¡Rescaten a Xochimilco!
¬ Salvador Estrada martes 29, Nov 2016Folclor urbano
Salvador Estrada
Xochimilco, pueblo prehispánico, reconocido como Patrimonio de la Humanidad, está abandonado por sus autoridades y de no invertir recursos económicos esa delegación se convertirá en un pueblo deplorable.
El delegado Avelino Méndez ha sido criticado por no invertir su presupuesto en obras sociales y usarlo “para fiestecitas” y de mil 725 millones de pesos que se le asignaron a Xochimilco para este año, solamente ha invertido 896 millones de pesos, 52 por ciento del presupuesto, según informes de la Asamblea Legislativa.
Xochimilco tiene muchas colonias que no tienen pavimentación y carecen de agua potable y las calles dizque pavimentadas, tienen enormes baches, que en estos tiempos de lluvias parecen “albercas”.
Diversos canales de Xochimilco siguen con lirio acuático y otros están llenos de basura y ya no son navegables, por lo cual el paseo por ellos en las trajineras se complica y la policía designada para proteger a los turistas, no se ven en los canales.
Y obviamente que los comerciantes abusan del turismo nacional y extranjero, al cobrarles caro los alimentos y las bebidas, lo cual obliga a los paseantes a alejarse de ese lugar, porque “ya se pasaron de listos”.
La ambición de las constructoras para edificar condominios está desplazando muchas chinampas, en contubernio con las autoridades delegacionales, lo cual ha provocado enojo de los pobladores.
Y otro enojo de los habitantes de ese pueblo de las flores, son los comerciantes ambulantes, que así se les llama, pero que son fijos, porque tienen un lugar en el estacionamiento del mercado 377, lo que ha indignado a los “auténticos locatarios”.
La Asamblea Legislativa ha insistido al delegado para que reubique a los comerciantes que instaló en el mencionado estacionamiento, porque “no existen condiciones de ningún tipo para ejercer el comercio en ese sitio”.
Pero en Xochimilco no solamente tiene esas anomalías, sino que cuenta con un fideicomiso, supuestamente para salvar a ese pueblo prehispánico, debido al abandono en que lo tienen las autoridades pasadas y presentes, que se ha convertido en un “fideicomiso fantasma”.
El gran misterio es que ni los legisladores ni las autoridades delegacionales saben el destino de ese fideicomiso que cuenta con millones de pesos para el rescate de los canales y del Centro Histórico.
El pueblo de Xochimilco debe ser salvado de caer en desgracia por las ambiciones de autoridades y constructores, que no se tocan el corazón para enriquecerse.
