Panistas inconformes
¬ Augusto Corro jueves 25, Ago 2016Punto por punto
Augusto Corro
El líder panista, Ricardo Anaya, designó a los nuevos presidentes de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, en medio de inconformidades.
Principalmente, porque hizo a un lado a Gustavo Madero, a quien le prometió el cargo de presidente en la llamada Cámara baja.
El mismo Madero dijo que el propio líder de su partido le ofreció la coordinación del grupo parlamentario panista y no cumplió.
En la presidencia de la Cámara de Diputados estarán el morelense Javier Bolaños y la queretana Guadalupe Munguía, cada uno seis meses.
Lo que se pensó que podría ser una designación equitativa, resultó un problema para los diputados panistas, entre ellos Madero, controvertido político blanquiazul.
Por cierto, Gustavo Madero no le dio vueltas al asunto y manifestó su malestar e íntima convicción de que Ricardo Anaya y el grupo que lo rodea no cumplen su palabra.
Lo anterior se registró en la reunión que sostuvieron los panistas en Morelos, en función del nuevo periodo legislativo en San Lázaro.
Estaba previsto que la lucha en el interior del Partido Acción Nacional llegaría tarde o temprano.
Al dirigente Ricardo Anaya se le complica su situación, porque su partido representa un pilar fundamental de apoyo para aquellos que buscan las candidaturas presidenciales en el 2018.
Por el momento, es la esposa del ex presidente Felipe Calderón, y el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, son los panistas más visibles que espiran el abanderamiento albiazul.
Se supone que el propio Ricardo Anaya también buscará llegar a Los Pinos, con los “campanazos” que logró al ganar siete gubernaturas en las elecciones recientes.
Esos triunfos pusieron al líder en una posición de luchar al mismo nivel con los otros contendientes panistas con los mismos deseos de obtener la candidatura.
Sin embargo, el multicitado Anaya tendrá que pensar detenidamente los pasos que dé, porque los militantes estarán muy pendientes de lo que ocurra, porque a pesar de su victoria, no dejan de señalarlo como un dirigente sin la experiencia necesaria para resolver los conflictos que se presentarán, como el control del partido que buscan los esposos Calderón.
Por cierto, el nombramiento de Javier Bolaños como próximo presidente de la mesa directiva de San Lázaro les dejó mal sabor de boca a los blanquiazules, por su pasado oscuro.
El nuevo directivo en San Lázaro trabajó, durante nueve años, al lado del ex gobernador panista de Morelos, Sergio Estrada Cajigal, señalado por sus presuntos vínculos con la delincuencia organizada, especial con Juan José Esparragoza “El Azul”.
YA BASTA DE LEYES
Es increíble la cantidad de leyes que tenemos los mexicanos contra cualquier tipo delito; sin embargo, la impunidad impera en todo el país.
¿Cuántos son los delincuentes que no son castigados, beneficiados por la corrupción de las autoridades?
Las estadísticas nos muestran que casi el cien por ciento de los delitos del crimen organizado no se castiga.
También sería importante señalar que la corrupción alcanza a funcionarios públicos de todos los niveles, a políticos, etc., que se amparan en el fuero, condición de privilegio que los pone al margen de juicios para enviarlos a la cárcel.
Esto viene a cuento, porque en el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se alistan para nuevas leyes anticorrupción.
El líder amarillo en el Senado, Miguel Barbosa, planteó desaparecer condiciones como el fuero y realizar juicios políticos y abordar la creación de leyes, como la Ley de Propaganda Gubernamental, la Ley de Obras y de Salarios Mínimos.
Quizá es necesario lo que señaló el senador Barbosa, pero ¿de qué servirían nuevas leyes si las que ya existen no se aplican?
Por ejemplo, ¿alguien se acuerda del juicio político a algún gobernador por su mala administración o el saqueo al tesoro público?
Si alguien les exigiera cuentas a esos “virreyes” es posible conocería que ninguno o pocos podrían andar en libertad.
Pero no olvidar que para la clase política existe, en la mayoría de los casos, una protección a los saqueadores del erario.
Repetimos, no es mala idea de más leyes anticorrupción, pero lo prudente es que las que existen se cumplan. Esto es muy importante si se quiere frenar la espiral de delincuencia que agobia a los mexicanos.
Si la impunidad galopante desaparece y se aplican leyes severas contra los criminales, no hay duda que descendería el índice de acciones ilegales.
En fin, el PRD de pugnar por el cumplimiento de las leyes que ya tenemos, para después buscar las complementarias. Acumular códigos legales sin aplicarlos no conduce a nada.