De manteles largos
¬ Gustavo Mora jueves 14, Oct 2010Nostálgicos y acelerados
Gustavo Mora
No solamente Carlos Slim estuvo de manteles largos el fin de semana por la boda de su hijo. El Instituto Federal Electoral también hizo bueno aquello de que a cada capillita, le llega su fiestecita y celebró los primeros 20 años de su fundación.
Leonardo Valdés Zurita también echó la casa por la ventana, aunque no con la ostentación de Slim. Pero ambos tuvieron más de 2 mil invitados y la diferencia estuvo en el banquete y los modestos bocadillos que se sirvieron en una y otra fiesta.
Sin duda alguna, el aplausómetro del IFE se lo llevó el ex presidente José Woldenberg a quien todos querían saludar o pedirle autógrafos.
También estuvieron los ex presidentes Emilio Chuayffet Chemor, Luis Carlos Ugalde (el menos aplaudido y solicitado), Jorge Carpizo McGregor y Arturo Núñez Jiménez, aunque sus intervenciones fueron más bien discretas.
Valdés Zurita dijo que la tercera década del IFE debe ser la de la ciudadanía plena. Y Chuayffet se lamentó que mientras el Instituto Federal Electoral se profesionaliza, la política se desprofesionaliza.
Todo esto fue en el acto matutino porque en el vespertino, que tuvo como magnífico escenario el Palacio de Minería, canceló el Presidente Felipe Calderón Hinojosa y el ex presidente Carlos Salinas de Gortari fue expositor. El autoexiliado Ernesto Zedillo Ponce de León quien le ganó al IFE y al Comité Ejecutivo Nacional del PRI la noticia de que el Revolucionario Institucional había perdido la Presidencia de la República por primera vez en 70 años, obsequió con su ausencia ya que le interesa más que lo etiqueten como Made in USA. Y los ex presidentes Miguel de la Madrid Hurtado y Luis Echeverría Álvarez están más cerca de las esquelas, que de los actos de aniversario.
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Juan Ramón de la Fuente dejó la rectoría con fama de universitario, ajeno a las tentaciones y actividades de partidos políticos y a las candidaturas para cargos de elección popular. Sin embargo, el hecho de vivir en el error (fuera del presupuesto) lo han hecho reconsiderar y coquetear con algunos partidos que lo tientan con la posibilidad de que sea su candidato presidencial en el 2012. Por lo pronto, acaba de pronunciarse a favor de las alianzas electorales, lo que ha de haber puesto morado (negro ya es) a Andrés Manuel López Obrador que va contra esas asociaciones. Así que De la Fuente no sería candidato de la minialianza Convergencia-Partido del Trabajo pues él trabaja con los partidos que son palabras mayores.
Ya hubo otro rector que se dejó seducir por el dulce canto de la sucesión presidencial. Fue Guillermo Soberón Acevedo quien hizo a un lado su neutralidad académica para inscribirse en el remedo de comparecencias priístas que ordenó Miguel de la Madrid Hurtado para incluir a su amigo Miguel González Avelar quien no había comparecido ante la Cámara de Diputados, ni ante el Senado de la República como lo hicieron Alfredo del Mazo, Manuel Bartlett, Carlos Salinas de Gortari, Ramón Aguirre Velázquez y Sergio García Ramírez. La presentación de Soberón fue: “yo no he sido priísta… ¡por ti seré!”, aunque sabía que sus posibilidades eran nulas.
Ahora es Juan Ramón de la Fuente con fama de discreto y universitario de pura cepa, el que se lanza a la pista y empieza a hacer ejercicios de calentamiento, aunque no le han puesto número en el frente y la espalda… Todos los presidentes de los partidos políticos enviaron un mensaje grabado al IFE con motivo de sus dos décadas de actuación, excepto Jesús Ortega que delegó esas funciones en su segunda de abordo. El árbitro de los comicios merece más consideración y no pretextos de que estamos enredados los unos con los otros… Los consejeros solicitaron que los dejen hacer su trabajo, sin las presiones ni del Gobierno, ni de los partidos políticos… Por cierto, Carlos Slim se comprometió a ser pinente en los seminarios que organiza el Instituto Federal Electoral… Convergencia no tiene de cliente más que al que se autonombra “presidente legítimo”. Y su votación en Veracruz que hace 6 años fue impresionante, pero no se puede engañar a cien, cien veces… Nadie ha tocado la placa de la Glorieta Insurgentes del Metro en la que se rinde homenaje a Alfonso Corona del Rosal, un político de los que ya no hay… tampoco, el monumento a Carlos Alberto Madrazo Becerra instalado en el malecón de Villahremosa. Ni la estatua de Jesús Reyes Heroles. En cambio, sigue como parche mal pegado la estatua de Manuel J. Clouthier junto al monumento de Álvaro Obregón. Y la estatua de Vicente Fox Quesada ya fue derribada hace años en Boca del Río (Veracruz).