CNTE acaba con el danzón
¬ Salvador Estrada jueves 21, Jul 2016Folclor urbano
Salvador Estrada
En la histórica Ciudadela, que fue escenario de la “Decena Trágica”, ya no se puede transitar porque es el nuevo campamento de los maestros de la CNTE, que al ser desplazados del monumento a la Revolución, llegaron para ¡acabar con el danzón!
En efecto, desde hace años en la Ciudadela, todos los sábados, una orquesta danzonera llegaba a tocar al mediodía para regocijo y alegría de los amantes de ese ritmo, pero ahora con la invasión de los maestros “la tercera edad está triste”, porque la plaza está cerrada.
La delegación Cuauhtémoc, desde hace varias administraciones atrás, enviaba a los músicos para ejecutar los danzones más populares para el lucimiento de los “pachucos”, que vestidos a la usanza de Tin-Tan: pantalón de tubo, sostenido con tirantes y pretina arriba del estómago, sacos largos y con hombreras, así como con zapatos de punta con tacón cubano y sombrero con una pluma de adorno, eran el atractivo visual.
En la Ciudadela, los danzoneros, bailando como mandan los cánones, cuadrito, columpio, vuelta, montuno, y demás, emocionaban al “respetable” que les aplaudía “en el descanso”.
Amantes del danzón se daban cita a las doce del día para ver a los maestros, bailarines de salón, que hacían sus mejores pasos para ganar adeptos, sobre todo a los jóvenes que andaban de mirones.
La alegría se prolongaba hasta las ocho de la noche, ya sin orquesta, pero con Dvd’s.
También en la Ciudadela se daban clases de danzón. Mientras unos bailaban, otros aprendían con maestros o maestras, no crea que con los maestros disidentes. NO, de ninguna manera, con maestros danzoneros.
Ahora, la Ciudadela, llamada Plaza del Danzón, es un montón de casas de campaña, con hombres y mujeres, tirados, sentados, dormidos, que han hecho “un mugrero”, en ese sitio. Ya no se escucha ¡Hey familia! ¡Danzón dedicadooo…El grito es ¡No a la reforma educativa! ¡CNTE, CNTE! ¡CNTE!
Pero, sin ser imitadores, en la delegación Gustavo A. Madero, ya tienen “su plaza del danzón”, precisamente en su explanada, para deleite de hombres y mujeres que han llegado a la tercera edad, y que en el danzón se reencuentran con su juventud. También cuenta con su orquesta, sus pachucos y sus Dvd’s.
Aquí se pone de manifiesto que quienes dicen que el danzón se baila en un ladrillo, son mentirosos. Es un mito. No es cierto. Se baila “pegadito”, sin hablarse, como se baila el tango, el que también tiene adeptos y los domingos en el Parque México, por la tarde, puede admirar a los tangueros , “hacer los ochos, las boleas y los firuletes”.
Pero esa es otra historia y ya llegará el momento de tanguear.
Mientras tanto, los maestros de la CNTE seguirán en la Ciudadela, en espera de que sus dirigentes lleguen a un acuerdo con las autoridades para que abandonen la plaza y regresen a sus estados. Por lo pronto, los sábados estarán muertos y “la tercera edad”, amante del danzón, seguirá “tristeando”.