La incertidumbre
¬ Salvador Estrada martes 3, Ene 2017Folclor urbano
Salvador Estrada
La falacia política ya hartó a los ciudadanos y ahora tienen que tronarse los dedos ante los aumentos que les esperan precisamente por el incremento a la gasolina.
El enojo de los ciudadanos es manifiesto en las redes sociales porque se sienten engañados cuando se les informó que no habría aumento con la reforma energética, sino que bajaría de precio la luz, la gasolina y el gas y…¡0h! todo lo contrario.
Pero ese incremento llevará a diversas alzas en los comestibles, que se darán en el transcurso del año, y también en el transporte, aunque aún no se dé a conocer, porque los taxistas y transportistas van a empezar a cerrar calles para pedir revisar sus tarifas. Y quieren aumentos, porque el precio de la gasolina continuará subiendo y se espera que en los próximos tres meses llegue a 20 pesos el litro de gasolina, que ahora se vende en 15 pesos con 99 centavos.
Las autoridades capitalinas señalan que no habrá aumento al transporte, taxis y camiones, sino que habrá un “ajuste”, una forma usada en sexenios pasados para disfrazar el incremento en el precio en las tarifas.
Ya empezaron los ciudadanos a manifestar su enojo y en diversas entidades del país organizaron marchas para protestar por el aumento en el precio de ese combustible e incluso en la Ciudad de México “cerraron simbólicamente una gasolinería”.
Campesinos de diversas centrales anuncian que llevarán a cabo manifestaciones en las capitales de todo el país, de rechazo al aumento a la gasolina y diésel, porque impactará en la producción de alimentos.
El PRD quiere organizar a sus afiliados y seguidores para que empiecen las protestas por esa alza de precios, porque ese aumento provocará “el acelerado incremento en los precios de los productos de uso común”.
Por su parte, los priístas señalan que el incremento en la gasolina no afectará las elecciones de este año en Nayarit, Estado de México y Coahuila. Bueno, eso creen, pero los ciudadanos creen otra cosa.
Los mexicanos inician este año con incertidumbre ante los engaños de los funcionarios públicos y sus partidos y para adquirir cierta tranquilidad reconocen que ha llegado la hora….de rezar. Y encomendarse al Altísimo, el único en quien creer, para mejorar su vida…Padre nuestro….
