presente este partido para encontrar al candidato idóneo que pueda competir en igualdad de circunstancias con los abanderados de los otros partidos o el independiente.
Por lo pronto, hay que esperar para ver si en serio que Videgaray y Meade se bajaron de la competencia.