El binomio veracruzano de Sandoval-Del Castillo

Ramón Zurita Sahagún lunes 4, Jul 2016

De frente y de perfil

Ramón Zurita Sahagún

 

 

Veracruz es un estado donde todo puede suceder y en el que una serie de funcionarios públicos instrumentaron sus propios códigos para el cobro de comisiones que les dejaron enormes ganancias en la otorgación de contratos de servicios.

Uno de ellos es Ricardo Sandoval Aguilar quien con uno de los personajes más influyentes del “duartismo” se convirtieron en los principales beneficiarios de los contratos para la prestación de servicios en el sector salud.

La dupla formada por Juan Manuel del Castillo González, en su momento subsecretario de Finanzas y secretario particular del gobernador, Javier Duarte de Ochoa y actual diputado local electo fue la pinza ideal con la que Sandoval Aguilar efectuaba sus transacciones.

Del Castillo fue llevado y traído por toda la administración pública estatal por su amigo de la infancia, Javier Duarte de Ochoa, por lo que nadie dudaba de las confesiones de Juan Manuel de que su amigo, el gobernador estaba al tanto de las negociaciones que hacía a su nombre.

Del Castillo y Sandoval funcionaban como una verdadera máquina engrasada en la que se otorgaban contratos, mediante un módico 15 por ciento del porcentaje, pero no conforme con ello se pedía a los proveedores otro porcentaje similar para el pago de sus facturas.

Este modo de operar les valió ser reconvenidos en diversas ocasiones, ya que Sandoval filtraba las facturas de sus proveedores dispuestos a colaborar con la “causa” y del Castillo procuraba los pagos desde su cargo en Finanzas.

Todo esto se vio interrumpido durante la gestión de Juan Antonio Nemi como titular de la secretaría de Salud, aunque la llegada del nuevo secretario de Salud, Fernando Benítez Obeso en 2014, les permitió regresar a sus viejos esquemas.

El sector salud fue uno de los que más contratos entregaron a las empresas fantasma que hoy son objeto de una amplia investigación por parte de las autoridades del Sistema de Administración Tributaria del gobierno federal.

La forma de operar en el sector salud de Veracruz era ampliamente conocida, aunque el escándalo estalló a raíz de una demanda interpuesta en contra de Ricardo Sandoval.

Sin embargo, en el Veracruz de no pasa nada, no les fue extraño que Ricardo Sandoval se ausentara durante varias semanas de su oficina, tiempo en que se trasladó a Papantla y Córdoba.

En el primero de los municipios fue en auxilio del candidato priísta a diputado local, Camerino Basilio Picazo Pérez, quien perdió la elección, con todo y el respaldo económico de Sandoval.

Sin embargo, en Córdoba su amigo y “socio” Juan Manuel del Castillo González libró el resultado en las curules y por poco margen, pero ganó y ahora es diputado local electo.

Con todo y ello Sandoval Aguilar siguió ausente de su oficina, aunque siguió operando los asuntos de la Secretaría de Salud, ante la apatía y tolerancia de Benítez Obeso.

Pero la ausencia de Sandoval Aguilar de su oficina no fue tan notoria, ya que Judith Parrazal Herrera, cubrió esas ausencias, estableciendo sus propios métodos de cobranza, distinguiéndola la frase de “mándame los contra recibos” con la que aludía al dinero que se le debía entregar por adelantado para el pago de facturas pendientes.

Ese sistema lo había implementado desde su paso por la administración del centro de Cancerología de Xalapa, donde funcionaba hasta hace menos de un año y aunque en la dirección de administración del Sector Salud no tiene nombramiento oficial, opera como una especie de asesora de Ricardo Sandoval.

Judith es una de las figuras más prepotentes de ese sector, donde su estilo choca con los proveedores, los que hacen larga fila de varias

horas, esperando concertar cita, sin conseguirlo muchos de ellos.

La flamante servidora tiene tal control que despacha sin consultas de ninguna clase, ni cargo de conciencia al personal que no es de su agrado o al que se atreve a desobedecer sus órdenes.

Parrazal Herrera es, curiosamente, esposa de Jorge Alberto Shaddid Manzur, administrador del Seguro Popular en Veracruz.Y es que en Veracruz sucede de todo, ya que es una de las entidades que mayor castigo aplica a sus proveedores de servicios de toda clase, lo que mantiene una gran carga de deuda.

Por eso, muchos proveedores prefieren caer en las estrategias de Ricardo Sandoval,  Juan Manuel del Castillo y Judith Parrazal, ya que llevan meses y hasta años sin cobrar las facturaciones pendientes de productos que proveyeron a la administración estatal que encabeza Javier Duarte de Ochoa, misma que culmina el 30 de noviembre del presente año.

El escándalo en Veracruz sale a la luz pública y las observaciones que se le hacen a Juan Manuel del Castillo no podrán ser cubiertas por el manto del fuero, ya que esa figura está a punto de extinguirse en Veracruz, sin importar que se trate del gobernador, los diputados locales o presidente municipales.

Habrá que estar atentos para saber si se  realiza una investigación a fondo sobre estas corruptelas desde el gobierno de Javier Duarte de Ochoa o si se diluye hasta la llegada del nuevo gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, quien podría encontrar en Juan Manuel del Castillo González uno de los principales peces que lleven directo a cumplir con su promesa de campaña de llevar a la cárcel al gobernador Duarte de Ochoa.

MOJICA, INTERINA EN EL PRD

Beatriz Mojica asumió la presidencia del PRD, ante la renuncia de Agustín Basave y lo hará por los próximos 15 días, cuando las cúpulas del partido se reúnan para designar al que será presidente interino del partido.

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