Sumisión al poder político es corrupción, dice Edgar Elías Azar

Cd. de México jueves 20, Oct 2016

• Reunión de la Unión Internacional de Magistrados

José Luis Montañez

 

 

El presidente de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos (Conatrib), magistrado Edgar Elías Azar, advirtió que la falta de autonomía del Poder Judicial y su sumisión frente al poder político son corrupción, al hablar ante juzgadores de 69 países, donde subrayó que en México la Judicatura está expuesta a recortes presupuestales frente a otros programas políticamente más relevantes.

En el marco de la 59 Reunión Anual de la Unión Internacional de Magistrados, enfatizó que la sujeción presupuestal será talón de Aquiles en cualquier reforma a la justicia que se emprenda, siempre que no haya una modificación constitucional que brinde a los poderes judiciales verdadera autonomía, lo que se convertiría en la manumisión de la función judicial.

Elías Azar participó en un panel dentro de la conferencia La Corrupción en los Poderes Judiciales, en el que reconoció que el añejo problema de la corrupción en los medios judiciales es una severa patología en la función jurisdiccional del Estado, que, junto con la politización de la impartición de justicia, a través del sometimiento de los juzgadores al poder político o fáctico, ha lastimado a la sociedad.

Al afirmar que un juzgador corrupto es un juzgador sometido, y en sentido contrario, un juzgador sometido es un juzgador corrupto, comentó que a veces de manera abrupta y directa, y otras con sutileza, se presentan tendencias de un poder político que quiere dominar, someter y actuar hegemónicamente sobre la Judicatura. “Y esto no lo podemos ocultar”, consideró.

Con la presencia del ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ministro en retiro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, estableció la diferencia entre la jurisdiccionalización de la política y la insana politización de la jurisdicción. Pasar de una a otra es tan sólo cuestión de descuido y de perversión, y puntualizó y que esta última atenta irremediablemente contra la autonomía judicial.

Advirtió que el Poder Judicial no cuenta al momento con la posibilidad de tener una verdadera autonomía. “Quedamos, ante los avatares económicos y de finanzas públicas, expuestos a modificaciones y tradicionalmente recortes de presupuesto ante la magnífica presencia de otros programas políticamente más relevantes”, lamentó.

El también presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México dijo que la garantía de la autonomía judicial anhelada debe quedar plasmada en el texto constitucional imponiendo un límite mínimo del porcentaje del presupuesto de egresos al Poder Judicial. “No queremos más, pero tampoco podemos operar la justicia con menos”, precisó.

Elías Azar afirmó que la autonomía financiera y presupuestal del Poder Judicial es la verdadera piedra de toque en estos tiempos, y dijo que ésta no puede seguir contemplándose como un buen cliché en el discurso público y político.