Ladrilleras, empeoran índices de polución
Cd. de México lunes 17, Oct 2016- Valle de México
Producir ladrillos de manera artesanal es una actividad que desde hace años brinda empleo a miles de familias mexicanas; sin embargo, también es una fábrica de contaminación que afecta al medio ambiente y deteriora la salud de las personas en el Valle de México.
Tal es el caso de don Magdaleno, un ladrillero del municipio de Chicoloapan, en el Estado de México, que lleva más de 20 años haciendo este trabajo, en el que están involucrados todos los miembros de su familia.
La ladrillera que él administra pertenece al negocio familiar donde trabajan su papá de 84 años, dos hijos y una de sus hijas de 13 años de edad que se integra cuando sale de la escuela.
Además, todos se exponen al calor y al humo que sale del horno al momento de quemar los ladrillos durante 72 horas continuas en promedio, pues durante ese lapso se introduce combustible para mantener el fuego.
En América Latina, la mayor parte de la elaboración de ladrillos es de manera artesanal, lo cual es poco eficiente y genera mayores contaminantes, indicó Carlos Antonio Caballero Valdés, director de la carrera de Ingeniera en Desarrollo Sustentable del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México.
Por su parte, la investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, Rocío García Martínez, explicó que no se tiene un registro exacto de la cantidad de hornos ladrilleros existentes, ni del número de personas que trabajan en ellos.
Tampoco hay una norma específica que controle las emisiones de contaminantes emitidos a la atmósfera en el proceso de fabricación y existen sólo las que consideran el proceso de cómo producir el ladrillo y la calidad del mismo.
“Algunos contaminantes que se emiten son óxido de nitrógeno, monóxido de carbono, dióxido de azufre, compuestos orgánicos totales, partículas menores a 10 micras y gases de efecto invernadero como el metano”, señaló la experta.
Estas partículas se generan durante el proceso se cocción del ladrillo, el cual puede ir de 48 a 72 horas y el impacto al medio ambiente depende de las horas trabajadas, de la carga y de la cantidad de combustible utilizada en el proceso.
La investigadora alertó que el uso de madera y aceite quemado como combustible no sólo impacta a la atmósfera, sino que también en los ecosistemas; en el caso de la madera no hay un proceso de reforestación para que esas condiciones naturales se mantengan.
Al respecto, Caballero Valdés dijo que la mayoría de las ladrilleras artesanales utilizan madera, plásticos, llantas, carbón o algún otro material para la combustión que generan otro tipo de contaminantes como las dioxinas.