Con Pasión en movimiento celebra el Auditorio Nacional 25 años de arte
* Especiales, Espectáculos martes 27, Sep 2016- Danza contemporánea con la Compañía Tania Pérez-Salas
- La gran fiesta conmemorativa inició con una intervención dancística en el vestíbulo del recinto
Texto y fotos: Nando Arreguín Rojas
El ingreso al escenario principal del Auditorio estuvo enmarcado por Las Mañanitas, globos, y por supuesto un pastel de cumpleaños, con una bella modelo emergiendo de él.
El grandioso festejo del Auditorio Nacional por el 25 aniversario de su transformación, inició con una celebración de la altura artística del recinto: Pasión en movimiento, intervención dancística, a cargo de la Compañía Tania Pérez-Salas, quien nos llevó en un recorrido cargado de belleza, alegría, fuerza y sensualidad, por “las entrañas del magno escenario”.
“Las personas necesitan de imágenes, necesitan emoción, lirismo. La danza permite mezclar un placer estético, un placer dinámico y un placer emocional. Un mínimo de explicaciones, un mínimo de anécdotas y un máximo de sensaciones”, refiere Maurice Béjart en su autobiografía Un instant dans la vie d’autrui, y la maestra Tania Pérez-Salas lo refleja, evocando vivencias personales en su obra, logrando una empatía instantánea en el público, a través de su compañía, integrada por grandes intérpretes de países como México, Francia, Holanda, Cuba, Colombia y Estados Unidos.
La apertura del espectáculo fue una gran intervención en el vestíbulo del Auditorio con Remix 25, donde se mezclaron clowns, acróbatas y catrinas en zancos, quienes nos condujeron por los diferentes escenarios para deleitarnos con coreografías que, aunque diversas en sus temas, unificaron y mostraron el amplio sentido arquitectónico del lugar.
Pasión en movimiento, intervención dancística, a cargo de la Compañía Tania Pérez-Salas, quien nos llevó en un recorrido cargado de belleza, alegría, fuerza y sensualidad, por “las entrañas del magno escenario”.
Contemporáneo, coreografía de Sarah Matry-Guerre, inició el recorrido, pasando luego por Flamenco, de Tania Pérez-Salas, en colaboración de Marien Luévano. Hip Hop, también de Pérez-Salas, con la colaboración de Christine Flores, nos cargó de adrenalina, preparándonos para Camisas de fuerza/Puntas, una intensa coreografía de Sarah Matry-Guerre, que nos hizo “arrastrarnos con los intérpretes por el piso” para después elevarnos y dejarnos sin aliento en una Danza vertical, de Carolina Patiño, con cuatro bailarines-acróbatas aéreos.
Una pieza de Ópera de Rodrigo Barberá en la escultura Escenario 750, de Vicente Rojo, nos preparó para una meditación casi espiritual al admirar en la escultura Teorema inmóvil de Manuel Felguérez, las Esculturas Vivientes, coreografía de Shanti Oyarzabal, en colaboración con Myrthe Weehuizen.
El ingreso al escenario principal del Auditorio estuvo enmarcado por Las Mañanitas, globos y por supuesto un pastel de cumpleaños, con una bella modelo emergiendo de él.
3. Catorce dieciséis “es una obra que nace de mis entrañas”, dice Tania Pérez-Salas de su coreografía, “Nada estaba predeterminado y todo cabía en una sola circunferencia”. El gran recinto se convirtió en una sala íntima, acogedora, sillas por butacas, distancia por cercanía, multitud por petit comité, logrando el máximo impacto en la audiencia, contrastando el sonido barroco y renacentista con los más puros movimientos vanguardistas.
Macho Man XXI abordó la violencia hacia las mujeres y la violencia per se, desde la idiosincrasia mexicana: alegría, pasión, violencia, llevadas por los bailarines a una exposición por demás estética y potente con música mexicana como hilo conductor. La pasión derrochada en el escenario fue correspondida con un fervoroso aplauso.
Esculturas Vivientes, coreografía de Shanti Oyarzabal, en colaboración con Myrthe Weehuizen.
El siguiente paso fue literalmente a las entrañas del Coloso de Reforma, ya que para pasar al Lunario, fuimos conducidos por los camerinos del lugar, donde han estado célebres artistas, sin distingo, de absolutamente todos los géneros, esperando el llamado para brillar e iluminar en su momento el fastuoso escenario. Entre las figuras internacionales de habla inglesa que han pisado este escenario están Bon Jovi, Deep Purple, Chicago, Sting, Elton John, Rod Stewart, Franz Ferdinand, Morrissey, Peter Gabriel, The Eagles, Wynton Marsalis, Chick Corea, Diana Krall, Chuck Berry, B.B. King, Ray Charles, Paul Simon, Alanis Morissette, Liza Minnelli, Cold Play, Bob Dylan, Foreigner, Robert Plant y Lou Reed.
También ha figurado talento de habla hispana, como Miguel Ríos, Mecano, Hombres G, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Los Fabulosos Cadillacs, Miguel Bosé, Les Luthiers, Celia Cruz, Ricardo Arjona, Chayanne, Ricky Martin, Plácido Domingo, Paco de Lucía, Raphael, Rocío Dúrcal, Diego “El Cigala”, Roberto Carlos, Buena Vista Social Club, Enrique Bunbury, Marc Anthony, Chavela Vargas, José Carreras, Pablo Milanés, Mercedes Sosa, Julio y Enrique Iglesias.
Por este escenario han desfilado también estrellas nacionales, como Juan Gabriel, Luis Miguel, Vicente y Alejandro Fernández, Joan Sebastian, Marco Antonio Muñiz, Alejandra Guzmán, Marco Antonio Solís, Café Tacvba, Maná, Caifanes, El Tri, José José y Antonio Aguilar. Tampoco han faltado leyendas de las artes escénicas, como Marcel Marceau, Mijaíl Barýshnikov y David Copperfield. Grandes orquestas del mundo han ofrecido también actuaciones en el magno escenario, como la Filarmónica de Londres, la Filarmónica de Viena, La Philharmonia Orchestra de Londres y la Orquesta Mariinsky. Y se ha hecho presente el bel canto con compañías como la Ópera del Teatro Colón y transmisiones en vivo desde The Metropolitan Opera House.
Un piso por demás acuoso y surrealista fue la primera impresión y el adelanto para Las aguas del olvido, obra de Tania Pérez-Salas inspirada en el ensayo de Ivan Illich, H2O and the Waters of Forgetfulness; el agua como elemento de fuerza, dador de vida, purificador en sí mismo. Hay momentos en que los movimientos tan sensuales que mantienen el líquido como espejo, son trastocados por una fuerza explosiva que devuelve al agua a su estado primitivo como para fecundizarla, emergiendo los intérpretes renacidos de ella.
La primera parte de la celebración fue cerrada con una ovación más que merecida para la Compañía y su multipremiada directora Tania Pérez-Salas, quien agradeció a los asistentes, directivos del Auditorio Nacional, a sus bailarines, a los artistas invitados para el Remix 25, a su familia y a todos los que colaboraron para llevar a cabo su concepto y felicitó al Auditorio por su 25 años.
La Compañía Tania Pérez-Salas: Directora ejecutiva y artística, Tania Pérez-Salas; intérpretes: Sarah Matry-Guerre, Myrthe Weehuizen, Nicole Erickson Sievers, Allie Mae Gee, Christine Flores, Alicia Hauffray, Roberto Solís, Roberto Rodríguez, Jehbreal Jackson, Edisel Cruz González, Yubal Morales, Alexander Pineda, Jairo Cruz González, José Ramón Corral, Alfonso López y Octavio Dagnino Guzmán.
