Racismo y violencia
¬ Augusto Corro lunes 11, Jul 2016Punto por punto
Augusto Corro
Las pugnas raciales en Estados Unidos vienen de siglos atrás y seguirán sin que nadie sepa hasta cuándo terminarán.
El odio entre blancos y negros se recrudece por temporadas debido a la violencia de policías contra los negros.
Con la llegada de Barack Obama pensé que el tema del racismo estaba superado. No fue así. A principios de la semana pasada, dos negros perecieron, en hechos diferentes, a manos de los representantes de la ley.
Los asesinatos fueron grabados y los videos aparecieron en las redes inmediatamente con el repudio de la comunidad afroamericana.
Las protestas ciudadanas se multiplicaron por todos lados.
Así, el jueves al final de una jornada de manifestaciones, once policías blancos fueron emboscados y cinco de ellos perecieron. Nueve personas resultaron lesionadas.
El francotirador, Micah Xavier Johnson, de 25 años, ex combatiente de Afganistán fue abatido por la policía.
La masacre de policías derivada de la lucha racial llevará a las autoridades a pensar seriamente en medidas que eviten más muertes.
A través del tiempo, la represión contra los negros fue práctica común de los representantes de la ley que ven en la gente de color a delincuentes en potencia.
¿Se podrá controlar la violencia racial? Lo veo casi imposible.
Los afroamericanos ya no se encuentran dispuestos a ser tratados con tanta violencia por los policías blancos llenos de prejuicios raciales.
Nos queda, pues, esperar lo que sigue que no augura ni tranquilidad, ni optimismo.
A LA ANTIGÜITA
El nuevo líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Ochoa Reza, fue destapado a la “antigüita”.
La designación se hizo desde la semana pasada y fue apoyada por los sectores obrero, campesino y popular, como ocurría en la época gloriosa de Fidel Velázquez.
Ahora será la cúpula tricolor la que ratificará el cargo de Ochoa Reza, que para decirlo en términos coloquiales se ganó al tigre de la rifa.
En otras condiciones y en otras épocas, la dirigencia en el PRI significaba un estatus político con un futuro promisorio en la política.
Pero hubo cambios y el liderazgo priísta tendrá que enfrentar un sinnúmero de conflictos que tienen a esa institución política lamiéndose las heridas de las derrotas en las elecciones estatales recientes.
El PRI perdió siete de doce gubernaturas por mala elección de los candidatos, pero principalmente porque los gobernantes de extracción tricolor, prefirieron inclinarse por la corrupción y olvidarse del pueblo.
Al dirigente Ochoa Reza, ya torpedeado por sus propios correligionarios, debido a su controvertida militancia partidista, le tocará regresar al PRI a la senda de los triunfos, cosa que no será fácil.
No tendrá que pasar mucho tiempo para que el líder priísta muestre su capacidad política. El próximo año se efectuará el cambio de gobernador en el Estado de México, la “joya” de la corona, como le dicen los políticos.
Según los conocedores, el triunfo o derrota de los partidos en esa justa electoral podría mostrar algo de lo que ocurrirá en los comicios presidenciales del 2018.
Los panistas-perredistas ya probaron los triunfos de la victoria con sus alianzas en Veracruz, Durango y Quintana Roo. ¿Ocurrirá lo mismo en el Estado de México?
¿Tendrá Ochoa Reza la experiencia suficiente para vencer a los panistas-perredistas o a los morenistas coaligados con grupos locales de izquierda?
No pasará mucho tiempo para saberlo.
Mientras, el PRI regresó al pasado, a aquellas épocas cuando los sectores obrero, campesino y popular que lo integraban eran parte fundamental del poder y de sus victorias.
Después llegaron los tecnócratas y todo cambió para mal en la política, como lo tenemos comprobado. Los “grillos” con un respaldo académico de las mejores universidades del mundo no fueron garantía para sacar a México de la pobreza.
EL CHAPO NO SE FUGÓ
El narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán huyó de la prisión.
Esa noticia fue difundida en las redes sociales y fue necesario que las autoridades desmintieran esa información, calificándola de “totalmente falsa”.
Además, publicaron una fotografía del capo, sentado frente a lo que parece un escritorio en un pasillo del penal de Ciudad Juárez, Chihuahua.
La falsa fuga de “El Chapo” se volvió viral en las redes sociales y tendencia en México y Estados Unidos.
Por cierto, “El Chapo” sigue en espera de su extradición al vecino país.