Usos y abusos del mezcal
¬ José Antonio López Sosa lunes 18, Jul 2016Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Oaxaca, Oax..- Un destilado con siglos de historia en nuestro país, ha resurgido en los últimos años posicionando el nombre de México y de sus estados productores —Oaxaca como el más importante de ellos—, ante el mundo.
Las propiedades organolépticas (como dicen los que saben) que el mezcal tiene en sus distintas variedades dependiendo del agave, son únicas.
Ahora bien, el posicionamiento del mezcal ha beneficiado a muchos vivales y a pocos productores, como suele suceder en México, las ganancias no son para quienes sudan el trabajo, sino principalmente para sus intermediarios.
Pues bien, vemos en el mercado decenas de marcas de mezcales artesanales, quienes saben a fondo del tema dicen que deben estar por encima de los 40 GL y procesados sin químicos y de forma artesanal, fermentando el mosto en tinajas de maderas locales y destilándose en alambiques de cobre o en ollas de barro.
Estos mezcales vienen de pueblos con palenques (lugar donde se elabora el mezcal) y maestros mezcaleros en Oaxaca, sin embargo ni palenques, pueblos o maestros mezcaleros están recibiendo beneficio alguno de esta moda.
En las ferias de mezcal artesanal vemos a hispters o mercadólogos muy “nice” que explican a fondo la historia del mezcal y todo el rollo relativo al respeto por las tradiciones, tienen etiquetas y botellas muy sofisticadas, algunas retro y otras incluso con papel de agave, estos expositores jamás en su vida han salido al campo a cortar maguey o han cargado piedras para llenar un horno.
El discurso que dan sobre el mezcal y los orígenes del mismo no es más que puro comercial, ellos venden sus botellas a precios altísimos y al final del día, pagan una miseria a los productores artesanales de mezcal, ellos no tienen una ganancia digna por el trabajo que hacen.
Son contadas las marcas de mezcal cuyos propietarios son quienes lo elaboran, está metida una cadena de comercializadores salvajes que viven de pagar pocos pesos por muy buenos mezcales a granel y venderlos en botellas muy chic en veinte o más veces el valor real del mezcal.
¿Por qué creen que nunca aparece una foto del maestro mezcalero o del palenque en una marca de mezcal?, son fotografías genéricas, es más, pocas veces dice el pueblo o los datos exactos del maestro mezcalero.
Este abuso del mezcal está enriqueciendo a pocos y encareciendo el producto. Basta ir a Matatlán, a pocos kilómetros de la ciudad de Oaxaca y preguntar cómo una familia que elabora buen mezcal, se lo vende a distintas marcas, a precio de granel.
Para poner un ejemplo, un litro de mezcal tobalá a granel del pueblo San Baltazar Guelavila ronda al público en general (menudeo) en los 110 pesos, mientras que envasado el mismo mezcal tobalá en la botella de Pierde Almas tobalá de 750 ml, cuesta cerca de mil 400 pesos.
De los pocos proyectos integrales que hay para la conservación de los destilados artesanales, mezcales y sobre todo, que hace comercio justo con los locales está “La Mezcaloteca”, mientras tanto la moda sigue y el dinero va a todos los bolsillos, menos al de quien siembra el agave y elabora el mezcal.